Sentada en un cómodo asiento observaba por la ventanilla, todo estaba oscuro a excepción de las lucecitas de algunas torres o casas, el vuelo había sido tranquilo, no había viento, el clima estaba perfecto. A pocos minutos de llegar tomé un sorbo de vino en una copa de cristal. El jet era muy lindo y lujoso. Claro, era de Robert, el guapo, maniático y controlador de todo. El jet aterrizó y a los poco minutos y cuando una azafata muy linda y muy castaña me indicó que ya podía salir del jet. Bajé por las escaleritas y aspiré el aroma a mi tierra. No sabía que la había extrañado tanto hasta que estuve de regreso. Debían ser 2am.
Me dirigí a una salita del aeropuerto y a los pocos minutos llegaron mis maletas. Louisa me recibiría y me llevaría a su departamento junto con Aaron, aun no le había dicho a mis padres que vendría, quería darles yo una sorpresa. Salí de la salita y Aaron en traje negro llevaba mis maletas, yo aún no podía cargar mucho peso, en mi mano sana solo llevaba mi bolso de mano. Al ver a Louisa con una falda larga verde oscura, medias negras, blusa de flores, sonreí. Ella al verme corrió hacía mí y con cuidado me dio un abrazo. Hice una pequeña mueca de dolor, sin querer me había lastimado.
"Meredith, ¡Cuánto te echaba de menos! "Dijo mi castaña amiga y asentí en respuesta.
"También te echaba de menos, me haces muchísima falta. "Dije y emprendimos camino rumbo a su auto. No sin antes presentarle a mi guardaespaldas. Ella subió mis dos maletas e ignoró la sugerencia de Aaron de hacerlo.
En el camino a su departamento hablamos de todo un poco. Había conocido a alguien y tenían una vida sexual muy activa. No la culpo, tener sexo es liberador.
"Bueno, ya perdimos a otra amiga. Tres chicas casadas y las demás quedadas. "Sonrió y me reí.
"No te pierdes de nada. Es sólo un papel, es lo mismo que una relación de novios pero con anillos. "Dije y llegamos al estacionamiento. Bajé del auto y ella me entregó sus llaves, me indicó que fuera subiendo en lo que ella llevaba las maletas con Aaron. Subí y busqué la puerta 312, al verla introduje la llave en la cerradura y abrí. El departamento de Louisa era muy lindo, minimalista y vintage. Me adentré y dejé la puerta abierta. Me dirigí al sofá color terracota y me senté. Dejé mi bolso a mi lado y cerré los ojos.
"¡Ya está! Tenerte de nuevo acá merece una celebración. Sacaré unas cervezas. "Dijo Louisa al cruzar la puerta con mis maletas, las dejó en el suelo y después cerró la puerta con seguro. Le pedí a Aaron que ocupara la habitación de huéspedes, no necesitaría de sus servicios estando con Louisa, le ordené dormir e informarle a Robert que habíamos llegado bien.
Mi amiga fue a su cocina y buscó dos cervezas, las trajo y me entregó una. Abrí la lata y le di un sorbo, estaba fría. Le di otro trago uno más largo y sentí las cosquillas en mi garganta.
"¿Me creerías si te digo que llevo más de 10 meses sin tomar una?"
"¿Qué tomas allá? ¿Agua gasificada y té? "Preguntó con media sonrisa.
"Mucho vino y de distintas clases. "Dije y la vi beber de su lata.
"Meredith, ¿Ahora me dirás la verdad? ¿Por qué estás con ese tipo? Digo, es guapo pero tus ojos no brillan con amor. "Sus palabras no me tomaron por sorpresa y callé por unos segundos.
"Es un poco complicado. Me trae, es sexy, inteligente entre otras cualidades pero es un arreglo. Él necesitaba a alguien para casarse y cobrar una herencia y cómo cobrar eso tenía entre requisitos estar casado me pidió el favor. Debemos estar juntos alrededor de un año. "Louisa me miró no muy sorprendida, más bien pensativa.
ESTÁS LEYENDO
Cautiva En Sus Brazos +18
Mystery / ThrillerMeredith es una joven que tras una ruptura fatídica dice dejar todo su pasado atrás, con ello consigue enterrar al fantasma de su ex muy profundo en su mente, sin embargo, lo que no tiene previsto es que caerá en las sensuales garras de su captor, R...