♥🖤The Duality And Distance Disturbs Me 🖤♥ (Fredxy)

♥🖤The history we never had🖤♥

Foxy:

Después de alterarme por lo que Freddy me dijo, me mantuve lo más cerca posible del mimado teñido. Estoy, completamente desesperado y más que nada enojado. Quiero a mi pequeño, realmente quiero estar con él y tenerlo nuevamente conmigo.

-¡Golden, acompañame por algunas cosas!- gritó Chica.

Solesito fue con ella, se supone que comprarían algunas cosas. Freddy conversaba entretenidamente con Bonnie. Y yo, tan solo me limitaba a pensar en él sin saber exactamente qué hacer. No es que lo conozca desde hace mucho tiempo, pero Fredd parecía tener más intereses para querer viajar hasta Inglaterra, exclusivamente con alguien maníaco como su abuelo. Ese viejo no parece ser nada agradable, dudo que a mi pequeño prefiriera irse con él.

—Señor Foxy — me habló la mujer de traje plateado —. Noto que no deja de mirar por las escaleras, ¿necesita algo?

—No. No es nada — respondí sin desviar la mirada —Por cierto...

Me di una larga pausa, para pensar exactamente en cómo construiría mi pregunta. Quiero saber dónde está mi pequeño, saber de él. Es bastante extraño, me siento mal, me siento... Me siento de alguna forma tan inexplicable, ¿será así como se sientes los padres al no saber nada acerca de su pequeño hijo? Estoy lleno de curiosidad y miedo, miedo de que él le haya echo algo malo.

—¿Pasa algo, señor Foxy? — el suave tono de su voz, me sacó inmediatamente de mis pensamientos, haciéndome dirigir mi mirada hasta la suya.

—No... Nada — el disgusto por esa palabra, el título de la lamparita — Por favor, no me llame por el título de "señor".

La mujer soltó una curiosa carcajada repentina que me tomó por sorpresa. Su risa era sonora, pero suave y tranquila. Una risa tan tierna que incluso me hizo sonreir.

—Perdóneme, por favor — habló con dificultad, con pequeñas lágrimas en sus ojos —. Es solo que en esta casa hay un pequeño chico de extraños ojos que tambien se molesta por llamarlo así. Hasta ahora, creí que era el único al que no le gustaba.

Nuevamente la mujer soltó grandes risas bastante sonoras. Se notaba que con el tiempo le faltaba en aire. Y yo, por mi parte, me dispuse a pensar de nuevo con curiosidad. Ella dijo — con dificultad y entre largas risas —: "... El pequeño chico de extraños ojos..." y mi pequeño es la única persona que tiene unos bellos ojos extraños que realmente me encantan.

—Disculpe — pronuncié en cuanto acabó de reír —. ¿Hay aquí alguien más aparte de Golden, otro chico de su edad cuyos ojos son peculiarmente hermosos y vacios?

—Si, así es — esta vez habló en tono "normal" —. Es el joven Frederick. Ha estado aquí mucho tiempo en su habitación dada por el Señor Golden.

—¿Él estuvo aquí? Eso lo sé, quiero decir, él ya no está debido a que se fue... ¿Verdad?

—No, claro que no. Él sigue aquí, es solo que no puede salir — su rostro cambió, había algo ahí que no pude ver, pero que definitivamente ocultaban algo, como una pena o un sentimiento oscuro y difícil de entender —. Lo lamento tanto, avise si necesita algo más yo estaré aquí y me...

—¿Algo está mal? — ambos miramos hacia atrás, ahí estaba él —. Está todo en orden, ¿verdad?

—Si. Todo se encuentra bien, Señor Golden, el joven Foxy solo necesitaba saber acerca de los rosales que se encuentran fuera, la parecer le gusta la jardinera o la jardinería de la mansión.