Capítulo VIII

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Palacio Real...

Nefertiti se hallaba en los jardines reales, observando las bellas rosas que una vez plantó con ayuda de sus hermanos.
Mensah quien pasaba por allí se le aserco...

-Hola Nefertiti... -dijo sentándose al lado suyo, ella lo observo y le sonrió-

Ella le sonrió -Hola Mensah... ¿¿Qué necesitas...?? -le pregunto confundida esta vez-

-Queria venir a hablar con tigo y a hacerte una pregunta... -dijo mostrando una sonrojo en su rostro-

-Pregunta... -dijo accediendo a que le hiciera esa supuesta pregunta-

-¿¿Quieres venir con migo a la fiesta de la cosecha...?? -pregunto, la sonrisa de Nefertiti se borró a una larga-

-Perdoname Mensah, pero... Dakarai ya me hizo esa pregunta y dije que si... -le respondió, la sonrisa de Mensah se borró y una cara de enojo se pintó en ella-

Mensah...

¡¿Dakarai...?! ¡¿Ahora que está planeando ese bastardo?!... Si invitó a mi Nefertiti no es para nada bueno, a él siempre le gustó molestarla desde nuestra niñez.
Me levanté de dónde estaba sentado ye fui con el llamando de mi hermana...
No le di importancia y me fui dentro del palacio. Se que Dakarai siempre va al santuario real en las tardes, por eso estaría allí esperándolo...

En la tarde...

Dakarai...

Como todas las tardes, voy al santuario para poder rezar a mis dioses.
Iba doblando en la esquina y cuando entre unos dos brazos me sorprendieron, esos brazos me empujaron hasta que choque con una columna, sentí otro brazo en su cuello deteniendo un poco mi respiración... Abrí mis ojos y vi que era nada más y nada menos que mi hermano...

-¡¿Qué Te Sucede Demente...?! -le grite casi sin poder ya que su brazo en mi cuello no me permitía hablar bien ni respirara bien-

-¿¿Qué planeas Dakarai...?? -me pregunto, yo lo mire aún más confundido- ¡¿Qué Planeas Con Nefertiti...?!

Puse una cara de pensativo y dije con ironía...

-De echo, ahora que lo pienso, no e pensado en hacerle nada a Titi... -le dije con ironia, este me apretó más el cuello-

-Sabes que no me cuesta ahora dejarte sin aliento querido hermanito... -me dijo el menso este ¿¿Acaso estará celoso...??-

-No quiero hacerle a Nefertiti... -le dije, él solo río, creo que fue una risa falsa-

-¿¿Piensas que soy estupido...?? -

-¿¿Encerio tengo que responder esa pregunta...?? -le pregunté burlándome de él, apretó más su agarre a mi garganta, bien, fue mala idea-

-¿¿Por qué la invitaste a la fiesta de la cosecha...?? ¿¿Acaso le harás algo...?? ¡¿La Humillaras Frente De Todos?! -me grito, yo solo reí con ironía-

-No planeo nada... Solo quiero ir a la cosecha y divertirme, y pensé en ir con Titi... -dijo observando a su hermano a sus ojos-

-Si te atreves a lastimar a Nefertiti, juro que te... -lo interrumpí-

-Estas... Enamorado de Nefertiti ¿¿No es verdad?? -le pregunte a lo que él me miró nervioso, me soltó, dejando que volviera a respirar- Sientes una gran atracción por nuestra hermanita...

-Callate... -

-¿¿Y si no me pega la gana...?? -le pregunté a lo que él casi me pegó pero detuve su golpe con una mano- La amas ¿¿Ni es así?? Tú amas a Titi...

Logró empujarme, haciendo que casi cayera, pero logré sostenerme -Te estaré vigilando idiota... Si te atreves a lastimar a Nefertiti, yo mismo haré que veas al mundo de los muertos...-

Se fue del santuario de los dioses, yo solo acomode mi traje ya que se había arrugado por culpa de Mensah...

Me dediqué a rezar a los dioses...

Aposentos de Bek...

Nefertiti...

Estaban aburrida y fue a buscar a mi hermano mayor. Cuando llegue a sus aposentos note que se estaba preparando para irse a su trabajo de arquitecto. Perfecto...

-Hola hermano... -dije entrando a sus aposentos e ir a su lado-

-Hola Titi... -me dijo y beso mi frente- ¿¿Necesitas algo...??

-Si... Necesito que me lleves con tigo a las obras ya que estoy supermega aburrida en este palacio -dije como una niña chiquita a lo que él rio-

-Papá no lo aprobaría.... -

-Pero papá no tiene que saberlo... -dije sonriendo-

Bek lo pensó, tal vez lo estaba meditando, él siempre me llevaba con él cuando podía a las obras, pero la última vez, papá se enojó ya que llegue un tanto lastimada con raspones y sin un diente.
Soy un poquito curiosa con las cosas que hacen allí, desde ese día, no volvió a llevarme a las obras, pero hoy, quiero ir y ver como mi hermano reta a los soldados Egipcios... Es divertido verlo enojado...

Dioses de EgiptoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora