They Exist (Terminada)

Capítulo 18

Vi el castillo del que Elizabeth hablaba, el piso de espejo reflejando aquella construcción...

_Buenos días Elizabeth_

Se levantó de mi hombro, miró alrededor y se restregó los ojos con las manos, _Buenos días Zack_

Metió su mano a su bolsillo y sacó un paquete de galletas y una caja de leche pequeña, _ ¿Me pregunto, de donde sale tanta cosa?_, solo se rio y me paso las galletas y la caja de leche, la disfruté.

_Tenemos que movilizarnos, si seguimos varados aquí podemos correr el peligro de que nos encuentren_, terminé de decir eso y Elizabeth ya se estaba parando, nos quitamos la sábana y la arrojé al suelo, ahí quedo, con manchas de tierra y pintura, mal doblada y deformada en el piso.

_ Zack... pero, ¿A dónde iremos?_, tenía la mano en la puerta, muy dispuesto a abrirla y salir por ella.

_Vamos al gimnasio, tal vez ahí encontremos algo, alguna pista y además podremos encontrar más cosas con las cuales nos podremos proteger_

No me alegó en especial por que tenía razón, la escuela fomentaba mucho el deporte así que podía haber algo que nos sirviera, ya sean lanzas, pelotas muy pesadas y cosas por el estilo, incluso el filo de los patines de hielo pueden servir.

Abrí la puerta y el día era extraño, ni Elizabeth podría ver la hora que es, pues el sol estaba completamente cubierto de una espesa masa de neblina, hacía mucho frio y las nubes cargadas de agua amenazaban con dejar caer una gran llovizna, revisé que nada nos siguiera o que algo esperara detrás de la puerta, salimos y comenzamos a caminar hacia la vereda principal, cuidándonos de que nadie viera, subimos hasta llegar al GYM, o al edificio de este.

_Maldición_

Exclamó Elizabeth al darse cuenta de que la puerta estaba cerrada.

_Tal vez si rodeamos se encuentre una ventana abierta_

Me miró creyendo que no era mala idea, ¿O tal vez agrego pensamientos en ella? Pensamientos que yo quiero escuchar.

Rodeamos el gimnasio por la cancha de futbol, nada fuera de lo normal, todo estaba en calma, (odio que todo esté en calma), miramos las ventanas que se encontraban a los lados y solo una de ellas estaba floja, pero era un poco alto para que los dos pudiéramos llegar hasta ella.

_Ven_ puse mis manos juntas para hacer una especie de puente, _Pon tu pie sobre mis manos, te ayudaré a subir_, puso su pie como le dije, era un poco pesada, pero no era su culpa, mi condición física siempre fue muy pésima.

Aun me pregunto si es buena idea dejarla sola ahí dentro, tal vez no corra peligro, algo me dice que ella es buena peleando.

Subió un poco y escuche el chirrido de la ventada al ser empujada, metiendo un poco de resistencia hacia la mano de Elizabeth, un empujón un poco más fuerte en mis manos y dio un salto que la dejo medio cuerpo dentro de la estructura, se arrastró como un gusano, esperó y avanzó.

Corrí hacia la entrada principal, esperando que la que me abriera la puerta fuera Elizabeth y no alguno de ellos con su cabeza en mano.

De pronto, escuche un chasquido, un crujido y la cara de Elizabeth se asomaba tras la gran puerta gris.

_Pan comido_

_Esperaba que no murieras_

Me dio un golpe ligero con su puño.

_Tan débil crees que soy, rápido entra, parece que no hay nadie aquí, es seguro, busquemos lo que necesitamos_

El lugar era muy grande, casi no frecuentaba esta zona, era para todos en la escuela, pero yo no ocupaba perder peso, si no ganarlo, aun así no me gusta el ejercicio.