Extraña.-

Antivirus.-

-¿Qué has dicho? .- Le pregunta el doctor a Connor confuso.

-Que... que se ha escapado... No está.- Le responde tartamudeando.

-¿Cómo? .- Dice.

En ese momento noto que se acercan a la puerta a si que voy a la esquina de antes, me asomo y les veo salir de la habitación. Pero a Uno no.

Entro en la habitación y le veo atado a una silla.

-Uno... .- Digo en forma de suspiro.

-¡Caroline! .- Exclama.- ¿Qué haces aquí te tienes que ir...?

-No me voy sin tí.- Le digo quitándole los brazaletes que le tienen sujeto a la silla.

Cuando le quito todos, Uno se le vanta de un salto y nos asomamos a la puerta desde donde se oye la conversación del doctor, ya que está gritando.

-¡Pero cómo es posible! Si le puse suero para tenerla dormida hasta por la noche.- Dice nervioso y cabreado.- ¡Te dije que la vigilaras!

-Y lo hice, solo que... ¡Me fui un momento al baño!.- Dice también enfadado.

-Puff... Genial ahora puede estar en cualquier sitio.- Dice el doctor nervioso.- Espera... ¡Mierda, Uno!

En ese momento oímos sus pasos acercarse a nosotros a gran velocidad a si que salímos corriendo a la izquierda por la esquina donde me había escondido antes, seguimos corriendo hasta que vemos una puerta donde pone "EXIT" los dos a la vez la empujamos y salímos a una escalera de incendios oxidada, no me lo pienso y empezamos a bajar las escaleras corriendo a pesar de que todavía iba descalza, al llegar al final meto todo mi pie en un charco del asfalto.

Estámos en medio de la nada. Solo hay el enorme "hospital" encima de un círculo de asfalto del que sale solo una carretera, lo demás son matorrales y hierbajos secos. Sin saber donde ir, empezamos a correr por el único camino que vemos factible, la carretera, pero era tan larga que ni veía el final.

Hace un calor terrible y eso que por una vez en mi vida estoy vestida de blanco y con algo a lo que se puede llamar "vestido". La carretera está ardiendo y ya veo moverse el horizonte, por culpa del calor. Intento aguantar pero no puedo asique me voy parando, Uno, que iba delante mía, también se ha parado al ver que me he caído al suelo.

-Venga Caroline ahora no... Tú puedes.- Me dice Uno cogiéndome del brazo para levantarme.

Noto el calor del asfalto quemándome la cara pero peor es el calor que siento al rodear mi brazo por encima de su cuello y notar su mano rodeando mi cintura. Esto es muy confuso porque quiero que pare de tocarme pero a la vez le necesito.

Seguimos hacia delante, parece que llevamos siglos andando aunque en realidad solo sean unos minutos. Entre cierro los ojos, no podré aguantar mucho más. En ese momento, saliendo del horizonte movidizo, veo una furgoneta negra acercándose. Uno y yo nos paramos y pensamos por un segundo si tendríamos escapatoria, pero la furgoneta ya está a unos metros de nosotros así que nos quedamos donde estamos temiendo lo peor. La furgoneta para bruscamente a nuestro lado y la puerta corridiza se abre.

-Correr entrar.- Nos dice Yelanie.

Uno me ayuda a entrar y me tumbo en el suelo de la furgoneta. Cierran la puerta y noto el giro brusco para ir hacia donde nos dirigíamos.

-Toma te sentirás mejor.- Me dice Yelanie ofreciéndome una botella de agua.

-Gracias.- La digo sentándome y frotandome los pies llenos de heridas.

-Se que tienes muchas preguntas.- Empieza a decirme.- Y te lo voy a explicar pero antes necesito volver a activar vuestros chips.

-¿Cómo? .- Pregunta Uno.

-Cuando os intentaron descodificar no pudieron porque sa habían desconectado... Anda, giraros.- Nos dice haciendo un gesto para que nos demos la vuelta.

-Ah... .- Susurro al notar un agudo pinchazo en mi nuca. Me giro para ver a Uno.

-Mm... .- Intenta aguantar Uno.

Al parecer Yelanie había sacado de uno de los cajones de la furgoneta una especie de pistola pero se parece más a lo que utilizan las cajeras de los supermercados.

En ese momento aparece Kitzia delante mía y otro chico delante de Uno.

-¡Kitzia...! .- La digo abrazándola.

-¡Oscar...! .- Dice Uno.

-Me puedes contar ya la verdad por favor.- Le digo a Yelanie.

-Si... .- Empieza.- Caroline, no saliste de ninguna tripa, tú saliste de un experimento, el primero... Yo y Yes, somos científicos, en aquél edificio que lo conoces como "hospital", es donde te llevamos cada vez que creíamos que fallaba tu chip, nunca has estado en un hospital de verdad ya que no eres "humana". Trabajabámos en un proyecto ilegal pero bajo el mandato del gobierno, este proyecto se basaba en hacer a asesinos que pudieran matar sin sentir nada. Intentamos 1, 2, 3 veces y nada así hasta la octava en la cual nos ibamos a rendir pero un día llegamos al laboratorio y diste positivo, no se sabe quien te hizo a la novena pero fuiste el primer experimento que se hizo, nos mandaron a nosotros para cuidarte y ver tu evolución, hasta que empezaste a tener sueños y a dibujar cosas las cuales te llevaron a preguntas y a sentir emociones. Luego llego él, y cambió más aún las cosas, entónces creímos que eras defectuosa pero no es así quien te hizo fue por un motivo y ese motivo es cambiarlo todo y empezaste por cambiarlo a él. Uno, te llamas así porque eres el primer experimento que se hizo a la primera y no le dio tiempo al doctor a ponerte nombre, entonces te quedaste como "experimento número:1" pero la cuestión es que tu eres el mejor experimento echo hasta ahora que siempre a seguido todas las misiones y de repente... También tiene sentimientos...

-En eso puedo ayudarte yo.- Dice Kitzia.- Yo hablé con oscar... Le conté mucha información entoncés transformó el chip de Uno.

-Con que es eso... Has salvado a Uno como si fuese por señal wifi, ni hace falta sincronizaros entre sí... Caroline quien te hizo sabía que esto pasaría. Caroline... Eres el antivirus.