Better together - CAMREN

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Encontrar a Ally había resultado más fácil de lo que Camila se había imaginado. Resulta que Dinah había estado al pendiente de sus ex compañeras de grupo, de su ex familia, se había dedicado a investigar la dirección de la mayor, también conocida como la más bajita de todas, cuando aún administraba su bar en Cabazon.

Camila se quiso golpear a ella misma cuando descubrió que Ally no había pasado tan desapercibida en el mundo como ella creía.
Cuando eran jóvenes, cada una de ellas había dicho lo que hubiese realizado si no hubieran llegado a ser parte del grupo.
Normani siempre había dicho que deseaba ser bailarina, que seguramente se habría mantenido en ello siempre y con el tiempo habría abierto una academia de baile, lo había logrado.

Dinah dijo que habría querido seguir cantando sin importar que, y si el "sin importar qué" incluía cantar en un bar en medio de un pueblo pequeño, prácticamente, Dinah lo había logrado.

Ally había dicho que quería una pastelería, amaba preparar cosas en el horno, pasteles, galletas, paletas. Amaba la cocina y siempre se dedicó a decir que ella hubiese sido muy feliz haciendo eso para vivir, pero alguna vez llegó a mencionar en una entrevista que si algún día el grupo terminaba ella aplicaría para Broadway. Lo había logrado.

Era gigante, su nombre aparecía en el centro y la fotografía de su hermoso rostro adornaba el espectacular de provocando que Camila y las demás tuviesen la gran necesidad de presenciar aquel espectáculo, poder sentarse en una butaca a admirar ese talento que habían visto crecer a lo largo del tiempo juntas.

Ally lo había logrado.

Camila compró los tickets sin preguntarle a las demás, aunque ninguna se hubiese negado. Simplemente era Ally Brooke en Broadway.

Condujeron hasta el hotel más cercano, y económico, que pudieron encontrar. Las tres se dejaron caer al mismo tiempo en las camas que había en la habitación, por fin podían sentir el cómodo colchón en su espalda y se quedaron ahí cada una pensando en lo difícil e increíblemente loco que resultaba ese viaje.

Juntar a Fifth Harmony, después de cuatro largos años, y como habían terminado las cosas entre las cinco chicas... Camila debía de estar completamente loca. Camila debía querer mucho a esa niña. Camila es una idiota. Camila no podrá juntar a Fifth Harmony. Camila nunca supo lo que sucedió con Lauren.

¿Quién le dirá a Camila la verdad? Pensaba Normani bastante nerviosa, sintiendo como su corazón latía a mil por hora. Ella no podría hacerlo jamás, no podría decirle a Camila lo que había sucedido. Alguien más tendría que ser la valiente, la fuerte, la cruel, la realista. Normani no, ella era una cobarde que se había aventurado en ese viaje por salir de su vida actual, por dejar detrás la academia de danza que estaba en la quiebra gracias al mal manejo de su contador, por volver a sentirse entre amigas como alguna vez lo habían hecho.
Normani no quería decepcionar a su amiga, no otra vez.

Los ronquidos de Dinah hacían que Normani sonriera, tantos años juntas y tantos recuerdos volvían a su mente con solo escucharlos. Siempre las habían hecho dormir juntas, Dinah y Normani, Camila y Lauren, mientras que Ally solía tener habitación para ella sola, las ventajas de ser la mayor en una agrupación de cinco personas. Eran más los recuerdos hermosos, que aquellos donde incluían alguna pelea o disgusto. Ojalá Fifth Harmony jamás hubiese olvidado los hermosos recuerdos.

Camila contaba los minutos mientras se terminaba de vestir, estaba nerviosa.

"¡Malditos dinosaurios!" Gritó Dinah de pronto sacando a las otras dos chicas de lo que estaban haciendo. La más alta dio un salto en la cama y volteó a todos lados tratando de saber dónde estaba.

Normani, a su lado, trataba de contenerse la risa. La había visto dormir la última hora, al pendiente de sus ronquidos y las pequeñas patadas que había dado. Sin duda sabía que su amiga había estado teniendo una pesadilla, pero jamas imagino que habría dinosaurios en ella. Dinah tenía la facilidad de ser increíblemente rara.

"¿Te estaban persiguiendo?" Pregunto la morena mordiendo sus labios sin poder ocultar del todo su sonrisa.

"No, esos estupidos dinosaurios son la cosa más fea que he visto en este mundo." Prácticamente dijo bufando Dinah al mismo tiempo que se ponía de pie y se acercaba hasta su maleta, dispuesta a comenzar a vestirse para la función "¿Por qué alguien los pondría en medio de todo el pueblo? O sea, son horribles y viejos. Tantas esculturas griegas de chicos guapos por ahí y deciden dejar dinosaurios."

Camila se encogió de hombros evitando decir alguna palabra, en realidad ella había deseado detenerse a tomar unas cuantas fotografías de aquella peculiar atracción en el pueblito donde Dinah se había escondido, Cabazon.

"¿Por que nunca hicieron una escultura de nosotras?" Pregunto Normani imitando a su compañera y sacando algo lindo para vestir.

"Tal vez si nuestro segundo álbum hubiese funcionado habríamos tenido alguna escultura" contestó Camila sin darle importancia. Comenzaba a maquillarse, y para ello iba a necesitar toda su concentración.

Normani y Dinah voltearon a verse, ambas abrieron los ojos tanto como pudieron.

Y cerraron la boca, no era momento aún.