La música se escuchaba fuerte, podía sentir como esta retumbaba en mi cabeza, también pude sentir la mano de Josh agarrando la mía para guiarme a través de la gente. Llegamos a un lugar oscuro y donde probablemente nadie nos veía bailar, la música era algo rara por lo que ninguno de los dos sabia como exactamente bailarla así que solo nos movíamos, hasta que pusieron una de mis canciones favoritas.
Ese era mi tema y podría decir que mi cuerpo no le hacía caso ni a mi conciencia ni a mi cerebro, yo simplemente me movía al ritmo de la música. Podía ver como Josh me observaba, su miraba emanaba sexo.
También pude observar que otro hombres se le sumaron a Josh, cuando él se dio cuenta no lo pensó dos veces y se me pegó.
Su pecho contra el mío, mis piernas a cada lado de las suyas... Subiendo, bajando, con movimientos circulares; era como hacer el amor pero con ropa. Joder, estaba tan caliente...
Me di vuelta lentamente, dándole la espalda a Josh, el cual aprovechó la situación y se pegó lo más que podía. Prácticamente le estaba implorando a gritos, cada movimiento gritaba "TOMAME". Bailamos, si es que le puede decir así durante un tiempo, hasta que de repente algo en el pantalón de Josh comenzó a mostrar interés por mí.
Al momento que sentí a su querido amigo ya nos estábamos moviendo hacia la barra, pero no exactamente dónde todos estaban pidiendo sus tragos, sino un poco más allá dónde lo oscuridad se ocupaba de que los demás no vieran nada. Cuando llegamos allí todavía estaba agarrado de la mano de Josh y entre las luces que se prendían y apagaban él pudo ver mi cara de confusión.
Pero entendí todo cuando me tomó en sus brazos y me acercó a él, después comenzó a besar mi cuello de una manera que nunca lo había hecho antes mientras me empujaba con sus caderas hacia la barra. Entre gemidos agarró mis piernas y me subió a la barra dónde comenzamos a besarnos desesperadamente, queriendo más del otro, más y cada ves más.
No me pude controlar, la emoción de estar de esta manera en un lugar público arrasó con lo poco que quedaba de mi voluntad. Perezosamente metí mi mano en su camisa hasta llegar a sus pectorales, los cuales acaricié, seguí subiendo hasta que mi mano salió por el cuello de la camiseta y llegó a su cuello, dónde hice fuerza para que se pegara más a mí, y para que el beso fuera aún más fogoso, clave mis dedos en su cuello mientras bajaba la mano lentamente desde su cuello, por su fornidos pectorales hasta sus trabajados abdominales.
Pude sentir sus manos que se encontraban en mis rodillas encontrar su lugar debajo de mi camiseta. Sus manos se paseaban desde mi pecho hasta la orilla de mi pantalón, mientras yo solo trataba de llegar a su cinturón.
Cuándo toqué el frio metal de su cinturón, pensé que estaba dispuesto a sacarlo y hacerlo en ese mismo lugar; pero antes de que pudiese terminar de desabrocharlo, Josh me detuvo, tomando mis manos en las suyas, acercándose a mi oído y susurrando lo suficientemente fuerte para que yo lo escuchara –No así... no aquí.
Subí la mirada y de repente la lujuria y el sexo que emanaba de sus ojos más temprano habían desaparecido como por arte de magia. Ahora en su lugar había ojos cálidos, llenos de vergüenza y perdón.
¿ACASO ESTE HOMBRE QUERIA JODERME LA VIDA? ¿ACASO QUERIA DEJARME CALIENTE NUEVAMENTE?
-¡JODER JOSH! ¿CUÁL ES TU PROBLEMA? –grité mientras lo empujaba y me bajaba de la barra acomodándome la ropa.
-¿Acaso planeabas hacer lo mismo que la otra noche? Mierda, eres un imbécil –dije dándome la vuelta para largarme, pero su mano en mi brazo me detuvo.
-Tyler no estas entendiendo, yo simplemente... -lo interrumpí.
-¡Cállate! No quiero escucharte, no quiero escuchar nada que venga de tu boca en esto momentos. Estoy increíblemente furioso y no quiero que la cagues mas ¿entendido? Ahora déjame ir –lo mire a los ojos.
Sus ojos reflejaban temor, arrepentimiento y ¿pena? Pero su mano seguía en mi brazo -¡QUE ME SUELTES JODER! –dije gritando.
Unas pocas personas me escucharon gritar, no quería armar de esto un escena. Por lo que hice fuerza y me solté de su mano. Caminé hasta la barra y comencé a pedir tragos de los cuales no sabía que contenían, solo me guié por los colores lindos de estos. El primero fue de un rosa fuerte, el segundo de un celeste flúor, el tercero medio naranja, el cuarto rojo y amarillo, y creo que el quinto era transparente. Seguí tomando pero simplemente no me acuerdo el resto de los colores.
