《ONE SHOTS,TYPES, TODO》[Grant G. Ezra M. Barry Allen] Pt. 1© [✔]

Grant Gustin

Título: Imbécil Pt.2
GrantxLectora
Advertencia: Contenido Hot

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Narra _________:

Grant recorría mi cuerpo con ambas manos, cerré los ojos, pase saliva y detuve sus manos.

—No Grant.—susurré.—Estas ebrio.—lo mire a los ojos, sonrió cálidamente.

—¿Quién te dijo?—cuestiono acorralándome más contra la barra de la cocina.

—Es evidente tu aliento.—evite su mirada.

—Pero ya paso.—susurro en mi oído.

Volviendo a bordear mi cuerpo con sus manos.

—Tengo que admitirte que me encanta tu cuerpo, es mejor que el de Kendy.—dejo un beso sobre mi cuello.—Eres mejor que ella en muchos sentidos.—me miro a los ojos.

Trate de apartarlo, pero me fue imposible.

—Sé que te gusto __________...tu también me gustas.—tomo mi rostro, haciendo lo que añoraba desde hace un tiempo atrás, sentir sus labios sobre los míos.

Me besaba con cierta desesperación, correspondí posando mis manos sobre sus mejillas. No separamos para tomar aire, bajo, haciendo que su rostro quedara a la altura de mis pechos, tomo mis muslos, me impulso haciendo que me sentará en la barra, el florero cayó al fregadero, derramando el agua, las flores se regaron por la barra y el suelo, observe a Grant, su mirada era indescifrable.

Acerco nuevamente su rostro al mío, llevo una de sus manos a mi cabello, tiro del adorno que traía, haciendo que mi cabello cayese sobre mi espalda

—Me encantas así.—susurro para besarme nuevamente, alzo mi pierna derecha, donde se encontraba la abertura de mi vestido, le permitió tomar mi pierna con fuerza, mientras su otra mano, se coloco detrás de mi, en mi espalda baja, apegandome más a él.

Por el escote de la espalda, sentía sus fríos dedos acariciarme, de arriba a abajo, nos separamos nuevamente, no podía creer que estuviese en esta situación con Grant, siempre lo había deseado, y ahora lo estaba teniendo.

—¿Cómo se quita esto?—cuestiono irritado, señalando mi vestido, reí.

Tome su mano, colocándola en mi espalda baja, sonrió, me bajo de la barra, coloco su mano nuevamente, tomando la cremallera, bajándola con lentitud, rozo mi trasero, escuche un gruñido de su parte, termino de bajar la cremallera y se coloco nuevamente su anterior postura, deslizo cuidadosamente las mangas de mi vestido, haciéndolo caer de mi, dejándome semidesnuda frente a sus ojos.

Me miraba de arriba a bajo, volvió a ponerme sobre la barra, pero esta vez, acariciaba con lentitud, mortificandome, cerré los ojos, sintiendo sus calientes manos vagar por mi cuerpo, de mi abdomen a mis piernas, de mi espalda a mis pechos, de mi rostro a mi entrepierna, un suspiro brotó de mis labios.

Abrí los ojos, observándolo, me miraba lujurioso, deseoso de más, comencé a desabotonar su camisa blanca, sintiendo sus ojos verdes sobre mi, tomo mi trasero sin vergüenza, apegandome a él nuevamente, alzo mi rostro, unió nuestros labios, jugueteaba con mi lengua, paré de desabotonar cuando su mano, desabrocho mi sujetador.

Sin apartarnos de aquel beso, me saco el sujetador, lanzándolo por alguna parte, nos separamos por falta de aire, me miro a los ojos.

—Es la primera vez que me miras mucho a los ojos.—susurre con la voz agitada, sonrió.

—El momento lo amerita.—bajo su mirar a mis senos, sonreí sintiendo mis mejillas arder, los tomo entre sus manos y comenzó a masajearlos lentamente, un jadeo broto de mis labios.—He estado soñando con esto.—lo mire.—Con nosotros.—susurro dejando varios besos sobre mis labios.—Ahora te tengo.—beso lentamente, sin dejar de masajear mis senos.

En su boca, ahogue varios gemidos, se aparto de mi, sus manos se colocaron sobre mis muslos, bajo su rostro y comenzó a lamer mis pezones, gemí fuertemente, viendo una sonrisa juguetona en su rostro, siguió lamiendo para escucharme gemir, se detuvo y me recostó sobre la fría barra, enarque mi espalda por la frialdad, se subió con delicadeza, acomodando sus piernas a cada uno de mis lados

Una flor lila yacía en su mano, la llevo a su nariz y olió, me sonrió, acaricio mi rostro con los petalos, descendió la rosa por mi cuello, pasándola entre mis pechos, trazando un camino imaginario sobre mi abdomen, pasándola sobre mi braga, pasándola por mis muslos, hasta llevársela nuevamente a la nariz.

—Me encantas.—pronunció nuevamente, inclinándose hacia mí, besando cortamente mis labios, sus manos bajaban con lentitud mi braga, las saco, desabroche su pantalón, una sonrisa se dibujo en sus labios, tomo la rosa nuevamente, deslizandola sobre mi entrepierna, gemí al sentir aquel tacto.

Nuevamente paso la rosa, mordí mi labio inferior, sentí su dedo liberar mi labio, lo mire

—No lo hagas.—ordeno, heche mi cabeza hacía atrás al sentir ahora sus dedos estimular mi clítoris, gemí al sentir sus dedos dentro de mi.

Definitivamente está noche sería larga.

Continuará