La Anatomía de un amor; Eternos

Capítulo 49

Kara

Mi hija nacio exactamente un año después de que me casara con el amor de mi vida.

Verla tan hermosa, tan pequeña y tan nuestra es lo mejor que me ha pasado desde que me reencontre con Alex.

Alisson es rubia de ojos avellana como los mios, cachetes enormes y de tamaño increiblente grande para una bebé de apenas tres semanas.

Alex no ha querido separse de ella, todo es amor y paz hasta que son las 3:00am y el cansado debe ir a buscar a nuestra bebe porque sus lloros no lo dejan descansar.

Obviando que mi hija solo quiere robarme la atencion de mi marido no puedo ser mas feliz al saber que somos padres y estamos felices.

- Ven con papi.- Dice Alex a mi hija en balleno luego de que he terminado de alimentarla.- Mama merece dormir.

Yo lo miro atontada y lentamente recuerdo el alboroto que se armo esa mañana de 28 de octubre cuando los medios dieron a conocer el nacimiento de Alisson Montgomery.

《"Primer aniversario y primer retoño:

El matrimonio Montgomery Ford en la mañana del 28 de Agosto por fin tuvo entre sus brazos a su primera hija, la que decidieron llamar Alisson Montgomery, los recién casados y ganadores del premio Harvey-Freud que otorga la fundacion del mismo nombre como los medicos del año Kara Ford de veintiséis años y Alexander Montgomery de veintisiete se casaron en esa misma fecha el año pasado en una ceremonia intima en la mancion de la actual Sra. Montgomery en Florencia, Italia..."》

Todo fue una locura.

La imagen de mi marido con mi hija en brazos es lo mas bello que he podido ver en mi vida.

- Recuerdas que los demas vendran hoy cierto?.- Le pregunto a mi esposo que se encuentra totalmente embobado con Alisson.- ¡Alex, te estoy hablando?

El me mira aturdido y vuelve a fijarse en Alisson.

- No es hermosa?.- Vuelve a preguntarme como por millonésima vez desde que nació.- Es tan guapa como su padre.

¡Mas creido nadie!

- Si seras creido Montgomery.- Siseo reincorporandome en la cama.- Te decia que los demas vienen hoy, recuerda que Emma tiene algo que contar.

El asiente sin mirarme y lentamente los celos hacen mella en mi.

- ¿Podrias dejar a Alisson dormir en paz?.- Le pregunto con brusquedad y el sonríe cinicamente mientras niega con la cabeza.- Eres imposible Alexander Montgomery.

El suelta un risita y coloca a nuestra hija en su cuna con sumo cuidado.

- Tu eres una celosa.- Dice con una sonrisa mientras camina hacia mi.- Tengo un regalo para ti que a la larga tambien sera para Alisson.

Como suponia, nada ahora es solo para mi, siempre esta Alisson Montgomery detras de todas las ocurrencias de mi marido.

El me tiende una mano y yo la acepto con el ceño fruncido, me arrastra fuera de la habitacion de Alisson y bajamos las escaleras hasta nuestro enorme patio.

El hermoso jardin de rosas blancas y margaritas que nos da la bienvenida al enorme terreno que cerca nuestra casa nos da la bienvenida con una de las mas hermosas puestas de sol que haya visto.

- Es hermoso.- Digo hipnotizada por el destello de luces anaranjadas, purpuras y morado que nos ofrece el firmamento.- Hace frio aquí

El sonrie y me abraza inundando mis fosas nasales con su aroma.