Las cosas no podían empeorar más que en estos momentos, no tenía a nadie en quien confiar, mi única mejor amiga de toda la vida había bloqueado cualquier contacto conmigo, ¿la razón? todavía sigo tratando de averiguarlo, pero desde ese día en casa de sus papás, no he podido contactarme con ella, tenía demasiadas cosas que quería contarle.
La situación con Matt era algo extraña, había fiestas cada fin de semana sin falta, yo sabía que no podía entablar conversación con ningún otro chico, lo aprendí cuando un viernes Matt se había encerrado con sus amigos en la habitación que tenía prohibida la entrada, estaba en la sala tomando unos cuantos tragos y platicando con unas chicas que estaban igual de tomadas que yo, así que la conversación era de lo más alegre, a mi lado se sentó un chico alto, musculoso, de cabello castaño oscuro, sus ojos de color verde y unos labios carnosos; pasó su brazo sobre mi hombro y comenzamos una plática bastante interesante sobre diversos temas, tenía tanto tiempo que no tenía este tipo de conversaciones que me sentí en un ambiente cálido.
De un momento a otro me invitó a bailar así que nos paramos para mezclarnos con los demás invitados, estábamos bailando demasiado pegados puesto que él me atrajo por la cintura y yo lo tomé por la nuca para acercarlo, bailaba acercando demasiado mis caderas a su cuerpo tratando de provocarlo, no sé cuánto tiempo pasó pero de repente sentí un fuerte jalón que me despegó de este chico; pude ver a Matt propinándole una buena paliza que lo dejo inconsciente, sus amigos lo sacaron y Matt me tomó del brazo violentamente para llevarme a la habitación, al cerrar la puerta me empujó contra el tocador.
Solo pude aferrarme al mueble en lo que él subía mi vestido y me embestía por detrás, sin ningún tipo de delicadeza, apretaba fuerte el tocador para aguantar el dolor mientras lágrimas corrían por mis mejillas, cuando terminó simplemente me aventó a la cama y se fue no sin antes haberme encerrado con llave en la habitación.
...
Mi vida había cambiado demasiado, podía darme cuenta empezando por la ropa que ahora llenaba mi armario, crop tops, shorts, faldas demasiado cortas y vestidos que no dejaban casi nada a la imaginación; tenía que usar zapatillas todo el tiempo puesto que no sabía que había sucedido con toda mi ropa desde aquella vez que la estaba buscando, tampoco supe de quien era la ropa que había encontrado, sólo un día Matt había llegado con toda esa ropa diciéndome que la ropa que tenía era inservible.
Nos la pasábamos la mayoría del tiempo bebiendo, pero cuando por algún descuido se nos había pasado comprar alcohol en la tienda, solo se desencadenaban peleas que terminaban en tener sexo de una forma demasiado intensa, no sabía si lo disfrutaba o me estaba lastimando, sólo sé que ambos teníamos demasiadas marcas en nuestros cuerpos que nos habíamos proporcionado el uno al otro y lo peor era que no eran cualquier tipo de marcas, nos proporcionábamos esas marcas haciendo sufrir al otro, sangrando el cuerpo del otro, todo esto con el objetivo de marcar nuestro territorio, en mi caso era para que ninguna pronta se le acercara a Matt.
No solo mi vestimenta había cambiado, comencé a usar maquillaje bastante excesivo para destacar mis rasgos, en especial mis ojos verdes, obviamente no podía cubrir las marcas porque Matt se pondría histérico.
Al poco tiempo Matt me había traído a la casa un regalo. Me emocioné de inmediato por imaginarme que podría ser, abrí la bolsa y me encontré con un tinte rubio, un tono bastante claro, junto a este se encontraban unas tijeras.
-Considero que necesitas un nuevo estilo –me dijo Matt al oído mientras me abrazaba por detrás.
No lo dudé ni un segundo, corté mi cabello hasta los hombros y coloqué el tinte, ahora sería una rubia que encajaría perfectamente en las fiestas de mi novio. Que alegría sentí al ver ese cambio.
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Robbers © #NightAwards2k19
Short StoryDecisiones. Todos debemos tomar decisiones en la vida, aunque no muchos tenemos la oportunidad de decidir. Muchas veces nuestra vida toma un rumbo distinto al que queremos. No es nuestra culpa. Simplemente llegan las personas equivocadas en el momen...