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Pasaron largos días en los que no cruzamos tan siquiera una palabra o un gesto. Pero una tarde recibí un mensaje de tu parte en el cual me preguntaste si quería ir a una reunión familiar que tendrías esa misma noche. Fue completamente extraño e increíble ese mensaje, después de tantas cosas que dije y lo herida que note tu alma con esa pequeña charla juré ¡Mi hermoso ángel! que no me dirigirías la palabra en años, o por lo menos hasta que el rencor que cause en ti se marchara. Sin pensarlo te conteste un ¨Si, en la noche nos vemos¨. Me vestí de la mejor manera posible y estuve esperando largas horas para por fin encontrarme contigo. Al llegar a la puerta de tu casa los nervios me ganaron y no tuve la fortaleza de golpear aquella puerta de madera, así que tomé un cigarrillo de mi chaqueta y lo encendí buscando controlar la velocidad en la que mi corazón estaba latiendo. Para mi sorpresa escuche la puerta abriéndose así que inmediatamente mis ojos se situaron en aquel lugar, saliste tú de allí, tan tranquila, tan hermosa, me brindaste una hermosa sonrisa y podría jurar que sentí la manera en que mi sangre se apropió de mis pómulos. Cuestionaste ¿Por qué estaba afuera? Así que inmediatamente levanté el cigarrillo contestando a tu pregunta, "¿Me regalas uno?" Preguntaste algo tímida "Claro" Sonreí metiendo nuevamente la mano a mi chaqueta, te lo entregue y lo prendiste rápidamente. "No sabía que fumabas" Hable rompiendo el silencio, me contaste que no era algo que hicieras muy seguido, pero que en verdad te gustaba la sensación que el humo causaba en tu cuerpo, sonreí ante tu respuesta y luego de hablar un poco sobre el cigarrillo entramos a tu casa y efectivamente estaba toda tu familia, pero una persona en particular llamó mi atención, tu novio quién estaba sentado cómodamente al lado de tus padres, me presentaste a tu familia y luego me senté en una esquina, saqué mi celular intentando distraerme de la presión que sentía, pero no lo conseguí. Tu familia murmuraba mientras me observaban, hablan de la manera en la que iba vestida, sobre cómo llevaba el cabello y mi maquillaje tan básico. Creo que notaste mi incomodidad porque te sentaste a mi lado y empezaste a agradecerme que hubiese asistido, no era algo que tuvieras que agradecer amaba encontrarme a unos poco metros de ti, tu novio inmediatamente interrumpió nuestra charla "Hola, soy Mateo el novio de Camila" Obviamente ya lo sabia "Soy Lauren" dije respondiendo su presentación, te levantaste mencionando que ibas por algo de tomar para los tres, dejándonos a los dos ahí sentados como si fuéramos los mejores amigos. "Camila me ha hablado mucho sobre ti" mi corazón empezó a saltar de la alegría que produjo ese comentario en mí "Me dijo que tenías unos ojos hermosos y tenía toda la razón" mencionó "Gracias" Contesté secamente, no me interesaba tener ningún tipo de contacto con ese tipo, regresaste con las bebidas y te sentaste en el medio de ambos generando aún más tensión "Hija, deberías cantar algo" Habló tu madre, a lo cual todos accedimos, moría por escuchar tu voz de nuevo, cediste a la petición de tu madre y empezaste a cantar.

Ya lo ves que no hay dos sin tres, que la vida va y viene y que no se detiene qué sé yo

Miente aunque sea dime que algo queda entre nosotros dos,

que en tu habitación nunca sale el sol, ni existe el tiempo ni el dolor

Llévame si quieres a perder, sin ningún motivo sin ningún por qué

Ya lo sé que corazón que no ve es corazón que no siente, corazón que te miente amor

¿Para qué me curaste cuando estaba herido si hoy me dejas de nuevo el corazón partido?

Y ¿Quién me va a entregar sus emociones? ¿Quién me va a pedir que nunca la abandone?

¿Quién me tapará esta noche si hace frío? ¿Quién me va a curar el corazón partido?

¿Quién llenará de primaveras este enero y bajará la luna para que juguemos?

Dime si tú te vas dime cariño mío ¿Quién me va a curar el corazón partido?

Corazón Partio - Alejandro Zanz

En ningún momento dejaste de observarme mientras cantabas, sentía que estabas cantando para mí, pero no entendía nada de lo que estaba sucediendo, tu novio estaba a menos de un metro del lugar donde yo estaba sentada, seguramente iba a sospechar algo. Tu familia rápidamente aplaudió y yo realicé la misma acción, te acercaste y tomaste mi mano, estaba completamente desconcertada "Es tu turno" Mencionaste dejándome en el centro de la sala, supongo que querías que respondiera a tu acto, pero en ese momento sólo quería que la tierra me tragara, me sentía nerviosa, seguramente mis cuerdas vocales temblaban "No sé cantar" dije observandote "Inténtalo" suspiré y pensé una buena canción que respondiera a lo que acababas de cantar

Amor mío... Si estoy debajo del vaivén de tus piernas

Si estoy hundido en un vaivén de caderas, esto es el cielo es mi cielo

Amor fugado.... me tomas, me dejas, me exprimes y me tiras a un lado

Te vas a otros cielos y regresas como los colibríes, me tienes como un perro a tus pies

Otra vez mi boca insensata, vuelve a caer en tu piel

Vuelve a mí tu boca y provoca, vuelvo a caer de tus pechos a tu par de pies

Labios compartidos, labios divididos mi amor, yo no puedo compartir tus labios

Que comparto el engaño, y comparto mis días y el dolor

Ya no puedo compartir tus labios, no amor, no amor, labios compartidos.

Mana - Labios compartidos

Nos quedamos mirando por varios segundos, mientras el resto de los asistentes aplaudían, te mordiste el labio, tal vez por el nerviosismo, me senté junto a ti de nuevo. "Cantas hermoso" Hablaste "No más que tú, tu voz derrite a cualquiera" Tu novio se levantó molesto, me miraste suspirando y lo seguiste, yo por mi parte decidí salir de nuevo a fumarme otro cigarrillo, pensando en todo lo que acababa de suceder "Te amo aunque estés compartida" Dije recordando el final de la canción. En ese momento por primera vez me cuestione ¿Qué era lo que en realidad sentía por ti? deje que mis pensamientos se perdieran dado que escuche unas voces cerca, terminé mi cigarrillo y me levanté, Mateo estaba saliendo de la casa bastante molesto seguido por ti "Te acostaste con mi novia"Me miraste fijamente, yo sólo lo observe "Puta lesbiana de mierda" respondió él al ver que no había respuesta de mi parte. Suspiré "Sí, sí me acosté con tu novia, mira ella en verdad me gusta, la quiero a mi lado, quiero hacerla feliz, quiero que se enamore de verdad, que entrelacemos nuestras manos y vayamos hasta donde nos sea permitido, quiero estar con ella cuando se caiga, limpiar sus heridas, tomar su mano y ayudarla a levantar, llevarle el desayuno cada mañana y acariciar su espalda cada noche ¿Y tú qué le ofreces? Él se quedó callado e inmediatamente vi tu cara de desilusión. "Mejor me voy" me acerque a ti y deje un suave beso en tu mejilla "Él no lo vale" Susurré en tu oído y empecé a caminar en busca de un taxi, analizando cada frase que había salido de mi boca y cuestionandome el futuro.

Una carta de amor de Lauren a CamilaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora