Mente Zombie

La forma de las cosas por venir

Pov.Edson

Abro el maletín amarillo, en el acto caen muchas piezas de diferentes tamaños al suelo ¿Pero qué carajos? ¿Qué es lo quieren que haga? Agarro varios fragmentos rectangulares de plástico con varios cables...esto me parece conocido, las piezas que salieron del maletín son tarjetas madre como las que tienen las computadoras de escritorio. Abro otra de las cajas saco el aserrín que tiene dentro hasta que veo varios teclados como lo supuse quieren que arme una computadora. Probablemente una vez que la encienda es posible que aparezcan algunas opciones que me den alguna ventaja. Empiezo a abrir las cajas y a sacar todo lo que tienen adentro. Algunas piezas sé que son, no soy tonto: Teclado, mouse, bocinas, procesador, monitor, la pantalla. ¡Pero estas cosas son como de mil novecientos y Carranza! No creo que sean de este siglo, por lo menos nunca he ocupado una de estas.

En la secundaria estudié un poco de informática y se las partes más o menos, es que no puse mucha atención durante esas clases. Había muchas piezas pequeñas, pero sinceramente todas me parecen iguales como unos chips verdes. Tengo que concentrarme, empiezo a ordenar todas las piezas que conozco e intento recordar cada una de las piezas pequeñas para colocarlas en el lugar que creo que les corresponde, tarjeta de video...memoria RAM y creo que la pieza con forma de cuadrado es el disco duro. Intento prender la computadora: Nada. Tengo buscar cuál de todas las piezas encaja con las otras. ¡Puto tiempo! Debo de apurarme y pensar, o voy a tener que probar todas las combinaciones posibles.

Pov. Lucy

Me arrodillo junto al cuerpo de D y lo agarro de los hombros, le tomo el pulso: Está vivo pero inconsciente. Voy a seguir a Edson pero algo no me deja moverme, simplemente no lo entiendo es como si mi cuerpo no me obedeciera. No voy a poder alcanzarlo así, prefiero entonces enfocarme en D intento despertarlo, pero es inútil. Puedo escuchar varios gemidos y gruñidos cada vez más fuertes, me asomo por la ventana y observo como muchos zombies rodean la entrada de una de las bodegas que están cerca. Oigo algunas quejas a mis espaldas, volteo y veo a D incorporándose tosiendo un poco, se pone de pie y me pregunta

-¿Edson ya escapó?- me desconcierto ¿Por qué D sabe que Edson escapó? Por lo menos debió de confiar en que yo iba a poder encargarme de Edson sola, no solo asumir que iba a escapar.

-Pues sí, pero...-no me deja hablar, solo se pone de pie para observar las ventanas y empieza a recoger armas, se coloca su mochila al hombro antes de salir rápidamente por la puerta. Oigo que me ordena

-¡Vámonos!- empiezo a correr para alcanzarlo mientras me pongo mi mochila sobre los hombros y le quito el seguro a mi pistola de reserva, supongo que Edson me robó la mía al irse. Encuentro a D en el primer piso contemplando la puerta trasera: la única salida aunque merodeada por algunos zombies, al verme me hace una seña para que no hable y me ponga atrás de él, oigo un casi imperceptible susurro

-Abriré la puerta, esas cosas entrarán mientras nosotros escapamos por ahí- y desvía su vista hacia una de las ventanas más alejadas. – La ventana está sellada, hay que romper el cristal, ponte esto- saca de su mochila un chaleco antibalas negro- póntelo... ¿Por qué sonríes así? ¿No ves que estamos en una situación problemática?- me doy cuenta que sin querer en mi cara se había dibujado una sonrisa tonta de satisfacción: D se preocupaba por mí, me hizo tan feliz. Inmediatamente recobro la compostura y borro esa sonrisa de mi cara.

-No, por nada, me alegré de que no quisieras que muriera y sí sé que estamos en una situación problemática- dejo la mochila en el suelo, me quito la playera blanca quedándome en brassiere y me pongo el chaleco antibalas antes de volverme a vestir. Me recojo el pelo antes de ponerme mi gorro azul. Ya estoy lista. Miro a D directo a los ojos pero él evita mi mirada ligeramente sonrojado