"Tú eres mi persona."

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Hoy haré la nota al principio, porque bueno es necesario. Tomen algunos pañuelos y delen reproducir a la canción con sus auriculares puestos, para darle mas ambiente a la situacion.

No aseguro que lo hagan, pero quizás si. Espero que les guste el capitulo y ¡muchisisisisisimas gracias por todos los comentarios en el capitulo anterior! No saben que lindo es ver que les guste lo que escribo, bueno era eso ah.

Y saludos.

S xx.

Capitulo 27

"Tú eres mi persona."

“— ¿Louis?— es lo primero que digo cuando abro los ojos, veo la camilla junto a mí y trato de levantarme pero me duele el pecho cuando me muevo, hay algo debajo de mi que también me impide moverme. Trato de que mis ojos se adapten a la poca luz que hay. Me muevo lentamente y me apoyo sobre mis rodillas y me doy duele el pecho, como si tuviera quebrada una o dos costillas. Muevo la camilla y no puedo evitar soltar un grito de dolor al hacerlo, hay alguien debajo.

Le persona no se mueve y en su rostro hay sangre, igual que en su remera, lo escucho gemir y con una mano en mis costillas me acerco a su rostro. Mi vista se nubla y no puedo evitar comenzar a llorar.

— ¡Louis!—chillo, el apenas se mueve y le cuesta respirar. Lo tomo por los hombros y trato de voltearlo pero el gime y llora, trata de moverse pero no lo logra. Tomo aire y el vuelve a gritar mientras lleva sus manos a su abdomen, la remera está llena de sangre o mierda, mierda, mierda.

Abre sus labios para decir algo pero niego con la cabeza, me siento junto a él y apoyo su cabeza sobre mis piernas, el hace una mueca de dolor y llora al igual que yo. Acaricio su cabello y seco sus lágrimas, que limpian su rostro. Sus ojos están apagados y trata de sonreír mientras me mira.

—Puedo sacar algo positivo. — susurra, apenas puedo oírlo, pero acerco mi oído hacia él para hacerlo mejor. — Al menos mi último suspiro va a ser junto a ti.

— ¿Qué? No, no Louis, aun nos queda mucho por vivir ¿oíste?—tomo su rostro entre mis manos y lo miro a los ojos, el apenas sonríe, sus ojos no se desconectan de los míos ni un segundo.

Los dos sabemos que sucederá después de esto, hay un charco de sangre debajo de él y su piel esta cada vez más pálida, al igual que sus ojos están cada vez más sin vida.

—No me dejes Louis ¿de acuerdo? Lo prometiste. Aún debemos casarnos, debemos tener a Elena y a Sebastian ¿acaso lo olvidas? Si tú me dejas no voy a poder vivir Louis, eres mi otra mitad, eres mi persona, mi vida, mi todo.

— ¿Soy tu persona huh?— suspira pesada y lentamente, mierda, no. Mueve su mano derecha, la cual está libre y la tomo con la mía, la aprieta intensamente mientras hace una mueca de dolor.

—Sí, lo eres, por siempre y para siempre.— acaricio su rostro y vuelvo a limpiar las lagrimas que caen sin cesar por su rostro, hace una mueca y vuelve a presionar su abdomen, no quiero ver que le ha sucedido, no quiero ver porque razón está pasando, pero sé que es mi culpa.

Busco con urgencia algo en las paredes de la ambulancia para parar su dolor pero no hay nada, todo lo que hay esta tirado junto a nosotros y estará disperso en algún lado de cuando volteemos, no hay movimientos en la parte delantera, están todos muertos, no hay nada que hacer, muerdo mi labio para evitar llorar, no quiero que me deje, no él. No quiero que tampoco su última imagen de mi sea de un niño llorón.

Perdiendome. {pausada indefinadamente}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora