Estaba en un parque, bajo una suave tarde de verano, respirando felicidad y tranquilidad entre los arboles, sentada en un banquillo moviendo un cascabel en mi mano. Sonriendo y haciendo tonterías para alguien. Sentí un grito. Abrí los ojos. Me voltee. Un hombre me apuntaba con una pistola. Mi corazón palpito agitado. Sentí que era mi fin. Rápidamente quise proteger a algo con todo mi corazón, El extraño jaló el gatillo de su arma. Alguien se atravesó frente a mi. recibió el disparo. Di un grito. Abrí los ojos y desperté jadeante.
-¡Slash!- grite espantada bañada en sudor.
-____ ¿que sucede?- me pregunto Slash en el acto.
-soñé algo muy malo- dije escondiéndome entre sus brazos con miedo.
-¿qué?
-estaba en un parque y alguien quería dispararme, pero alguien mas me defendió y entonces me salve.
-¿enserio? Tranquila, fue solo un sueño.
-los sueños se hacen realidad.
-no, esas son pesadillas, las pesadillas no se hacen realidad.
-vayámonos luego entonces. Nuestro avión despega en dos horas más.
-ok- tocaron a la puerta. Ya podía adivinar quien era. Slash dos se levanto a abrir. Si. correcto. Era Slash uno.
-buenos días Slash!- le saludo su reflejo
-buenos días- dijo el con urgencia.- _____ no puedes irte!
-¿y porque no?
-no puedes abandonarme!
-no es abandono, es seguir por nuestro camino nada mas que eso.
-no dejare que te vayas. Ni tú ni Slash. ¿entendido?
-¿y que piensas hacer señorito yo controlo todo?
-me llevare tus maletas.
-eso no es cierto.- tomo mis maletas y se las cargo al hombro.
-¡Slash quitaselas!- grite intentando levantarme apurada de la cama tapándome con las sabanas como podía porque había quedado desnuda de la noche anterior. Slash intento quitárselas, pero el muy desgraciado salio corriendo por la puerta.
-no puedo creer que sea tan infantil- dije moviendo la cabeza como si fuera un caso perdido.
-que rápido es- dijo Slash dos riendo.
-kjdfkj si
-¿Qué hacemos entonces?
-creo que volverá. Vistámonos mientras.
Slash uno no volvió. Asi que fui a golpear a su puerta de malas ganas.
-ya abre!!!.- grite molesta.
-solo si me prometes que te quedaras!- contesto tras la puerta.
-no. ya ábreme!-me dolía la cabeza y me sentía mareada, no estaba en vena para juegos infantiles.
La puerta se abrió y entre.
-¿Dónde están mis male…. A hay están!- dije caminando hacia ellas. Las tome y me di cuenta que me las estaba entregando demasiado fácil. Algo ocurría.-¿Slash donde estas?- no contesto. Le busque y entonces le encontré sentado en el marco de la ventana mirando hacia fuera.
-oye. Que me vaya no significa que no nos veremos nunca mas.- dije poniendo mi mano en su hombro.- te lo prometo.
-eres mi única anestesia. Mi único palpitar de felicidad. mi único deseo. ¿Por qué me dejas de esta forma?- su voz sonaba débil. Cosa que era deprimente sabiendo toda la energía que el tenia dentro.
-tu lo sabes. No volveré a fallar dos veces.
-solo pido tenerte cerca. Ya me resigne a que le pertenezcas.
-no fallare dos veces- repetí- y tenerte cerca es una tentación latente que no estoy dispuesta a asumir.
-dímelo ¿enserio le quieres mas que a mi?-
-tu ya lo sabes.
-solo dímelo y te dejare en paz.- no conteste. ¿realmente le quería mas a su reflejo? Ambos me habían hecho latir el corazón , ambos me hicieron sentir mariposas en el estomago, entonces ¿les quería a ambos por igual? Entonces comprendí que.... mi corazón estaba dividido en dos.
-lo sabia. No eres capaz de responderlo ¿verdad? Estas confundida y…
-quiero a Slash. a mi Slash.- conteste firmemente por fuera aunque insegura por dentro. Slash no habló.
-adiós- dije dándome la media vuelta sintiendo que se me caería el corazón a pedazos por la tristeza de dejarle solo. pero ¿Qué mas podía hacer?.
-te amo- dijo cuando iba a cerrar la puerta, me sentí horrible por dentro, pero entonces la cerré.
Camine hasta mi habitación recordando las ultimas palabras de Slash, dichas con aquella voz sincera, triste, con tan solo un grano de esperanza. Pero dichas con toda el sentimiento del mundo. Suspire. ¿Por qué tenia que elegir de esa forma?.
Slash y yo estábamos listos para irnos. Con maletas en mano iba a cerrar la puerta cuando Slash uno apareció. Iba a correrle pero no me miro, tan solo se acerco a abrazar a su hermano por ultima vez.
-buen viaje- dijo sin más. De pronto mis piernas comenzaron a temblar. Me sentí muy mal. Me afirme de mi maleta e intente mantenerme tranquila y parecer de lo mas normal. Pero los mareos me ganaron y corrí al baño a vomitar.
Cuando termine, ambos Slash estaban tras de mi mas que sorprendidos.
-¡no e bebido nada lo juro!- me excuse de inmediato.
-_______ te sientes bien?- me pregunto el uno acercándose a mi
-si, por supuesto!- la verdad empezaba a verle borroso. ¿eran dos o seis Slashos en realidad?
-____, no te ves bien.- dijo el otro.
-estoy bien, toma tu maleta y…- no pude sostenerme y me derrumbe sobre el suelo. Si antes veía seis ahora eran miles de Slashos. Que me preguntaban si me encontraba bien, si podía oírles. Y yo solo sentía sus voces alejándose, pareciendo cada mas unos murmullos. Hasta que cerré mis ojos
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Divididos (Fanfiction Slash)
FanfictionNovela adaptada. Una chica se encuentra con su idolo slash pero resulta que ella esta a cargo de su hermano gemelo