Cap 20: La aldea

5 2 0
                                    

Por fin, después de tanto sudor y todo lo que tuvimos que caminar, a lo lejos se vio una aldea.

Manuel: ¡Sí, eso es! -dije mientras me tiraba al suelo de rodillas y con las manos apuntando hacia el cielo- ¡¡¡Gracias!!!!

Finalmente veía la luz al final del túnel, como si todo tuviera sentido. Me llené de alegría y caminé más rápido. Sentía que los pies ya no me pesaban y me podía mover con facilidad. Ya no sentía calor, ni el suelo caliente. Ya no sentía nada. Nada en absoluto, como si me hubieran puesto un suero que me hubieran dado las fuerzas para seguir. Como si me hubieran dado una motivación. Cada vez que me acercaba, me sentía mejor y más fuerte. Hubo un punto en el que incluso podía correr. Ravin iba atrás de mi y yo al frente.

Manuel: ¡Más rápido, Ravin! -dije mientras corría emocionadamente- ¡Dale, Ravin!

Ravin: ¡Sí, eso hago! -dijo mientras le bajaban las gotas de sudor-

Manuel: El último en llegar se convierte en tocino 🥓 -dije retándolo-

Ravin: ¡Tu lo pediste!

De momento cuando miro atrás, Ravin estaba más cerca, se estaba acercando. Aceleré pero aún así me seguía alcanzando. Parecía obra de la divinidad divina. Era algo increíble que me dejo con la boca abierta. Incluso se acercó tanto, pero tanto que llegó hasta un punto que estaba al lado mío. Como quería ganar, con mi mano izquierda empecé a empujarlo hacia atrás.

Ravin: ¡Oye! -dijo quejándose, pero a la misma vez riéndose- ¡Eso es trampa!

Yo también me estaba riendo. Cada vez que se acercaba hacía lo mismo. Él también era un tramposo porque me jalaba por la camisa. Hasta que llegamos. Honestamente no se quien ganó, pero probablemente sea yo. Cuando llegué, respiré profundamente para poder tranquilizarme un poco.

Ravin: Buena.......Manu.......-dijo dándome una palmada en la espalda-

Manuel: Tu.......tan........bien......, Ra.....vin....      -contesté fatigado-

Ravin: Bueno, pues.......finalmente......llegamos......, sen.....temos....nos

Manuel: Buena......idea.....

Nos sentamos en un banco de piedra en la playa en el centro del pueblo. Nos tomo unos minutos para poder recuperarnos, pero finalmente lo logramos. Se pasó bien. Luego de coger aire, decidimos tomar agua del pozo. Tiramos el balde y con una soga lo elevamos. Ambos nos refrescamos y obviamente continuamos nuestro recorrido. Ya por lo menos, podíamos hablar sin que nos falte el aire. Empezamos a dar nuestro primeros pasos.

Miré a mi alrededor y vi que llegamos a una aldea muy pobre y de escasos recursos. Aunque tenían una buena estructura sólida. Sí, aunque no lo creas, tenían hermosos templos con hermosos vitrales coloridos. Parecía como si estuvieran llenos de magia. Se veía sólido y estable. El templo parecía estar hecho de algún material sólido y resistente, como el cemento, pero no lo era. Algo como piedra o ladrillo o algo así. Todo estaba sólido. No habían carros, al menos no muchos. En todo lo que habíamos caminado, solo pasaron dos o tres autobuses.

No había teléfono, ningún tipos de tecnología. Ni siquiera radio; bueno al menos no muchos. La gente hablaba en otro idioma. Todos nos miraban raramente, como si estuvieran extrañados por nuestra forma de vestir y caminar. Usaban batas blancas, colores pasteles y llamativos. Se veían sucias y con rotos. Algunos usaban sandalias, otros iban descalzos. Podías ver hambre y miedo. Algunos estaban deshidrato y en huesos. Algo raro de ellos, era que apestaban. El agua es escasa.

Habían puestos de comida, viandas y frutas. No habían edificios no compañías grandes o conocidas. Los vianderos nos ofrecían todo tipo de cosas: telas, comidas, reliquias....etc.....
Nosotros acertábamos con la cabeza, aunque no los entendiéramos. Honestamente para ser sincero, no sabían ni donde estaba. Ni a dónde íbamos. Solo estaba siguiendo a Ravin, que no había dicho ni una sola palabra desde que llegamos.

Manuel: ¿Hacia donde nos dirigimos? -pregunté directamente- ¿Cuál es el plan?

Ravin: ¿Plan?

Manuel: ¿Tienes un plan, no? -dije esperando que no me dijera que no-

Ravin: Claro que tengo un plan -dijo seguro de sí mismo- Tenemos que volver a la base pero primero, debemos hacer una parada....

Manuel: ¿En donde?

Ravin: Allí -dijo mientras que con su índice, apuntaba una casa en especifico-

Manuel: ¿Allí?

Ravin: Sí, justo allí -dijo y luego, cambiando de tema me dijo- Si te ofrecen comida, diles que ya comiste-

Manuel: ¿Que no? -dije- pero si tengo hambre......—

Ravin: Su comida es.......¿como te lo digo?......como.......—

Manuel: ¿Mala?

Ravin: No -contestó- si no que, un poco fuerte para el estómago

Manuel : No puede ser.......-dije tratando de aguantar mi coraje- Me estás tratando de decir que me llevas a casa de un amigo tuyo , después de recorrer todo el jodio desierto, y esperas que no coma.......

Ravin: Eso mismo - dijo contento- Veo que entendiste

Manuel: No te he dicho que te odio

[...]

Ravin: No Manu, no -dijo gritando y rogando por su vida- No....Ahhhh

Arrojé a Ravin por el pozo y solté la soga para que no pudiera salir. Me fui como todo un hombre. Con gafas negras y una música de fondo brutal.

[...]

Ravin: Manu.....Manu.....- y cada vez gritaba más fuerte- Manu...MANUUU..

Volví en mi y Ravin estaba frente a mi gritándome y tratando de poner mi atención sobre él.

Ravin: ¿Estás bien, Manu?

Manuel: Sí.....-dije un poco desorientado pero luego con firmeza- ¡Sí, claro!

Ravin: ¿Seguro?

Manuel: Sí -afirmé-

Ravin: Pues vamos a seguir

Honestamente, tenía ganas de tirarlo por el pozo, pero no lo hice.

Me puse a contemplar las cosas, ya que nunca había ido a este lugar. La mayoría de las casas están hechas de bloques. A algunas cuantas le faltaban bloques y otras estaban abandonadas. Se olía el olor a comida con aromas que te enamoran de la primera olfateada. Veías mujeres buscando agua en el pozo y cargando vasijas en sus cabezas. Unas tenían hermosos ojos azules y claros. El resto los tenía "hazel" y marrones claros. Usaban batas de diferentes colores...como turquesa....violeta claro...blanco, incluso de colores raros y llamativos de los que no te podría describir. Colores hermosos, nunca antes vistos. Me enamoré de sus colores.

Ravin: Aquí es -dijo mientras caminaba lentamente-

No me gustaba esa casa. No había nadie a su alrededor. No se escuchaban risas. No se veían niños pequeños jugando y correteando. Solo tenía una cortina blanca por la que no se podía mirar más allá. La casa no se veía bien arreglada, ni pomposa. Ravin se acercó tranquilamente para tocar la puerta.....

//////////////////////////////////////////

Hola chicos😄 espero que les haya gustado 😘 este capítulo....Me lo pueden dejar saber en los comentarios y en las estrellas 🙈

Voten🌟

Los quiero muchos 💖

CoolKiara12

Escape del PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora