2. UN CHICO LLAMADO TAEHYUNG / pt II

333 27 2
                                    

Taehyung abrió lentamente sus ojos y se asustó al notar que no estaba en su hogar sino que parecía estar en una caja blanquecina. Las paredes eran de un tétrico blanco y supuso que había un vidrio que lo separaba de los científicos e investigadores en la otra parte con distintas computadoras y objetos tecnológicos que desconocía su existencia, no eran tan tontos para arriesgarse a salir lastimados por un malhumorado sujeto de prueba. Una vez que había asimilado un poco de la gran inmensidad de cosas que le estaba pasando se dio cuenta que técnicamente estaba sólo en esas cuatro paredes albinas; en realidad, técnicamente lo esta.

En ese momento confirmó lo que leyó en sus cómics, lo iban a examinar con cuchillas y aparatitos.

- Soy una rata de laboratorio- repitió resignado, éste era el fin del magnífico Kim Taehyung. Todo lo que estaba viviendo en esos momentos fue un golpe duro en su orgullo y su plan de felicidad que se había propuesto.

¡Eso no estaba ahí! ¡¿Por qué le tenía que pasar esto justo a él?!

Se levantó de dónde estaba sentado y observó con una expresión sería a todos los hombres y mujeres que anotaban sus movimientos como un simple experimento. Así cambió su estado de temor a enojo y rabia por ser rebajado a un simple objeto de estudio- ¡Diganme la maldita razón por la que estoy encerrado!

Gritar no le parecía mala idea para descargarse. Así que pasó los siguientes cinco minutos gritando insultos y maldiciendo a cada persona que estaba allí, hasta que un carraspeo de parte de uno de los cerebritos hizo que se callara.

- ¿Cómo es tu nombre?- Oyó una voz dulce de parte de uno de los científicos e investigadores del otro lado por unos parlantes que cree que estaban escondidos dentro de la habitación. Aquel cerebrito era alto y de cabello tan negro como el carbón, tenía ojos grandes igual que sus labios; su simple presencia demostraba pura elegancia y de alguna manera no pudo quitar sus ojos del muchacho que no parecía tener más de treinta años. - El mío es Kim Seokjin.

Lastima que su estado de animo le tenga cegado como para intentar para lucir amable -Mira, Kim Seokjin necesito respuestas porque no es normal estar teniendo una cita con tu novia y de un momento a otro aparecer encerrado en una cajita blanca- Hizo una reverencia cargada de ironía en ella- Soy Kim Taehyung, su linda ratita de laboratorio.

-No eres nada de eso, Tae...- El menor sintió unos cuchicheos de parte de aquel grupito de cerebritos y observó como Seokjin le daba un golpe en la cabeza a uno de sus compañeros- ¡Es por esto YoungJae que tú no los entrevistas!- Al parecer se dio cuenta que Taehyung lo seguía escuchando, porque las mejillas del más alto se tornaron rosadas y dio un carraspeo- Bien, disculpa por lo que escuchaste. Lo que tienes que saber es que queremos saber sobre tus habilidades, estás aquí para poder entrenarte.

-¡Y hacer algunas pruebitas!- acotó Youngjae, otro científico con Seokjin, ganándose otro golpe. -¡Empecemos! A tu alrededor podrás ver algunos objetos como pelotas y algunas figuras de polietileno, tu tarea es hacer levitar con tu mente estás cositas a tu alrededor y... quizás estrellarlas contra el campo de fuerza como estás haciendo ahora.

Y como había dicho, Taehyung estaba haciendo que los objetos a su alcance se estrellen contra todos los científicos pero eran detenidos por ese vidrio o campo de fuerza que había dicho Youngjae. Llegó un momento, luego de permanecer más de una hora manipulando esos objetos, en que el rubio se cansó y las cosas a su alrededor que estaban volando cayeron al suelo. Agotado se desplomó y una de las pelotas que seguía flotando lo golpeó en la cabeza como efecto secundario de utilizar sus poderes.

-Creo que es buen momento para informarte que este amigo de acá- Jin golpeó el campo de fuerza frente a él- es imposible que se rompa, por lo que te recomendaría que no gastes tus energías en él.

BANGTAN DNADonde viven las historias. Descúbrelo ahora