Anillo de esmeralda

Capítulo 6

Capítulo 6.

Ya hacía una semana que se habían ido todos de la escuela y estaba muy vacía. Le había pedido a su madre si podía ir a Deshinif a visitar a sus amigos, al principio le había dicho que no pero había insistido tanto que al final dijo que sí. Estaba preparando la maleta para irse. Iría con el hechizo de teletransportación, pues si no tardaría mucho en llegar. Terminó de hacer la maleta se despidió de su madre y se fue hacia la entrada, se concentró y en un segundo se materializó a varios metros de una hilera de casas. Niah sabía perfectamente que casa era, antes de irse Nick se lo había dicho. Se acercó a una de las casas y tocó en la puerta. Tardaron un poco en abrir. El que abrió fue Nick, este no llevaba camisa y tenía el torso al aire, un torso definido seguramente por los entrenamientos. Enseguida Niah se puso roja como un tomate y Nick también pero no tanto como ella.

-H-hola.-Pudo decir Niah sin mirarlo a los ojos.

-Hola, pasa.-Dijo Nick apartándose de la puerta.

-Gracias.

Niah entró dentro de la casa. Iba a decir algo cuando uno de los hermanos de Nick chocó con ella y se cayó hacia donde estaba Nick, que la cogió, ella se puso más roja todavía y se separó del chico, con algo más de brusquedad de la que quería.

-Perdón, que patosa soy...

-No pasa nada, además no ha sido tu culpa, ha sido culpa se este monstruito que tenemos aquí.- Dijo Nick cogiendo a su hermano Oriam y llevándoselo a caballito mientras el niño se reía. Niah entró en la casa y cerró la puerta. Al segundo, la madre de Nick, entró en el recibidor, al ver a la chica se acercó a ella y le dio un abrazo al que Niah correspondió.

-Hola Niah cuanto tiempo sin vernos.-Al verla algo colorada se extrañó un poco y lo entendió todo cuando vio a su hijo mayor sin camisa.

-Nick, ponte la camisa ¿no ves la muchacha esta colorada?-Dijo mientras se iba a la cocina.

-Pero es que hace calor.-Le replicó algo divertido.

-Que te la pongas.-Dijo desde la cocina.

-Vaaale.-Dijo soltando a Oriam y poniéndose la camisa.

El niño pequeño se fue diciendo que iba a buscar a sus hermanos para decirle que Niah ya había llegado. Cuando los dos estuvieron solos había un silencio algo incomodo entre ellos.

-Le caes muy bien a mis hermanos.-Dijo el chico de repente.

-Ya, y ellos a mi son muy buenos.

-Ya bueno... ¿Vas a dormir en casa de Winn?

-Si.

-Ah pues...-No le dio tiempo a seguir hablando pues Winn entró en la casa con una sonrisa en la cara.

-Hola Niah.-Dijo dándole un corto abrazo.

-Hola, me alegra volver a verte.

-Vamos a mi casa que tienes que soltar las maletas.

-Si, vale, adiós Nick.

-Adiós, luego nos vemos que hoy es el cumpleaños de Lia, vas a ir ¿no?

-Pues claro, hasta luego.

Las dos se fueron sin hablar demasiado ya que la casa de Winn estaba al lado de la de Nick y cuando entraron Winn le enseñó la habitación de Niah.

-¿Cuánto tiempo te quedarás?

-Pues no lo sé. Una semana o dos. ¿Por qué?

-Pues porque mi primo aunque no lo demuestre te ha echado de menos.