Capitulo 15

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Narra Thea

... Niclous me bajo de sus caderas con delicadeza y miramos a Ajax algo molesto con nuestra escena.

-Así los quería encontrar, ustedes están en problemas y más con el dios Apolo-trague en seco, saber que tendría problemas con mi padre.

No sabía cómo reaccionar por parte de Niclous solo lo miraba directamente y apretó suavemente mi mano, cómo para darme seguridad que nada malo iba a pasar.

-Ajax lo puedo explicar, te lo prometo- es lo único que podía hacer después que todo era evidente.

-No hay nada que explicar Theresa, Niclous me lo había comentado, pero ahora me lo han dejado muy en claro- estaba con el ceño fruncido la verdad es que si le molestaba saber que yo estaba con Niclous.

-Ajax vamos a tomar las cosas con calma, no hay que ser impulsivos-Niclous lo decía con su voz ronca y fría, es la primera vez que miro esta parte de Niclous es como alguien sin sentimientos y que solo se interesara por el mismo, algo así lo tomaba.

-No estoy siendo impulsivo, solo estoy siendo cuidadoso, tengo que proteger a Theresa de los plebeyos, tu bien sabes cuales son las reglas del dios Apolo, él quiere que toda su sangre se case con alguien de sangre pura o de realeza, y tu no eres ni pura ni realeza- quede asombrada sobre lo que había escuchado, ¿Niclous no era puro ni de la realeza? A qué viene ese comentario, a mí me vale madres si no pertenece ninguna de ellas, lo importante es que me haga feliz ¿no? Niclous reacciono de una manera peligrosa, soltó de mi mano bruscamente y empezó su camino para su casa, iba con paso apresurado y arrecho.

Emma y Darren quedaron sin comentario, solo quedaban las miradas silenciosas, y la mía estaba llena de curiosidad.

-¿Emma que está pasando aquí? ¿No entiendo nada lo que está ocurriendo y menos con la sangre pura y de realeza? ¡Qué rayos es toda esa maldita mierda!-Ajax me quedo viendo con asombro, más por mi vocabulario, por supuesto a mí me vale madres.

- ¡Theresa Aleyda Megalos!-ODIO cuando hacen esa mierda- que es ese vocabulario señorita, tú eres de la realeza y no puedes usar esa clase de vocabulario, y esto es lo que está enseñándote tus plebeyos-y es ahí cuando el apellido Megalos salió de sus casillas.

-A mí me vale una tersaría de verga, lo que tú y tu maldito reglamento puedan decir así que todas las reglas que mi supuesto padre Apolo ha hecho para mí y para todas las generaciones más, te las puedes meter por el culo-Ajax estaba bien enojado por lo que había dicho desde pequeños siempre me arruinaba mi diversión, solo por sus malditas reglas y lo que debía hacer. Dicho lo anterior corrí hasta la casa de Niclous, agarre el casco de mi moto, me aproximaba a la moto cuando alguien me grito.

-Theresa, espérame... me voy contigo-Niclous venía con su ceño fruncido aun pero, a pesar de eso no se desquitaba su furia conmigo, solo evitaba eso y me trataba neutro.

-No sé dónde ir, solo quiero alejarme de aquí, te informo por si te interesa- fueron mis únicas palabras para él y siento que fui algo grosera la verdad, por parte de él me dio un suspiro.

-Vamos- fue lo único que dijo y yo como niña bien portada obedecí.

Estábamos por la salida de la casa cuando escuche que Emma me gritaba con todas sus fuerzas como que me estuvieran secuestrando, Niclous noto que nos venían siguiendo, acelero tan rápido que lo abrace tan fuerte como si me fueran a separar de él, literalmente eso quieren hacer. Solo mire que Niclous pasaba muchas calles y que no eran muy transitadas, estábamos en Parnaso, pero estábamos en una calle muy estrecha y solo se puede manejar de un solo sentido, me quite el casco y sentí como el aire tocaba mi piel con delicadeza, se sentía bien, como el aire hacia que mi piel se erizara de lo fresco que se sentía, el viento enredaba mi cabello y hacia que bailara a su compas, aunque eso me dolerá más tarde la verdad, sentí como Niclous baja de velocidad y se acercaba a la orilla, hay muchos árboles pero si eres muy atenta miras la hermosa costa que hay en Grecia, Niclous paro y se quitó el casco, por lógica me baje y coloque el casco al lado de él.

