amor inesperado

cap 6

Pasaron las semanas en donde ningún incidente se presentó, lo cual a todos los tenia satisfechos, las visitas de Finny y Bart se hicieron más frecuentes y después de un par de visitas más, era demasiado evidente que el pequeño Finny había sido marcado por su pareja y que era un 90% probable que estuviera en cinta.

Para ponerle la cereza al pastel, un fin de semana, disfrutaban de un desayuno en el jardín de la casa de los omegas, cuando Finny sin avisar corrió adentro de la casa usando el baño, vi la cara de Bart queriendo correr a ver a su omega, pero Ciel lo detuvo.

─si sabes lo que está pasando ¿verdad, Bart? ─lo dijo de una manera tan tranquila y sin quitar sus ojos del plato del que estaba comiendo.

─no, no sé. Hace días que esta raro y no me quiere decir que tiene. Tampoco quiere que lo toque. ─dijo claramente preocupado aquel alfa.

Ciel suspiro, ─« ¿Cómo es que hay alfas que no saben de estas cosas? ¿Y así pretenden cuidar a sus omegas?» bien, te lo explico. Está en cinta.

─ ¡Ciel! ¡Esas noticias no se dan así! ─decía Trancy cuando vio la cara de Bart aún más preocupada.

─mira, iré a verlo yo, lo...tranquilizare para ti y espero que quiera regresar. Si no, lo dejare en mi habitación descansando y más te vale ser bueno con él.

El omega ya mencionado, solo cerro los ojos, asintió y se quedó más tranquilo. Los otros dos alfas se quedaron viendo entre si y decidieron quedarse con el alfa ofuscado.

Pasaron los minutos y Finny no regreso, se quedó descansando en la cama de su amigo mientras el regresaba a la reunión. ─le explique lo que estaba pasando, ya que al igual que tu pensaba que era un mal estomacal, debo informar que al principio quería salir corriendo pero lo calme y entendió lo que pasaba. Ahora te toca a ti su pareja calmarlo, amarlo, complacerlo y mimarlo.

Bart tampoco era de muchas palabras así que solo se dirigió a donde estaba su omega y cuando creyó que no lo veían apresuro el paso.

─ ¡alfas! ─siguió comiendo ya que había llegado la hora del postre y ya todos habían tomado el suyo menos él. No era un chico normal, ya que el ser un omega, no le quitaba clase, gracia y porte. Eso derretía a su pareja y de alguna extraña manera sin estar realmente conectados podía sentirlo.

─ ¿Cómo esta Finny? ─dijo Sebastián mientras después del desayuno, ayudaba a secar los platos.

Mientras tanto, Ciel estaba perdido en sus pensamientos, pensando en cómo sería ser madre, tener una pequeña vida dentro de él y que cada día fuera creciendo y sentir todo ese proceso. Pero a pesar de todo, no quiera demostrar sus verdaderos sentimientos ya que aún se sentía inseguro respecto a Sebastián.

Su pareja se estaba conteniendo demasiado en querer tocar a su omega, un abrazo, una caricia, un beso, se conformaba con solo eso, pero no sabía si podía hacerlo, no quería al pequeño grillo cerca de el de nuevo. El omega mayor sabía las intenciones de su pareja, estaba comenzándose a ponerse nervioso y por alguna razón que aún no quería entender, su corazón saltaba cada vez que pensaba en que su alfa podía abrazarlo o tocarlo, pero por desgracia, el alfa no se arriesgó.

Un dolor agudo se sintió en el corazón del omega, al ver que su alfa se fue a ver a los demás y a él lo dejo en la cocina. ~ ¡Cuántas veces te dije que no fuera grosero con el! ~ sollozaba el omega interno de Ciel y por primera vez acompañaba a su omega en el dolor inmenso que le provoco que su alfa no intentara tocarlo. ~ ¡Te dije que lo ibas a cansar!~

─ ¡callate, ya se, ya se! Lo arruine. Pero también se como arreglarlo. ─se limpió las manos que tenía mojadas por haber lavado los platos y boto el trapo decidido a que su alfa le volviera a hacer caso.