Everyland ࿐ · Yoonmin

OCHO

Yoongi abrió los ojos al sentir que alguien sacudía su cuerpo, y se encontró con la mirada angustiada de Jimin frente a su cara

— ¿Qué…? — dijo incorporándose un poco.

— ¡Por fin! — Jimin soltó un fuerte suspiro y le ayudó a sentarse — ¿Te encuentras bien? Llevo media hora intentando despertarte, y no respondías a nada. Me has dado un susto de muerte.

— Bien, lo siento… — Jimin parecía a punto de echarse a llorar, y para sorpresa de Yoongi le abrazó con fuerza mientras seguía hablando sin parar — No vuelvas a hacerme esto Yoongi, de verdad que me has asustado, no sabía que hacer, no sabía si ibas a volver a despertarte.

— Vale, vale, tranquilo Jimin — contestó Yoongi devolviéndole el abrazo con timidez — estoy bien, en serio, es solo que…

Jimin se apartó un poco de él para mirarle a los ojos, y Yoongi sintió que su cuerpo le echaba de menos inmediatamente, habría preferido que le siguiera abrazando durante un rato más.

— ¿Has vuelto allí?

— ¿Eh? — dijo apartando esos pensamiento de su mente.

— A Seúl. ¿Estabas allí? — Jimin le miraba con tristeza mientras le preguntaba.

— S-si Jimin. Estaba allí.

— Oh — Entonces Jimin le soltó y se apartó un poco, bajando la mirada al suelo.

— Eh, Jimin — Yoongi no podía aguantar la sensación de haber hecho algo que entristeciera a Jimin — Mírame — dijo sujetándole la cara con las dos manos y obligándole a levantar la mirada — No pasa nada, ¿Bien? Ya estoy aquí otra vez.

Jimin asintió, pero volvió a bajar la mirada — No querías volver — dijo en un susurro.

— ¿Qué? ¡No! ¡Jimin, por supuesto que quería volver!

— Pero no podía despertarte.

— Pero no es por eso, Jimin. Es como… no sé muy bien cómo funciona… solo voy de un mundo a otro cuando me duermo, y… bueno… he tenido que encargarme de algunas cosas antes de poder dormirme allí. No he podido hacerlo antes, de verdad.

— ¿Querías volver? — Jimin parecía algo esperanzado esta vez.

— Claro que quería, Jimin. Es lo único en lo que podía pensar desde que he despertado en Seúl, en volver aquí.

Esto último hizo que Jimin sonriera aliviado, y Yoongi prácticamente se quedó hipnotizado por su sonrisa.

— Dios, deberías hacer eso más a menudo.

— ¿Hacer qué? — preguntó Jimin frunciendo el ceño extrañado.

— Sonreír. ¿Sabes que tienes una hermosa sonrisa? — Jimin volvió a sonreír, dejándole sin habla — Si… así. – dijo con la mirada fija en su boca.

Jimin se sonrojó y desvió la mirada avergonzado — Creo que será mejor que nos pongamos en marcha, se ha hecho un poco tarde, y son muchas escaleras hasta llegar a Rhunnin.

Yoongi salió de su ensimismamiento cuando vio cómo Jimin se levantaba y empezaba a recoger sus cosas.

— Eh, si, claro, será mejor que nos demos prisa.

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La subida a Rhunnin estaba siendo bastante tranquila. En un principio, a Yoongi le costó un poco acostumbrarse a la sensación de ir andando por una plataforma suspendida en el aire. Así que durante la primera hora, se negó rotundamente a apartarse del centro de las escaleras, y mantenía en todo momento la mirada fija en el centro, mientras aguantaba las risas de Jimin que le tomaba el pelo sin parar.