Sentía como me dolían las muñecas de tanto apretar el gatillo. Se derramaba tanta sangre en un mismo lugar. Era algo que te dolía en el fondo, sabes que son personas que solo siguen órdenes, que vienen de las personas de arriba, esas personas que tienen dinero para mover el mundo con un solo dedo, hombres que siguen órdenes, y no deberían morir hoy. ¿Quién sabe si tenían niños, esposa? Pero yo solo sé una cosa, al apretar el gatillo, todos somos iguales. Si vienen a por mí, a por Dewis, y yo me voy a defender.
Apunté a la cabeza y lo maté. Y otro, y otro, y otro más. Dios. No paraban de venir. ¿Quién era Dewis para que quisieran matarlo? Pero, ya no sólo es matarlo, sino que más de doscientos hombres fueran en su busca. Estábamos en la parte de atrás del coche, abasteciendonos de las armas que tenía Dewis en el maletero. En alguna hora, espero que no muy temprano, se acabará el cargamento.
Estaba recargando por décima vez el arma, y me giré cuando me encontré de frente a un hombre. Iba andando para atrás intentando recargarla pero tenia las manos torpes, se acercaba lentamente hacía mí, con una sonrisa de oreja a oreja. Note como las gotas de sudor caían por mi frente. Me rendí, no iba a seguir intentando recargarla ya que con este pulso sería imposible. Se lanzó hacia mí, e intenté esquivarlo, con buena suerte. Seguíamos ambos mirándonos, era un duelo de miradas. Hizo un gesto con la muñeca sacando de la manga una navaja, en un mal movimiento mi vida estaría en grave peligro. No me quedó otra que llamar a Dewis, estaba indefensa
-¡Dewis! -Lo llamé como pude sin quitarle la vista al tío enfrente mía
-Ahora no puedo D
-¡Dios Dewis!
-Joder Diablo, no puedo
-¿Con qué eres Diablo? -La voz ronca del tío me era muy conocida.
Una especia de Flashback vino a mi mente. Yo subida en un árbol, escuchando la conversación de la persona que me seguía en ese todoterreno.
-Tu -Le señalé con el dedo
-Que sorpresa, ¿quién me diría qué iba a hacer dos trabajos en un mismo día?
-Debí matarte cuando tuve oportunidad.
-Cuando estabas encima del árbol escuchándome
-¿Cómo?
-Solo eran pistas, sabía que estabas ahí, era fácil de ver. Pero solo quería darte más tiempo, para ver todos tus movimientos
-Vete a la mierda
Me abalanzé hacia él dispuesta a un cuerpo a cuerpo. Ambos nos pegabamos fuertes puñetazos a la cara. Le di uno qué le hizo que saliese sangre de la nariz. Pero me lo devolvió cojiendome de los hombros y dándome en las costillas. Caí al suelo, y empecé a escupir sangre. Si no me había roto una costilla, calentito.
Se acercó a mí, y me susurró al oído "Para que no te me escapes, una medida de seguridad" Saco la navaja, y la pasó por mis labios, no podía decir palabra, ese puñetazo me había dejado sin fuerzas. Bajo por mí cuello, llegó a mis senos, y se quedó un rato dando vueltas con el filo por los aros de mi sujetador, cuando dijo "Buen par" Con las últimas fuerzas le lancé un puñetazo, que le hizo rabiar. Me agarro con una mano las dos muñecas por encima de mi cabeza, y con la mano restante agarró uno de mis senos. Era asqueroso.
-¿Qué pasa princesa? No te gusta que te toquen -Se acercó a mis labios y giré la cara -Con que te me resistes - Soltó mi pecho y me agarró la cara de mala manera. Estaba indefensa, no podía mover las manos, era mucho más fuente que yo -No sabes la buena vista que tengo -Me acercó rápidamente y me beso. Intenté resistirme de ese beso, pero consiguió meter su lengua en mi boca. Le consigui morder la lengua sintiendo su sangre caliente en mi boca. Pero no paraba. Solo pude llorar. Quiero que pare.
