Entre Una Diosa y Un Demonio

cap 10

Narra Niclous 

Había pasado como dos días creo la verdad no sabía cómo pasaban las noches ni los días, no miraba los amaneceres, las ventanas estaban selladas no entraba alguna luz ni para darme la esperanza que pronto saldré de aquí, pero lo que más me preocupa es Thea, no deseo que Kaleb le ponga un dedo encima. Mis muñecas duelen tengo un color violeta alrededor de ellas y un dolor insoportable en mis hombros de tanto colgar, estos imbéciles no me han bajado, amenos para saber si sigo vivo o no, estaba solo en este maldito edificio, necesito agua, siento una resequedad horrible en mi garganta y boca, unos pasos me sacaron de mis pensamientos y cada vez se acercaban más, abrieron la puerta con delicadeza como que yo estuviera dormido plácidamente, sentí un escalofrió recorrer mi cuerpo.

-Niclous, te extrañe mucho amor-era la insoportable de Keyla, no sé cómo la coge Kaleb sin tener asco o lastima.

-¿Me puedes bajar amenos?-sinceramente necesito descansar, probar algo de comida o agua.

-está bien, pero con una condición-ella y sus malditas condiciones, pero deseo bajar de aquí y dejar de estar colgando como lámpara.

-¿Qué maldita condición es?- ella me dio una fina sonrisa malévola, al parecer no me gustara su condición.

-te voy a bajar pero me tienes que dar una noche de pasión-quede asombrado con su condición, yo no voy a meter a mi amigo en su vagina ni loco, este amigo no se sube ni tocándolo amiga, solo si mira a Thea él se levanta, ése no es el caso ahorita y si la golpeo, salgo de este maldito lugar sería más sencillo.

-me pides mucho Keyla, es solo una noche, la única noche que no olvidaras preciosa- ella fue hacia un extremo de la habitación, es tan fácil engañar a esta pendeja.

-no he olvidado todas las noches que pasábamos juntos Niclous, fueron las mejores de mi vida y es algo que quiero recuperar-termino de decir sus venenosas palabras y caí al suelo sin piedad, solté un gruñido de dolor, me cuesta levantarme y suspire.

-¿Cuántos días estuve colgado?-tuvieron que ser bastantes para no sentir mis hombros ni muñecas, no me podía ni levantar joder.

-creo que fue una semana y un par de días no se con exactitud-Keyla se acercó a mí y empezó a cortar los lazos alrededor de mis muñecas y tobillos, empecé a sobar mis muñecas, me dolían demasiado, Keyla fue por unas botellas de agua había una mini nevera en la habitación, no me había fijado, estaba consumido en cómo salir, me dio una botella de agua.

-Gracias, en verdad necesitaba agua-es lo único que le dije y es lo único que le puedo agradecer.

-necesitas hidratarte bien tus hermosos labios están resecos y pálidos, ya no son rojos y suaves, no quiero besarte cuando estas maltratado-

Al terminar de beber agua sentí un alivio recorrer por mi cuerpo, pero se tensó cuando Keyla se acercó a mi muy peligrosamente se sentó a ahorcajadas, empezó a mover su cadera de arriba abajo lentamente, sabia lo estaba haciendo la desgraciada, le seguí el juego, empecé a besar su cuello dejando besos húmedos, le mordí con delicadeza el óvulo de su oreja, y soltó un gemido, me quito la camisa con habilidad y empezó a morder suavemente mi pecho, le quite la camisa y el jean roto a Keyla la deje en ropa interior y la desgraciada ya sabía a lo que venía tenía lancería muy sensual color negro, cuando quiso quitar mis vaqueros negros, le di vuelta y estaba encima de ella, fue cuando la empecé a ahorcar, solo tengo que aguantar un par de segundos para que quede inconsciente.

Keyla cerro sus ojos procure que siguiera respirando no era tiempo que ella partiera necesito llegar con Ajax, él tiene que reprimir las almas de estos demonios andantes, busque entre su ropa llaves de un auto o moto necesito salir de aquí, encontré un celular necesito comunicarme con Ajax para que nos encontremos en algún lugar aunque no sé dónde estoy, no creo que este en chile todavía, encontré unas llaves, agarre mi camisa que tiene manchas de sangre ahorita que la miro, desbloquee el celular y empecé a marcar, nuestros maestros siempre nos decía que nos aprendiéramos los números de nuestros colegas por alguna ocasión importante y esa ocasión es ahora, esperé como dos tonos para que contestaran.

-Buenas noches, ¿con quién tengo el placer?-sentí un gran alivio, saber que está vivo este guerrero.

-Ajax es Niclous te necesito hermano, no sé dónde estoy y estaba secuestrado por Kaleb y Keyla- recibí un suspiro por parte de él, como de angustia.

-¿qué miras alrededor?-Salí del edificio y hacia un frio horrible.

-hay bastantes arboles alrededor, se escucha los rugidos del mar cerca, el edificio está a las afueras de la ciudad al parecer está muy oscuro la verdad-

- ya sé dónde estás ¿hay un carro o algo?-me parece familiar este lugar sinceramente pero todo está oscuro.

-si hay un carro-

-mira solo tienes que manejar unos kilómetros y te encontraras un motel, te rastree el celular estas en Grecia en la ciudad de Delfos hermano, te esperare en el parqueadero del motel- al escuchar eso quede atontado ¿cómo diablos llegue a Delfos, qué planeaba Kaleb conmigo?....