-Hermoso ¿no?-no me miro, solo se dirigió a ver el paisaje.

-Si la verdad- se hizo un silencio tan eterno e incómodo – Niclous... lo siento por lo que te dije antes que partiéramos de casa, estaba alterada y no pensab...- Niclous hizo un movimiento brusco y me atrajo hacia él, sentí sus suaves labios contra los míos, tomando con posesión, con esa necesidad de nunca soltarlos, y le respondí de la misma manera, separamos nuestro beso y juntamos nuestras frentes, con nuestras respiraciones agitadas.

-no tienes que sentirte culpable, es solo que los dos estábamos alterados y con rabia, ven vamos-me tomo de la mano y caminamos hacia la orilla del mar, mire una sonrisa sincera y de alivio en esa atractiva cara de Niclous, sinceramente se mira tan hermoso con barba.

Me sonroje al ver que él se voltio y descubrió que lo miraba fijamente, sonrió plácidamente.

-que picara ella, viéndome sin disimular-lo dijo en tono burlón, sentí como mi cara se tornaba en un rojo carmesí.

Estábamos parados en la orilla del mar con nuestras manos unidas, nuestros dedos entrelazados como dando entender que era un símbolo que ellos también se necesitan mutuamente, ese sentimiento de necesidad hacia una persona, ese vacío que deja cuando no está junto a ti, preocupaciones, estrés te invaden ,al no tenerlo junto a ti.

-Theresa Aleyda Megalos-Acaso dijo todo mi nombre a que va esto-hermosa princesa y la única en mi vida, tu sabes que te deseo con toda mi alma y no te quiero compartir con nadie, eres ese rayito de luz que alumbra mi oscura vida y hace tiempo quería preguntarte algo- me tomo de las manos y se colocó al frente de mí y me miró fijamente, sus ojos tenían preocupación y nerviosismo pero a pesar de eso tenia un gran brillo de alegría, me sentía muy nerviosa-¿quisieras ser mi novia? Aun si tengo que estar en el infierno o donde sea amándote y cruzar mares, galaxias, hasta la ira de tu padre para estar junto a ti, porque créelo lo haría nena.-mis lagrimas se hicieron presente a la situación, ¿acaso esto en verdad me estaba pasando? Me sentía muy alegre saber que Niclous tenía una parte cursi y si empalaga pero le sale del corazón.

-Niclous...empalagas con tanta cursilería- una risa se hizo presente entre los dos.

-siempre arruinan un momento romántico si no es otra persona o si no tú la cagas Thea – me reí a su comentario y es verdad.

-el destino tampoco le gusta lo cursi que llegas a ser, cariño-hizo una leve sonrisa y ladeo su cabeza de un lado a otro.

-Aun no me ha contestado mi pregunta señorita Theresa-paso sus manos por mi cintura y yo pase mis manos a su cuello- así... tal vez esto te de tu respuesta entonces-me incline un poco para alcanzar sus labios, sentí como el me apretó más hacia él e intensifico más el beso, este hombre me va matar un día de estos con sus besos dios mío que gusto tenerlo junto a mí y poder comérmelo cada día. Nos separamos un poco para respirar estable, entre respiraciones agitadas, pude ver un atardecer, era maravilloso ver este fenómeno tan único e infinito.

-señorita Megalos, es oficialmente mía, le guste o no, usted va ser violada, por este bomboncito- abrí los ojos como un plato al escuchar sus palabras y por reacción del recibí unas carcajadas.

Que es tan gracioso que yo no le halle la gracia. En verdad estaba envergada por su reacción de último momento.

-¡Queeee!- fue lo único que pude decir.



Niclous en la foto*-*

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Entre Una Diosa y Un DemonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora