Anillo de esmeralda

Capítulo doce

Capítulo doce.

Nick se despertó, vio a Niah a su lado y recordó la conversación que tuvieron horas antes. Le había dicho que le ayudaría a encontrar alguna pista para buscar a su padre. Se acercó más a ella y no pudo aguantar acariciar su vientre desnudo. Estaba muy feliz, en una de sus caricias, ella abrió los ojos lentamente, parpadeó un par de veces y le sonrió.

-Buenos días mi vida.-Dijo Nick dándole un beso en los labios.

-Buenos días.

Ella se acurrucó en su pecho mientras le acariciaba el pelo, y él le acariciaba los brazos, haciendo que su piel se erizara.

-Nick, me dijiste que me ibas a ayudar a buscar cosas sobre mi padre.

-Sí, y te ayudaré, pero antes vamos a desayunar.

-Sí, tenemos que comer.-Dijo acariciándose el vientre bajo las sábanas con una sonrisa.

Ella se levantó de la cama, se sentó en el borde de la cama, y se empezó a vestir, de nuevo, el espejo delató a Nick que le miraba la espalda desnuda con una sonrisa pícara. Cuando terminó de vestirse, se dio la vuelta para mirarlo.

-Nick, el espejo te ha vuelto ha delatar.-Dijo tumbándose al lado suyo en la cama.

-Mmm, bueno, da igual, a ti ya no te importa tanto ¿verdad?

-No, la verdad es que ya no me importa, porque como yo ya te he visto a ti... ¿qué más da?

Él se levantó y se empezó a vestir, mientras que ella se peinaba y se hacia una trenza. Cuando terminaron, desayunaron tranquilamente y se fueron al cuarto de su madre. Nick notó que estaba nerviosa, y le cogió la mano. Llegaron a la habitación de la directora, y abrieron la puerta sin problemas, pues creían que habría algún conjuro de protección. Entraron y todo estaba muy ordenado. Niah se puso a buscar entre los cajones del escritorio de su madre, mientras que Nick miraba entre los libros. Llevaban como media hora buscando y no habían encontrado nada. Niah se iba a dar por vencida cuando Nick la llama y le enseña un libro.

-Niah, mira lo que he encontrado.

Le enseñó un libro, en el que había una hoja suelta que no era de ese libro, estaban su madre con el rey. Niah se quedó mirando la foto. ¿Su madre conocía al rey? Se fijó más en la foto, parecía que estaban comprometidos, pues los dos llevaban el mismo anillo, el plateado con una esmeralda incrustada que su madre todavía tenía. Nick se quedó mirando al rey y luego a Niah, que miraba el retrato. Vio que entre el rey y Niah había cierto parecido, en los ojos verdes y el pelo castaño tirando a negro, mientras que su madre tenía los ojos azules y era castaña un poco clara. ¿sería el rey el padre de Niah? Por lo que él sabía sobre el rey, llevaba bastantes años en el trono y todavía seguía. Niah seguía mirando el retrato.

-¿Crees que será mi padre?

-Pues no lo sé, pero hay cierto parecido entra vosotros dos.

Después de estar un rato sin hablar, Niah dijo:

-Nick, lo tengo que conocer.

-¿Qué? ¿Por qué?

-Pues porque a lo mejor es mi padre, Nick.

-Pero no estamos seguros, además de que no quiero ir hasta Deshinif en tu estado, tendríamos que ir andando para que tu madre no se dé cuenta de que nos vamos y te cansarías y el bebé...

-Nick...necesito ir.

-No, Niah, entiéndeme, no quiero que os pase nada ni a ti ni al bebé.

-No, Nick, entiéndeme tú a mi, llevo diecisiete años sin saber quién es mi padre necesito saber si es él...-Dijo mirándolo a los ojos.