Capítulo 5

17.3K 682 9
                                    

Siempre que me coloco, me aseguro de no beber mucho alcohol y funciona a la perfección. No recuerdo haber tenido ninguna revelación o algo parecido, pero hoy, creo que es una alucinación lo que verán mis ojos a continuación.

— ¿Buscas esto? — doy media vuelta y ahí está Jason, sentado en el borde de la cama de Emily, sonriendo como un desquiciado —. Debes pedir por favor si quieres cogerla. Es única — vuelve a sonreír de manera aún más siniestra.

— No estoy de humor Jason, abre la maldita puerta — finjo estar despreocupada —. No tiene gracia. Si quieres asustarme por dejarte en evidencia, supéralo y ya.

— ¿Asustarte?, ese no es mi propósito. Créeme, cuando sepas cuál es lo que me mueve ahora mismo, no te lo creerías — en mi campo de visión aparece Carlos el mejor amigo de Jason, no sé de dónde cojones sale, pero está en la habitación. ¿Estaba escondido en el armario esperando a que ocurra esto?, otro imbécil.

— Jason... — me acerco a él —. No entiendo a qué viene esta actitud, pero tú y yo tenemos una historia — se pone a reír como un loco de atar.

— Una historia, tú misma lo has dicho, HISTORIA. Eso es pasado, cielo. Ahora mismo estoy cabreado y no tienes ni idea de lo que estamos pensando — se levanta rápido de la cama y me agarra los brazos con mucha fuerza —. Hace dos días, me habría puesto enfermo si alguien quisiese hacerte  daño. Me habría vuelto loco si llegara a enterarme de que alguien, quien sea, quisiera lastimarte — miro sus pupilas, están dilatas —. Pero hoy, hoy eso me da igual porque ya no me importas, puedes estar muriéndote y yo mismo te remataría con mis propias manos y disfrutaría, disfrutaría viendo cómo sufres. ¿Sabes porqué?, porque eres una puta y no te mereces que me preocupe por ti.

— Veo que me has superado y estás dispuesto a hacerme sufrir — digo con una fingida despreocupación. Me está haciendo daño, el muy idiota es muy fuerte.

— No sabes cuánto — su cara de loco deja bien claro que me arrepentiré de haber pisoteado su ego —. No te imaginas las ganas que tengo de disfrutar de este cuerpo que tanto he deseado — al decir eso, olisquea mi pelo y mi cuello. Yo solo aparto mi cara de la suya.

- Ni en tus mejores sueños puedes tenerme Jason, sabes que yo jamás voy a ser tuya. Te guste o no, nunca me vas a tener— y es la verdad, antes muerta que acostarme con él.

Puedo notar que he vuelto a pisar su ego, un poco, pero lo he alcanzado. No hay nada más peor que herir alguien con lo que más anhela y yo soy una experta.

— Ya lo veremos — me suelta los brazos pero no se aleja. Aún tiene la llave en su mano.

Carlos está apoyado en una pared continua a la puerta y ésta está detrás de mí. Tengo una idea, loca, pero es una idea.

— Si querías que yo te viera como hombre, debiste comportarte como uno y no como un niño caprichoso y mimado hijo de su padre.

— Habló la Miss Independiente — el sarcasmo de su comentario hace que él se gire para mirar a su amigo, situación que aprovecho para quitarle la llave y tirarla bajo la puerta.

Jason observa la estupidez que acabo de hacer y comienza a reírse a carcajadas, parece un demente. Su amigo no se queda fuera y hace lo mismo.

Normalmente parece un idiota que ha perdido el juicio, solo que esta vez es peor. La que no saldrá ilesa de aquí, soy yo. Seamos realistas, no saldré de aquí bien parada.

— Eres una zorra estúpida — me abofetea en la mejilla derecha —. Nos has dejado encerrados, aunque eso es bueno. Para Carlos y para mi amiguito, cariño— aguanta su paquete. Su "amiguito" está muy despierto. Trago saliva.

1º. Mi Chófer (Bilogía Empleados) [editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora