No se qué hora es pero el sueño ya me está acechando. Llevo caminando más o menos como casi una hora y hasta ahora no ha habido sospechas de algo ni nada por el estilo.
No se por donde ir exactamente, pero igual sigo caminando. El lugar es muy grande y ninguna parte me sirve para dormir, ya que; o me duermo y me asesinan; o me duermo y empiezan a hacer experimentos siendo yo su conejillo de indias; una de dos. No sé, pero lo que si sé es que si me duermo en cualquier lado, algo me puede pasar.
—Niña... —canturreó una voz conocida— No tengas miedo de mí, ojos lindos... —dijo.
Oh, no...
Abrí la puerta que estaba frente mío bruscamente y empecé a correr. Nunca, durante toda mi vida, he corrido tan rápido como lo hago en estos momentos.
—¡Cariño, no temas! No te haré daño. —dijo mientras me seguía.
Seguí corriendo sin parar, hasta que me aproximaba hacia una ventana. ¿Debía hacerlo? Si muero, por lo menos quiero estar completa. Corrí con más velocidad hasta que traspasé el vidrio de la ventana rompiéndola en pedacitos, y caí violentamente contra el suelo causando un dolor insoportable en mi brazo izquierdo.
—¡Maldita! ¡Cuando te encuentre, te sacaré esos ojos uno por uno y le daré tu cadáver a los caníbales! ¿Me oíste? —escuché gritar la mujer desde el marco de la, recientemente rota, ventana. Mi vista estaba algo borrosa pero logré ver como desaparecía de mi campo visual.
Me quedé contando dos minutos acostada y luego tomé impulsó para sentarme.
—¡Ah! —gemí de dolor al sentir la herida de mi brazo palpitar.
Saqué algunos pedazos de vidrios visibles que estaban incrustados en este mientras mordía mi labio inferior para no gritar. Cuasi mi herida no tenía vidrios incrustados, visiblemente, tomé impulsó con mi brazo derecho y me levanté.
Sentí varias horas de agua caer sobre mi y luego el estrepitoso sonido de las gotas de agua chocar con brusquedad sobre el suelo.
Estoy afuera...
Cojeé con la esperanza de encontrar una puerta que conectara con la salida, pero lo que conseguí fue más y más patio; sin ninguna puerta alguna que me llevara a la salida.
Literalmente, sentí un dolor en mi pecho y la sensación de libertad se desvaneció.
¿Cómo es posible que este lugar no tenga salida?
Una vez que entres, las salidas desaparecerán...
Y desaparecieron, literalmente.
Crucé con dificultad el patio y me encontré unas escaleras, subí y por los lados había unas puertas de alambres, elegí la de la derecha ya que la otra tenía candado.
Para el colmo, la puerta que había elegido tenía un camino de sangre. Que suerte la mía.
En situaciones como estas, la sangre es tu aliada. Síguela.
La abrí lentamente y caminé despacio, o mejor dicho cojeé. Tengo la sensación de que algo aparecerá frente mío. Aunque, desde que lleué, he tenido esa cierta sensación. La odio.
Sinceramente, no se a donde voy, pareciera que mis pies fueran por su cuenta.
—Franklin. Franklin. Franklin... —escuché la voz de un hombre. Oh, eso no es nada bueno.
Me acerqué más a donde provenía la voz. Había un hombre del otro lado del alambrado que se movía de un lado a otro, aferrando sus manos a los alambres.
Era calvo, de alta estatura, traía puesto una camiseta blanca; sucia y rasgada, pantalones del mismo color y andaba descalzo. S voz era grave y ronca, sus venas se marcaban por todo su cuerpo, y su mirada se encontraba perdida en algún punto inexistente.
—... Franklin. Franklin. Franklin... —repetía una y otra vez.
—¿Franklin? —pregunté mientras me acercaba a él. De pronto paró su andar por los lado en seco y se calló, me miró sin verme y empezó a hablar en alemán, por lo que suponía, y se calló, secamente.
—No le digas a Franklin. —me susurró con voz sombría y se fue corriendo hasta perderse en la oscuridad.
Interno desconocido.
"No le digas a Franklin" Fue lo último que me dijo el interno desconocido antes de irse a la fuga. ¿Franklin no era el apellido del fundador de la empresa y el asilo?
Siento que mi cabeza explotará en cualquier pregunta que me haga.
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No se sí les pareció de poca inspiración pero trataré de mejorar ☺️.
Gracias por leer mi historia y no se pierdan el cuarto capitulo!
Nos leemos!

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«The Panic Asylum»
Mister / ThrillerUn oscuro secreto que guarda el Psychiatric Asylum Massive Mountain, deshabilitado en el año dos mil trece. Muchos paraderos aún son desconocidos, y Kathleen Knight: periodista de la cadena de televisión nacional en los Estados Unidos, CNN, descubri...