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La escuela es uno de los lugares que mas aburren, pero es uno de los mas inspiradores y desarrolladores de mis divagues. Hay clases como esta en la que ver el libre vuelo de las moscas es la principal atracción de los estudiantes.

Así como yo, que lo que menos he hecho ha sido prestarle atención al viejo bigotón que dice ser maestro.

Mis compañeros están tan ensimismados que creo que ni saben de que esta hablando el profesor. No te mentiré, yo tampoco tengo ni idea de cual es el tema. Así que me dedico a reflexionar sobre mi vida o que se yo. Dejo que mi mente fluya.

Miro hacia la nada mientras suelto un suspiro, el techo blanco del salón de clases es mas que inspirador para mis alocados pensamientos.

Tengo la cara apoyada en la mano y creo que mi mejilla esta roja por la presión. Pero divagar es mas interesante que la absurda clase de Mecánica.

—Quiero un beso de pelicula —susurro hacia la nada y un golpe alerta a todo el salón. Mi amigo suelta una estruendosa carcajada y el maestro lo mira con cara de pocos amigos. Es lógico, a ningún maestro le gusta que se rían en su clase.

—¡Y yo quiero a un Christian Grey! —comenta cuando todas las miradas dejan de enfocarnos, me acomodo en mi asiento y lo miro molesta—. Deja de soñar Lauren

—¡HAY LIBERTAR DE PENSAMIENTO! —exclamo como si fuera un discurso político, ganandome de una mirada aprensiva del maestro—. Pero enserio, quiero un beso asi. No se bajo la lluvia —Comienzo a perderme en mi mundo de las ilusiones una vez mas—. O mientras doblo y levanto una pierna, o tenerme que parar de puntitas para besarlo.

—Oye, yo también hablaba enserio con eso de mi Christian —Suelta un suspiro al igual que yo y se pierde en sus pensamientos. Si en algo nos parecemos, es que vivimos en un mundo de fantasías—. Imaginate, con su látigo o una fusta.... Uffff... Me va a dar un orgasmo mental.

—Controlate Joel, estamos en clase —susurro para que recupere la compostura y que por lo menos finja que escribe algo.

—Pero por favooor... Ya me vi amarrado en la cama de 4 postes, Mmm... O en la cruz, Ay dios mio... Christian chiquito, pegame pero no me dejes —exclama ensimismado. Joder si es que hasta me da miedo la situación.

—Ya callate Joel, gobiernate —  musitó al sentir la mirada del maestro.

—Christian chiquito, bebé —dice con los ojos cerrados mientras sonríe como estupido—. Hazme tuyo.

Otra mirada cargada de odio del maestro nos atacó, y lo siguiente fue, que salimos de clase. ¡NOS EXPULSARON DE CLASE! Y todo por culpa de Joel, un chico perdidamente enamorado por un personaje. Joder, no es posible.

Cuando la clase se acaba, nos volvemos a adentrar al salón de clases. Todas las miradas prejuiciosas nos aniquilan.

Si ya nos tienen tachados de raros por el simple hecho de ser unos enamorados perdidos de los libros, ahora mas por que mi amigo casi tiene un orgasmo pensando en un personaje.

Me siento en mi lugar esperando que entre otro maestro. Pero la curiosidad me llama cuando Joel comienza a mandarse papelitos con Bradd. Codeo a mi compañero y el bufa cuando le hago un corazón con las manos.

—Los shippeo —susurro cuando el maestro ya ha entrado.

—Cierra la boca —musita entre dientes, reprimió una carcajada y me mira agrandando los ojos—. Te shippeare algun dia

—Sigue intentando —respondo porque es cierto, desde hace mas de 2 años que nadie me gusta, tengo muy malas experiencias en el amor. El sonrie mostrándome sus dientes blancos y finge prestar atención a la clase.

Un beso de película [AF #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora