Anillo de esmeralda

Capítulo quince

Capítulo quince.

Niah no sabía exactamente como iban a entrar en el castillo, ya estaban en frente de el, era enorme. Estaba cada vez nerviosa, Nick la cogió de nuevo de la mano.

-¿Cómo vamos a entrar?-Dijo Nick.

-Dejádmelo a mi.-Dijo Dereck a Nick, el chico que le había quitado a Niah, y que además, la había dejado embarazada.

Dereck se acercó a uno de los guardias que había al lado del castillo, el guardia, al verlo, sin decir ni una sola palabra, el guardia les abrió la puerta. Dereck se reunió con los demás y los tres entraron en el castillo. Al principio había un pequeño jardín con una fuente en el centro. Siguieron caminando por un pasillo exterior. Cruzaron otra puerta y entraron en el interior. La gente que pasaba por ahí, le hacían pequeñas reverencias a Dereck, que no les hacía caso, mientras que a Nick y a Niah los miraban con curiosidad, los que iban mejor vestidos, miraban a Niah con desprecio, por ir vestida como un hombre, ella simplemente los ignoraba, mirando al frente, sin soltar la mano de Nick. Siguieron andando por el castillo unos minutos, Niah se quedó extrañada, Dereck se sabía perfectamente por donde iban, como si viviera allí. Después de cinco minutos de andar, llegaron a un gran salón, donde había dos sillones. El salón estaba completamente vacío.

-Quedaros aquí.-Dijo Dereck, sin darle tiempo a que dijeran nada, desapareció por una de las puertas.

Niah estaba cada vez más nerviosa. Después de varios minutos de esperar, Dereck llegó con un hombre castaño con barba, y los mismos ojos que Niah, con una mujer rubia y los ojos mieles y una niña de unos siete años, rubia oscura con los ojos mieles. El hombre y la mujer se sentaron en las sillas, y la niña le dio la mano a Dereck. El hombre era el mismo que salía en el retrato con su madre, solo que un poco más viejo. Los dos se le quedaron mirando un par de segundos, haciendo que se sintiera incómoda, se miró un poco la ropa. Llevaba la ropa de Nick, tenía la trenza un poco despeinada y la cara un poco sucia, al igual que Nick. Cuando acabó su inspección, Dereck se acercó a Niah y le dijo al oído.

-Dame el retrato.

Ella lo sacó del zurrón y se lo entregó. Dereck lo cogió y se lo dio al rey, él miraba el retrato y luego a Niah.

-¿Ella es tu madre? ¿Para que habéis venido?

-Si, y hemos venido porque yo no sé quien es mi padre, y buscando en la habitación de mi madre, encontré el retrato y como llevabais el mismo anillo pensé que usted podría ser mi padre...

-Si, me casé con Zaphira, pero ella intentó asesinarme para quedarse con todas mis riquezas,la condenaron a muerte, pero escapó. No sabía que estaba embarazada, hasta que un día me envió una carta diciéndome que había tenido una niña y que algún día nos volveríamos a ver.

A Niah se le llenaron los ojos de lágrimas, pero se contuvo. ¿Su madre había intentado matar a su padre? ¿Y Dereck y la niña esa eran sus hermanastros? Se quedaron callados un momento.

A Dereck se le cayó el alma a los pies, ¿Niah era su hermana, bueno, su hermanastra? No se lo podía creer, entonces también era hermanastra de Tally, su hermana pequeña.

-Y como eres mi hija, y no tienes culpa de ser hija de Zaphira, te quedarás a vivir en el castillo. Por cierto, ella es mi esposa Kiara, madre de Dereck y Tally, que parece que ya os conocéis.-Dijo con una amable sonrisa.

-Ahora, iros a daros un baño, dormiréis en la misma habitación, porque no quedan habitaciones libres.

Los dos asintieron con la cabeza. Vinieron dos sirvientes, y empujaron a Nick y Niah suavemente por la espalda. A Nick lo metieron en una puerta y a Niah en otra. Una mujer le preparó un baño, se fue. Niah se quitó la ropa y se metió en la bañera. Se bañó con tranquilidad. Terminó y se fue a la habitación que le habían indicado. Abrió la puerta, la habitación era bastante grande, había una cama de matrimonio, pero no tenía ganas de admirar nada. Se sentó en la cama y se empezó a peinar el pelo. Terminó de peinarse y pensó en lo que acababa de pasar. El rey era su padre, Dereck y Tally eran sus hermanastros, su madre en realidad se llamaba Zaphira y había intentado matar al rey. Estaba sumida en sus pensamientos cuando, alguien llamó a su habitación.