¿Hay alguien?

La noche.

Llevabamo varias horas caminando, no habiamos decansado ni un segundo. William decia que cuanto mas parasemos para descansar mas tarde llegariamos. La mayor parte del camino fuimos hablando de todo un poco para conocernos mejor. El me conto que su madre los abandono a el y a su padre cuando tenia 3 años. Me conto que su padre era cientifico militar y que murio hace dos años en un atentado. Decidio hacerse militar para honrar su memoria, a su manera. Yo le conte que mi madre murio en un atraco y que mi padre desde entonces no era el mismo, incluso despues de haber encerrado al atracador. Le dije que desde aquella noche yo tampoco fui la misma. Le conte absolutamente todo, menos lo de aquella semana. Quedaba media hora para que anocheciese, asi que decidimos montar la tienda de campaña a un lado de la carretera. Tuvimos que saltar el quitamiedos, ya que al fondo habia un pequeño bosquecillo. Nos adentramos ya que no era muy frondoso, se podia ver todos los lados desde cualquier punto. William se puso a montar la tienda de campaña, era bastante grande, tenia dos partes (que serian las habitaciones). En medio habia un gran hueco para dejar las mochilas o lo que fuese. Termino de montarla y fue a por leña para hacer una pequeña hoguera. Mientras tanto yo me quede con Cassandra.

- Cassandra, ¿sabes donde estan tus padres?

- No, me dejaron en la casa mala y dijeron que volverian, pero no lo han hecho todavia. ¿Por que crees que no vienen?

- Seguro que los encontramos. 

- Eso espero. Yo quiero que vengan otra vez, me lo paso muy bien con mi papa.

- Ya veras que si cariño.

- ¿Y tu mama donde esta?

- Mi mama esta en cielo.

- ¿Con los angelitos?

- Si cielo - dije sonriendole - sSabes, yo se hacer pulsera y collares con margaritas. ¿Quieres que te enseñe?

- Siiiiiiiii - dijo dando saltitos.

Recogimos varios margaritas, le enseñe como hacerlas y se puso como loca ha hacer varias. Para su madre, para su padre, para su amiga Raquel, para William y para mi.

Mientras ella las hacia yo iba cogiendo piedras y poniendolas en circulo para la hoguera. William llego con un monton de troncos y  hojas. 

- ¿Necesitas ayuda?

- No, gracias - dijo sonriendo.

Dios, tenia una sonrisa perfecta, estaba segura de que muchas mujeres habian caido ante esa sonrisa. Yo no lo haria, aparte tampoco es que quisiese algo con el. ¿O no? NO. Era brusco, socarron, infantil, creido y me ponia de los nervios. No era mi tipo. Creo. Deje de pensar en el y en su perfecta sonrisa para sacar unos bocadillos. William monto la hoguera de forma que los toncos no se cayesen. Nos sentamos al rededor de la hoguera. Yo no podia parar de reirme de William ya que Cassandra le habia hecho una pulsera, un collar, un anillo y una diadema. Habia pataleado tanto que se lo puso solo para que se cayyara. A mi solo me hizo una pulsera gracias a dios.  Nos comimos los bocadillos y me tumbe con Cassandra a ver las estrellas. Ultimamente hacia un tiempo muy raro. De repente brilllaba el sol y de repente se ponia a llover con bastante fuerza. Gracias a dios esa noche no llovio. Cassandra se quedo dormida asi que la meti dentro de la tienda. 

Me sente frente a William, estaba removiendo las brasas de la hoguera con una palo, que poco a poco se iba quemando tambien. Alzo la mirada y me sonrio, yo le respondi a la sonrisa. 

- ¿Como esta tu herida? - pregunto.

- Bien.

- Deja que la vea.

- No hace falta.

Se levanto y se sento a mi lado. Me fie quitando la venda poco a poco mientras rozaba mi piel levemente. Se me puso la carne de gallina, el parecio no darse cuenta. La herida tenia un aspecto bastante feo, estaba empezando a ponerse morada y amarillenta.

- Se esta infectando un poco, en cuanto lleguemos a la ciudad te la curare como es devido. 

Asenti y el volvio a vendarme la herida. Continuo moviendo las brasas con el palo. Parecia distante y un poco triste. No entendia porque.

- ¿Ocurre algo? - pregunto.

- ¿Eh? No, es solo que te veo un poco distante y triste.

- Mas cerca no me puedo poner. A no er que quieras que me suba encima de ti. - dijo sonriendo macabramente. 

Yo rode los ojos y negue on la cabeza.

- No se, no hablas y hace unas horas casi me cuentas tu vida entera.

- Simplemente no tengo ganas - dijo.

- ¿Y de que tienes ganas? - pregunte.

En ese mismo instante me arrepenti al darme cuenta de que podia llevar segundas intenciones. El alzo una ceja y sonrio.

- Pues....

No le deje acabar.

- Me refiero a algo no sexual.

- Mira quien es la mal pensada. Ya lo sabia listilla, iba a decirte que lo unico que me apetecia era tomar una cerveza.

- Oh - dije bastante avergonzada. 

Estaba segura de que me iba volviendo mas roja por segundos. El se rio y revolvio mi pelo.

- ¿Con quien vas a dormir? - pregunto.

- ¿Con quien crees?

- Lo siento, pero creo que es mejor que duermas con Cassandra.

- JA JA JA - respondi ironicamente - Me voy a dormir, con Cassandra. Es una lastima que no quieras. Podiamos haberlo pasado bien.

- Puedo retirarlo - dijo alzado las manos como si dijese que el no es culpable.

- No, ya es tarde. Hasta mañana.

Le di un beso en la mejilla y fui a mi lado, por asi decirlo.

- Descansa - escuche. 

Me tumbe al lado de Cassandra y al poco rato me dormi.  Desperte por impulso, supuse que seria la hora a la que me levantaba siempre. Me di cuenta de que Cassandra no estaba, supuse que estaria fuera con William. Sali y ninguno de ellos estaba. Entre al lado de William y nada, tampoco estaba. Es como si no hubiese pasado la noche ahi. Volvi a salir.

- ¿William? - grite - ¿Cassandra?

 No habia nadie. Di una vuelta  ha todo el bosque. Tampoco estaban ahi. Entonces escuche una leve respiracion tras de mi. Note que empezaba a refrescar de repente y se oscurecio. Me di la vuelta lentamente, entonces algo negro se abalanzo sobre mi.

Me desperte bruscamente. Tenia el corazon en la boca y me costaba respirar. Hbia sido un sueño, mas bien una pesadilla. Di gracias a dios porque no hubiese sido real. Cassandra dormia a mi lado. Sali de la tienda y William estaba apagando las brasas. Estaba apunto de amanecer.

- Buenos dias, ¿que tal has dormido?

- Mal, tuve una pesadilla horrible.

- ¿Ha si? Yo tambien. ¿Con que soñaste? 

- Con que desapareciais y me atacaban.

- Ah, yo soñe con una especie de laboratorio en la que yo hacia prue.... Da igual, sera mejor que levantes a Cassandra. Nos iremos en cueanto termine de amanecer.

- De acuerdo

Entre con una gran angustia en mi pecho sin saber por que. Desperte a Cassandra y despues de comer unas cuantas galletas y recojer la tienda, nos pusimos en marcha de nuevo.