Capitulo 6- Preguntas De Buena Respuesta

2K 137 42
                                    

-¿Cómo preguntas eso muchacho?- dijo riendo el vendedor como si lo que hubiese preguntado fuera puro sarcasmo.

-¿a que se refiere?- le pregunto Slash.

-ok, gracias, adiós- pague los helados y le jale del brazo.

-Slash, novia es lo mismo que amiga ¿vale?- ya no estaba en vena para responder nada.

-¿eres mi novia entonces?- me puse roja y abrí los ojos como platos.

-¡no, digo si… es que… rayos me estresas!- dije tumbandome en el pasto. Slash no hablo un largo rato y me decidi a mirarle. Casi se me parte el corazón. ¡estaba triste! Sentado a mi lado mirando amurrado al pasto.

-Slash. ¿estas bien?

-no volveré a preguntarte nada.- dijo dándose vuelta hacia el otro lado dándome las espaldas.

-perdóname, yo, soy una idiota para responderte. Eso es lo que pasa.

-yo soy el idiota que no sabe nada. Perdóname tu.- suspire.

-vamos, de ahora en adelante pregunta todo, todo lo que quieras, ¿Qué no íbamos a aprender juntos de la vida acaso?- el no contesto, intente nuevamente- haber… mira, hagamos esto, sera una pregunta por día ¿Qué dices?- pasaron unos minutos y respondió.

-trato hecho.

-vale, tienes una pregunta para hoy nada mas. Piénsala bien- le di una lamida a mi helado. Slash comenzó a buscar con los ojos como loco que demonios preguntar. Solo era una plaza y menos mal que no un prostibulo porque no me gustaría saber que preguntaría…. Momento si me gustaría. ¿Dónde había un prostibulo cerca?. 

Estaba nerviosa, el tipo no sabia nada de nada pero vaya que era listo, bien sabia que le convenía preguntar.

Un vendedor de boletos de lotería se acerco. El premio eran millones de millones ademas de premio de consuelo dos viajes a Inglaterra con todo pagado por un mes. Tenia mala suerte asi que el premio de consuelo ya debía de tener mi nombre.

Compre uno y Slash iba a abrir la boca, listo para preguntar pero luego la cerro, el muy pillo estimo no ser necesario preguntar aquello que tenia en mente. 

-creo que ya lo tengo- musitó sonriente.

-¿a si?- baje la guardia, no había mucho que preguntar en un parque, no habían parejas calientes ni nada, solo niños y pajaritos…. Niños ¿y si me preguntaba de donde venían? Se me erizo la piel.

-vale, pregunta lo que quieras- dije resignada.

-quiero que me enseñes aquello de haya.- apunto con el dedo, en un principio no veía nada, pero concentre la vista, casi como a un kilómetro de distancia se veía una pareja. Se me acelero el corazón. Se estaban besando pero no locamente, sino que pasivo. Le miré, el estaba asombrado quería eso, si yo también lo quería lo admito, quería eso y mas. Se supone que había hecho la promesa de no hacer nada estúpido, el estaba hay para que yo le ayudase, no para que me aprovechase por ser tan inocente y ser la viva imagen de todos mis soñados placeres. Sus ojos me miraron dudosos. Me mordí el labio. 

-cierra los ojos- le pedí, mis manos comenzaron a sudar. 

-¿para que?

-solo una pregunta por día!- le recordé, cerro los ojos y me acerque a él. Su rostro simplemente me devanaba los sesos, mi sangre comenzó a burbujear, mis entrañas a retorcerse. Sus labios estaban hay y eran para mi. entonces lo hice, me pegue a él. A su boca. En un principio fui torpe, porque era mi primera vez. Movía mis labios como condenada. Era cierto. Era real. Podía sentir en mi interior realmente el placer. Slash dejo sus labios quietos al comienzo pero una vez que entendió como era la cosa fue el quien tomo el mando. Pronto perdí la noción del tiempo ¿Cuánto rato llevaríamos así? ¿minutos? ¿horas tal vez?, pues parecía que si, pero no me importaba, sus labios eran la mas pura inyección de felicidad que hubiese podido desear. Cuando quede sin respiración a mas no poder pare. No paso ni una desima de segundo hasta que Slah me rodeo con sus brazos y me apego a su cuerpo, pegando sus labios a los míos otra vez ¿acaso me había engañado todo este tiempo? Parecía saberse la cosa de cabo a rabo. En todo caso no me importada. Amaba todo de el, sus preguntas, sus caras, el aroma de su piel, su escensia, sus sonrisas, sus besos, era simplemente perfecto.

-necesito respirar- dije entrecortado y jadeante.

-y ¿para que?- seguía pegando sus labios una y otra vez, sentía mi corazón bombear sangre desesperado.

-solo una por día- le recordé, sonrió sin dejar de besarme. Me pregunte de pronto tomando un poco de cordura en mi mente, si realmente nos estaríamos viendo ahora como aquella pareja. La idea me sonrojo, pero estaba tan enloquecida que no importaba absolutamente nada. De pronto me dolió la cabeza, no estaba dándole aire y eso era grave. Puse mis manos sobre el pecho de Slash y me aparte como pude. 

-solo déjame respirar un minuto- dije jadeante apoyando la cabeza en su hombro mientras me mantenía abrazada a él, listo para darme un ataque de besos.

-eso me a hecho feliz- dijo sin preguntar si estaba bien dicho o no, entonces ¿realmente estaba seguro de que yo le hacia feliz? O ¿era la experiencia nueva que vivía?. La idea me entristeció un poco pero la deseche de mi mente, por un momento solo pensaría en mi. en mi felicidad

-ya has descansado mucho- dijo esperando a que levantara la cabeza de su hombro.

-si, vayámonos a casa- respondí

-no, pero si me a encantado la respuesta a mi pregunta.!!

-a que bueno, porque la respuesta se termino.- me pare, estaba siendo una idiota por rechazar aquella oferta de tener sus labios, pero no tenia que confundirle, por su propio bien. 

Cuando llegamos a casa me lancé sobre mi cama, si bien es cierto solo tenia la escena del parque en la cabeza y el corazón latiendome como condenado. Estaba asustada, por un lado si me contenía era por su bien y aquello me dolía pero por otro seria peor verle en el futuro con otra chica. Aquello seria una tortura eterna. Suspire. ¿Qué mas podía hacer aparte de resignarme? Cerré los ojos intentando buscar tranquilidad.

Algo se posa en mis labios y abro los ojos de golpe. Los hermosos labios de Slash están sobre mi, sus labios comienzan a moverse sobre los míos locamente otra vez…

Divididos (Fanfiction Slash)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora