Meses habían pasado desde aquel incidente en la agencia. Durante ese tiempo se realizaron las investigaciones necesarias para saber qué ocurrió esa tarde y encontrar a los responsables que permitieron eso. Sin embargo, ni siquiera los más capacitados en la sección pudieron encontrar alguna pista, lo que enfureció a Irene y por consiguiente generó mucha molestia en los del concejo que atosigaban a la directora para dar las explicaciones necesarias con la amenaza de retirarla de su cargo.
Al mismo tiempo, el grupo conformado por Namjoon, Yoongi y Seokjin continuaron sus investigaciones sobre los traidores y a quienes ellos sospechaban que vendían información de la agencia. Por supuesto, todo bajo perfil. Lo que significaba que debían aparentar ser tan ignorantes como los demás cada vez que informaban algún comportamiento inusual dentro de los sensores. Por el momento no habían logrado extraer algo contundente y concreto como para realizar una acusación frente al concejo, pero estaban seguros que habían avanzado bastante, a pesar que hubieron momentos en que lo que se pudo averiguar desapareció misteriosamente.
Los entrenamientos de Taehyung, en cambio, se podían observar a simple vista que estaban tomando frutos. El ya no tan novato estaba próximo a enfrentar su primer misión real como agente de AGAPE. Sus instructores estaban orgullosos de lo que había podido lograr en todo ese tiempo con el muchacho. Seokjin, incluso pudo descubrir más curiosas habilidades que Taehyung tenia y que ni él mismo se había dado cuenta. Además, para la cereza del pastel, Jimin iba a comenzar a ser su entrenador, lo que le hacía sentir muchísimo mejor.
Incluso la ruptura que tuvo hace ya mucho tiempo, había dejado de ser tema en su mente por estar concentrado en otras cosas.
Estaba, digamos, bien.
Además, estar rodeado de la compañía de sus instructores, quienes se habían convertido en sus amigos, se había convertido en un gran soporte cada vez que la soledad lo atacaba. Ellos le daban palabras de aliento, y eran quienes intentaban animarlo cuando estaba cansado.
Por ejemplo, cuando Hoseok volvió, luego de un par de misiones, le había regalado una de sus tantas espadas de colección solo porque había superado uno de sus exámenes mensuales; mientras que Jungkook, incluso cuando estaban a punto de dormir en el dormitorio que compartían, se acercaba a él para enseñarle una nueva técnica para que pudiese utilizar en algún combate y, aunque pocos le puedan creer, ambos compartían la misma admiración por RM, el líder de su equipo. Tampoco podía olvidar a Seokjin, quien siempre le preguntaba por su estado anímico y le traficaba deliciosos postres que compraba. Y junto a él, se encontraba Jimin quien siempre que podía la pasaba pegado a él como si fueran uña y mugre.
Pero había algo en Jimin, algo misterioso que le hacía estar intrigado en él. Su aura era extraña y Taehyung no se atrevía a leerle la mente o utilizar sus poderes en él, por el respeto que le tenía.
— ¡Muy bien! — Esa era la voz entusiasmada de Jimin. Él estaba parado en medio de la sala de entrenamientos, la cual estaba totalmente vacía salvo por Taehyung y él. — Cuando hablamos operación encubierta, decimos que es aquella que irá a ser conocida por el mundo o por el enemigo, pero la responsabilidad no será rastreada ni menos probada. Por lo tanto nuestras identidades nunca serán descubiertas, y nos mantendremos en el anonimato.
Taehyung asintió a toda esa información.
— Por ejemplo, en este momento J-Hope y Sungjae, otro colaborador de la causa, se encuentran en una operación encubierta.
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BANGTAN DNA
Fiksi PenggemarA.G.A.P.E. es una agencia no gubernamental que tiene una división especial en la que son reclutados aquellos que poseen habilidades y características únicas que pueden ayudar al mundo a mantenerse protegido, peleando las batallas que se ven limitado...