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Sostuvo su cabello con una sola mano y con la otra apoyada en el retrete. Todo lo que almorzó esa mañana lo estaba  vomitando. Tenía ese desagradable sabor en su boca y un vacío en su estómago, cortó un pedazo de papel para limpiarse los labios y se levantó. Desde cuando había tenido tantos malestares, no recuerda ni la última vez que se enfermo, de niña solo eran resfriados y la receta de reposo en cama, tomando los medicamentos a su hora correspondiente. En el fondo de su habitación sonaba la musica que tanto le gustaba, abrió la llave del lavabo y tomo su cepillo dental untando pasta para cepillarse los dientes. 

---- Perfecto, felicidades Roman. ---- Levantó los brazos y los dejó caer con pesadez. En su cara se podía ver una mueca y chilló un poco al notar que sus pantalones no cerraban como antes. ---- Roman tenías razón, el helado está dando efecto.---- Se le escapo una risa, y se miro al espejo, de hecho se veía más ancha de las caderas y se sentía gorda, pesada, se tocó la barriga y simuló una pequeña llanta. ---- Terminaré como una obesa si sigo comiendo mantecado. ---- De hecho, cuando se puso el vestido de fiesta habia notado eso en su cuerpo, estaba cambiando.

Finalizó con su cambio de ropa para recoger su cabello en una cola mal hecha, después de eso bajó a la planta, para ir al comedor, su madre y hermanos ya estaban esperándola para cenar. 


---- Finjamos normalidad quieren, ¿como estuvo su dia? ---- Su madre no estaba muy feliz que digamos. Olivia estaba perdiendo la paciencia y la cordura. Realmente parecía una mujer frustrada sexualmente, un punto a favor. Y es que da la casualidad que su querido hermano fue arrestado por irrumpir en el castillo Godfrey. Órdenes de mama Olivia, que lo sacó de ahí.

---- Cada respiro es un obsequio. ---- Hablo Roman, levantando la copa en modo de brindis. 

---- Me he sentido mal últimamente, creo que enfermare o ya lo estoy. ---- Dijo Mina, sin ganas de hablar y soltó un suspiro cansado.

---- Querida, debiste decírmelo para que vallamos al medico y te revise, no quiero que mi pequeña se ponga mal. Arreglemos un cita para tu chequeo. ---- Olivia le palmeó la mano, pues estaba sentada a su lado izquierdo (Lydia) y Roman enfrente de las dos hermanas. --- ¿Y tu donde te metiste? ---- Le pregunto a Shelley, quien sonrió con ganas, hasta se veía feliz. Pero la gran Shelley había desaparecido en la tarde, quien sabe a donde, un gran paso pàra la joven. Así que tecleo en su teléfono para que la voz del aparato respondiera.  

---- Tome el autobús. ---- Para ella era normal, y una felicidad. Lydia se quedó con la boca abierta pero cambió a una sonrisa abierta.

---- ¿Enserio? ---- Roman parecía igual de sorprendido pero interesado sin podérselo creer. Ya que los Godfrey no debían rebajarse a semejante cosa. Sin embargo a mama Olivia no le gusto eso.

---- ¿Que dijiste? ---- Nuevamente Shelley tecleo y lo mismo se repitió.Era la cosa más normal que se hacía, una simpleza para las personas, no te vas a morir por ir en autobús a donde sea. 

---- Tome el autobús. 

---- Oh, creí haber escuchado mal. Y a cuanto de quien tomamos un autobús, y sin permiso. 

Olivia desaprobó esa acción por parte de su hija, seguía sin tragarlo,y no iba a parar de negar la inconformidad que padece. 

---- Dejala en paz... Yo no tengo idea de como hacer eso ---- Le dijo su hijo, sabiendo a donde terminaria esa platica de nunca acabar. Se rió al final, alentando a su hermana. 

---- Te parece gracioso. ---- Roman desapareció su risa. Y como si su hermana hiciera algo malo, Olivia la trato con desaprobación, y como eso fuera un pecado. ---- Shelley querida, ¿que es lo que has hecho? ¿Tuviste algo que ver? ----  Le interrogó a su hijo. 

"Pᴜʀᴇ Bʟᴏᴏᴅ" [Hᴇᴍʟᴏᴄᴋ Gʀᴏᴠᴇ]  || Roman Godfrey 🖤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora