Comer helado si qué la ponía feliz, lo amaba, los tantos sabores qué podrían existir y de los cuales ella se aventuraba a probar.
Roman la acompañaba comiendo un helado de copa, pero no cómo el qué estaba comiendo su hermana, ¡dios!, era enorme ese helado y era el tercero qué comía. Podía comer y seguir comiendo sin parar.
----- Aun sigo preguntándome cómo es qué mi hermana sigue luciendo delgada ---- Roman trataba de evitar soltar una carcajada, sonrió con la boca llena de helado.
---- Ummm ¡no lo sé! ¡Pero jamás me cansare del helado! ---- Exclamo con gran felicidad y saboreando el helado en sus labios.
----- Dime ---- limpió su boca con una servilleta ---- ¿podrías vivir en una montaña de helado de todos los sabores acaso?
Lydia se puso pensativa, girando la cuchara con su mano, Roman sonreía con amplitud.
----- Yo creó qué sí, tendría mucho helado para mí sola y con eso viviría.
----- Y entonces podrás engordar
Lydia fingió indignación y le lanzo su servilleta hecha bola a su hermano.
----- ¡Eres un bobo!
----- Pero así te gusto ---- le guiño un ojo. La joven Lydia no respondió y volvió a comer su helado qué no terminaba.
----- No tanto.
Lydia termino por fin ese enorme helado y soltó un largo suspiro pasando sus manos sobre su estómago quedando realmente satisfecha por comer.
----- ¿Quieres ir a otro lado? No se, tal vez caminar por los alrededores.
----- Creó qué el caminar me vendrá bien pero.... ----- Lydia se dejó caer totalmente en la silla, con su cabeza hacia atrás. ----- No puedo levantarme estoy qué reviento ¡Pf! ----- se quejo haciendo un gesto de explosión con su mano.
----- Por dios Lydia ----- Roman se recargo en la mesa, amaba a su hermana y qué a veces podría ser realmente tierna o infantil.
Mina estiro sus brazos y abrió & cerró sus palmas queriendo dar a entender qué Roman se pusiera de pie y la ayudara a levantarse o incluso mejor qué la cargara. Hizo un puchero, dejando al exterior su labio Y volvió a repetir su acción con sus palmas.
Roman suspiro y se levantó, sonrió jalando las manos de su hermana y ayudarla a levantarla.
----- Creó qué vomitare ---- Lydia tomó su bolso y se aferro a su hermano para salir de la tienda.
Decidiendo ir caminando a ningún lugar en especial. Sólo caminaron por ahí, Lydia miraba los árboles, el camino, las pocas personas qué andaban ahí, después sus pies qué daban cada paso al igual qué los de su hermano.
---- Cuándo éramos pequeños, me gustaba qué tú me llevaras siempre un regaló, aunque fuera lo mas pequeño, podría ser una flor, algún pequeño animal, una piedra con distintas formas.... O algo qué hicieras tu mismo, cómo aquel collar qué me hiciste ----- Seguían caminando, Roman escuchaba el relato de su hermana con atención y no evitó dejar ver una sonrisa nostálgica. Era cierto, Roman a veces buscaba en el patio de su casa alguna cosa qué le pareciera interesante o bonita para su hermana, un día se le ocurrió hacerle un collar sencillo, buscó entre las cosas de su madre algunos dijes, consiguió un hilo resistente y piedritas, cuando lo termino fue en busca de su hermana. La expresión de su pequeño rostro fue linda, aun siendo solo niños, Roman podría ser una ternura y con sentimientos, había cambiado con el pasó de los años.
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"Pᴜʀᴇ Bʟᴏᴏᴅ" [Hᴇᴍʟᴏᴄᴋ Gʀᴏᴠᴇ] || Roman Godfrey 🖤
مصاص دماءRoman Godfrey un atractivo chico de 17 años, proveniente de una familia rica, numerosa y reconocida en la gran Pennsylvania en un pueblo llamado Hemlock Grove. Sin saber que demonio vive dentro de el ni conocer su verdadera naturaleza. Mina Lydia...