Satisfecho con su vida ordinaria, Jinhwan es una especie de gusano. Sin embargo, su cómodo estilo de vida se desvía de repente cuando accidentalmente se sumerge en el mundo de las sirenas. Enredado en una maldición, Jinhwan aprenderá que el mundo pu...
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▬POR JINHWAN▬
Era extraño. Muchas cosas habían cambiado en ese entonces pero siempre regresaba a mi rutina normal. Era como si mi cuerpo se hubiese movido por sí mismo y mi mente hubiese ido junto con él hasta el punto en el que no sabía si lo estaba haciendo para tranquilizarme o si era sólo porque me sentía obligado.
«¿Estoy contento con la forma en la que soy?» Me pregunté hallándome detrás del gran ventanal de la tienda, observando con detenimiento el paisaje que se plasmaba en mi mirada: el paisaje de un día nublado y gris, sin embargo, era un paisaje en el cual se podía observar el cómo las personas seguían su rutina diaria sin problema alguno.
—¡Eep! —exclamé al sentir el cosquilleo de unas pequeñas plantas esparcirse por toda mi mejilla. Mi cuerpo había dado un ligero salto a causa del pequeño e inofensivo susto.
—¡Jaja! —rió aquel chico de voz rasposa y con una enorme sonrisa—. Buenos días, Jinan. Te asustaste por un segundo, ¿eh?
—Bob-bby... —agregué tímido, girando mi cuerpo para hallarme frente a él—. Uhm, s-si...
Al mirar la expresión de su rostro no parecía sospechar acerca de lo sucedido ayer, suponía entonces que aquello era bueno. Nos quedamos en silencio un par de segundos.
—Hey, Jinhwan...
—¡Oh, cierto! —interrumpí—. Ya que voy a estar todo el día fuera, quiero recordarte que hoy vienen más lilas en camino.
—...Lilas, lo tengo...
—Creo que algunos de los cubos deben cambiarse por lo que sí se puede hacer, eso sería genial —añadí en tanto hacía una pequeña anotación en una nota, misma que le cedía a Bobby segundos después—. También tenemos que llamar al proveedor al medio día para ordenar más...más....uhm...
—¿Crisantemos?
—Sí, ¡crisantemos!
En esos momentos me encontraba un poco nervioso y alterado en cierto sentido. Suponía entonces que la causa de aquello era por lo sucedido ayer y por la duda habida en mí acerca de si Jiwon sospechaba algo, pues aquello realmente me pondría en una difícil situación. Y para suerte mía, Jiwon había notado mi sentir, me conocía tan bien.
