Capítulo 92

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Creditos a MirelyGuez

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Por la noche, el viento soplaba con fuertes ráfagas del norte, y gradualmente, perlas de nieve comenzaron a descender de los cielos. Todas las doncellas y los eunucos del palacio ya se habían retirado para descansar, excepto para aquellos que bailaban asistiendo a sus amos. En todo el extenso complejo del palacio, solo unas pocas luces seguían brillando y no se escuchaba ningún sonido. Para los habitantes del palacio, esta fue una buena noche para deleitarse con las alegrías que se encuentran entre las colchas de sus camas.

Wanyan Xu vigiló a Su Yi desde el frente de la cama, limpiando cuidadosamente las gotas de transpiración que rodaban por su frente. El fuego de la impaciencia ardía en su corazón, el dolor ya se había prolongado durante varias horas, pero aun así, no parecía estar mostrando señales de disminuir.

─ Su Su, si tienes dolor entonces solo grita. Puedes gritar, no necesitas retenerte por mi bien. No debes preocuparte, no volveré a ser el hombre cobarde que viste anteriormente, tú ... deberías gritar ─. Abrazó a Su Yi, con cuidado de colocarlo en la posición más cómoda posible. Las manos de las dos personas estaban entrelazados y, como era normal en esos momentos, los dos se convirtieron en el pilar del otro en el que podían apoyarse.

─ No ... no importa, no es ... tan doloroso, tú ... no deberías creer lo que dijo Xia Er ─. Su Yi apretó los dientes y soportó el dolor, logrando forzar una sonrisa suave Con un esfuerzo, le dio un par de apretones a la mano rígida de su amado, ofreciéndole consuelo y dijo: ─ Wanyan ... ¿Sabes? En su momento estoy ... sin pensar en el dolor, estoy pensando en otro asunto ...─. Levantó las manos que habían juntado y dijo: ─Tú ... Cuando ves esto ... ¿en qué piensas? ─.

Wanyan Xu permaneció en silencio, después de un largo tiempo, Su Yi se echó a reír y dijo:

─ ¿En realidad no lo sabes? Realmente ... realmente tan tenue ...─. Antes de que pudiera terminar de hablar, Wanyan Xu le dio un suave beso en la frente y dijo:

─ ¿Cómo podría no saber de qué está hablando, Su Su, cómo podría no saberlo? Estaré sosteniendo su mano y envejeciendo junto a ti, hasta que la muerte nos separe ... ─. Antes de que pudiera terminar de hablar, una lágrima cayó de su ojo y, casualmente, cayó sobre el labio de Su Yi. Acurrucó su cabeza contra el cuello de Su Yi y dijo: ─ Sí ... sí. Su Su, nos mantendremos juntos así hasta que ambos envejezcamos. Mientras viva, nunca te decepcionaré; tú también ... tampoco debes olvidar nuestro pacto de estar juntos ya que nuestro cabello se vuelve blanco ─.

Su Yi originalmente tenía la intención de calmar a Wanyan Xu, pero él no podía haber adivinado que sería conmovido al punto de llorar. Aunque Su Yi también se sentía abrumado por las emociones, pero aun así, tuvo que contener sus propias lágrimas y dijo con una sonrisa:

─ Mírate, ese es un dicho tan empalagoso. Que lo recuerdes en este momento, incluso si no te ríes de mí por no ser original, aún no necesitas emocionarte tanto. Los dos hemos llegado tan lejos juntos, en realidad, ¿todavía es necesario decir estas palabras en este punto? ─. Pensó un momento y de repente le dio un beso en la mejilla a Wanyan Xu y dijo suavemente: ─ Que el corazón de mi señor sea igual al mío, seguramente entonces nuestro anhelo no se encontrará con la decepción ─.

Su Yi siempre había sido taciturno y autosuficiente; una y otra vez, había puesto barreras contra Wanyan Xu. Aunque una vez había profesado su amor por él, había sido porque estaba seguro de que iba a morir y, por lo tanto, se había permitido revelar sus verdaderos sentimientos de manera efusiva. Pero de repente estaba diciendo que sus afectos estaban impregnados de un amor tan profundos como el océano, ¿cómo podría Wanyan Xu no sentirse abrumado por el favor mostrado por un ser superior? No pudo contenerse, con entusiasmo tomó a Su Yi en un abrazo mientras murmuraba:

War Prisoner 「ℰ𝓈𝓅𝒶𝓃̃ℴ𝓁」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora