BANGTAN DNA

20. SIN LUGAR A DONDE IR

Luego de regresar a la agencia, el grupo fue llamado para una charla de suma importancia en la sala de conferencias. Todos sabían que iban a hablar de la pérdida de los dos miembros en acción. Estaban con demasiado desanimo como para escuchar los regaños de Irene, incluso Yoongi se sentía nervioso por encontrarse con esa mujer, pero lo debían hacer. Taehyung y Jungkook habían sido capturados y ninguno de ellos pudo detener a los gorilas que se los llevaron. No podían quedarse de brazos cruzados o rendirse a la idea de perder a esos dos integrantes.

Namjoon tenía una mezcla de sentimientos en su interior. Estaba frustrado porque su misión no fue exitosa, y además de ello, dos de sus miembros fueron capturados por sus enemigos. por otra parte, estaba molesto consigo mismo por no poder proporcionar seguridad a su grupo y no haber podido actuar de manera prudente para evitar todos esos hechos. Y, al mismo tiempo, estaba enojado con otros dos de sus miembros que se desaparecieron de la escena y que no estuvieron disponibles para ayudar a que todo salga como lo planeado. Sí, hablaba de Hoseok y Yoongi, quienes todavía no le informaron qué fueron a hacer.

Quería golpear algo o a alguien.

Iban caminando por el último trecho a la sala de conferencias y cualquiera podía sentir lo tenso del ambiente. La tristeza y frustración mezclada con un aire de vergüenza y enojo. Desde el aura melancólica de Seokjin, Jimin y Jihoon al rostro avergonzado de Yoongi y Hoseok que no se atrevieron a verle la cara a Namjoon, quien, por cierto, echa humo por las orejas mientras avanza delante de los demás. Cuando finalmente entran pueden observar a Irene sentada en el extremo de la mesa con un traje impoluto negro y su rostro serio que ninguno podía descifrar que era lo que pensaba.

Todos se sentaron en silencio, tampoco se atrevieron a decir algo. Irene, por su parte, tomó unas hojas que probablemente eran del informe de misión que los transmisores habían escrito y comenzó a hablar. Ella mencionó cada uno de los detalles que cada uno ya sabía, los errores cometidos y la negligencia que tuvieron al tratar una situación como la que ellos enfrentaron. También sacó a luz el trabajo que hicieron Yoongi y Hoseok en su desaparecida. Nadie podía excusarse debido a que la directora sabía todo. Por lo que... nadie habló. Ella dio un fuerte suspiro, uno que cargaba y compartía cada una de las sensaciones que sus agentes estaban sufriendo, y prosiguió:

- Jungkook y Taehyung no están y debemos rescatarlos, vamos a dejar esta misión en segundo plano y vamos a atender un tema de mayor vitalidad, la vida de ellos dos. De cualquier manera, averiguar donde se encuentran también nos puede ayudar a poder seguir en nuestro camino de poder completar esta misión que se les fue encomendada.

-Sí, señora.

Irene asintió con su cabeza y llamó a Seokjin y a Jihoon para que se queden y conversen con ella acerca de lo que ellos recomendaban y para crear un grupo de investigación personalizado a sus dos agentes extraviados. Esta vez nada tendría que salir mal.

Y es que Irene le tenía un gran apego y cariño a esos dos chicos. A Jungkoook porque lo vio crecer y convertirse en el joven que es ahora; y a Taehyung porque le recordaba a ella en un principio, desde fingir ser fuerte todo el tiempo hasta tener que acomodarse en un lugar desconocido para poder sacar todo su potencial y lo que tenía guardado que la lastimaba. Enterarse de esa noticia le pegó de tal manera que no dudo ni un segundo en planear una manera para traerlos de vuelta.

Luego de esa reunión, Yoongi esperó por ella. Ambos se quedaron en esa gigante sala de conferencia solos. Hacía ya mucho tiempo que no conversaban y que tenían un tiempo para ellos, para su amistad. Yoongi puede recordar que la última vez fue cuando la mujer le encargó la formación del grupo de entrenamiento de Taehyung, las otras veces solo fueron un intercambio de palabras. Como sea, ambos se prepararon un café de la maquina que estaba en uno de los costados de la sala y se sentaron.