Se alejó de mí, y me miró con picardia. Con la mano siguió bajando, asta llaga a la pelvis.
-Dios mío, nena, cuando te haga lo que te tengo pensado hacer.
Vi como cogió la navaja y siguió bajando hasta llegar a la pierna. Me miró, y vi como apretó el mango.
-¿Lista? Te va a doler un poquito
Vi como la navaja se hundio rápidamente en mi pierna. Di un gran grito de dolor. Sacó una correa y me hizo un torniquete en la herida
-No quiero que te desangres, pero no te iba a dejar que te escapases
Me cogió en brazos. No tenía fuerzas, no podía más. Miré hacia el coche y me encontré con Dewis, que seguía disparando. El tío lo llamó para captar su atención.
-¡Alto el fuego!-Todos sus hombres pararon en seco- Tú, Dewis.
Dewis se giró, y al verme se le cayó el arma de las manos
-Es guapa, que pena que nadie le ayudase cuando te estaba llamando, cuando estaba siendo atada, o cuando abusaban de ella -Vi como la vena de Dewis se hinchaba -Ya nos pondremos en contacto con tigo , pero que sepas que si en una semana no tenemos lo que pedimos, va a sufrir, sufrir cómo no te lo imaginas - Me cargó en su hombro, quedando mi culo junto a su cara, y mi cara en su espalda. -Buen culo -Puso su mano ahí -A ver que le pasará si no cumples tu parte, le entrará todo por ahí.
Empecé a llorar, por dios, esto no me tiene que estar pasando a mí
-Tendrás lo que quieras -Soltó Dewis- Pero no lo hagas nada
-Ya veremos, aunque es un trabajo difícil muy difícil, más ha costado no hacerlo con ella en el suelo, pero lo intentaré
Dewis dio unos pasos hacía él, pero levantó el supuesto abusador el dedo y parto a Dewis en el sitio
-Sabes a quien tengo, y lo que le puedo hacer antes de que tu llegues a mí sitio
Estábamos sin cartas en la manga, no podíamos hacer nada. Empezó a andar, sentía como mis ojos pocos a pocos mis ojos se cerraban hasta perder el conocimiento.
§
-No puede ser, Joder Víctor, tienen a tu sobrina, y sabemos lo que le van hacer
-Tranquilo Dewis
Era la quita vez que Víctor me limpiaba la sangre que salía de mi nariz. Me habían quitado a D, mi dignidad, y se lo que quieres ellos por su liberación.
-Le van a hacer daño, tu no la vistes cómo estaba, no era ella
-Y por eso debemos actuar, llamaré a todos mis contactos, tu ponte en contacto con tu jefe
-Estas seguro que hablemos con Michael, es una locura
-Es un traficador de armas, nos vendrá bien sus suministros
-De acuerdo
-Nueva York va a ser espectador de la mayor guerra que se allá creado
-Un traficante de armas, mi jefe, contra un traficante de droga, que es hermano de mi jefe, los cuales se odian, es una buena película
-Sí, se la venderemos a alguien para que escriban nuestra historia
-Que empiece la guerra
Le hemos dado completamente la vuelta a la historia, ahora Dewis tiene el control, jajajajaja, pobre D que le pasará?? Hagan sus apuestas jajajajaja
Gracias por los 10k de leídos i am happy
Ya mismo la sigo no seré tan mala de dejaros con el suspense
No CORREGIDO
Saludos mi almas
Voten y comenten :D
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Me llaman Diablo
Action¿Nunca has sentido que otra persona compartía tu cuerpo? ¿Qué erais dos en uno? Ganas de salvar el mundo y a la vez de ser la razón de su extinción es lo que pasa por la cabeza de Diablo. Ni siquiera alguien como Dewis, alguien con una mente clara...