Recuperación

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Narra Amy...

Me levanté con un fuerte dolor en la cadera, debió haber sido por lo de ayer. Estaba sobre el pecho de Zeth, él me tenía abrazada, miré el reloj que tengo a un lado, en mi mesa; eran las 8:30.

Me moví un poco despertando a Zeth, me miró un momento, sonrió y acarició mi cabello. Él se levantó y salió dejándome acostada y tapada.

Regresó con Carlie y Esme, ellos me dieron medicamentos, me ayudaron a ponerme a la orilla, Carlie revisó mi cadera y piernas; vio que no tenía nada en la cadera pero una de mis piernas no se había curado todavía. Por lo que me la vendaron.

Me dolía mucho moverme, por lo que hoy no caminé. Estuve en mi habitación con Zeth a un lado, él no se fue para nada de la casa.

De vez en cuando alguien iba a visitarme y ver que no me faltara nada, Bella incluso fue a visitarme, me llevó libros y videojuegos que había comprado y que nunca regalo ni utilizó.

La mayor parte del tiempo estuve jugando videojuegos o durmiendo, casi no comía ni bebía nada. La comida me daba incluso asco.

Cuando fue hora de bañarme, Carlie me quitó la venda y todo lo que me había puesto para ayudarme a que mejorara más rápido. Zeth me cargó hasta el baño una vez que Carlie se había ido. Me dejó en la tina y se fue por toallas y todo lo necesario para bañarme. Al regresar se quedó en el short que llevaba solamente, me quitó la ropa que llevaba y me ayudó a bañarme.

Zeth se terminó bañando conmigo, pues era algo difícil tomando en cuenta que me costaba mover mucho las piernas. Para salir Zeth se secó y se puso su short, me dio una toalla que en la que me envolví la parte de arriba, él me cargó poniéndome otra toalla para las piernas. Me llevó a mi cama, me ayudó a secar. Solo me puse una falda y una playera delgada.

Pasamos el resto del día jugando videojuegos o viendo programas y películas.

Al día siguiente....

Ahora Zeth estaba sobre mi pecho, me abrazaba por la cintura. Me moví para despertarlo pues me dolía mucho la pierna. Él se levantó rápido, fue por Carlie, cuando me revisó la pierna se dio cuenta que no había mejorado nada mi pierna y que estaba aún peor, me preguntó si ayer había hecho algo que fuera un movimiento brusco para la cadera y las piernas, le dije que no, sabía claramente a lo que se refería, él me miró la ropa que llevaba como si no me creyera, seguimos hablando y terminó con yeso mi pie que es lo que estaba peor.

Repetí la rutina de ayer, solo que esta vez no me bañe por él yeso, solo me eche perfumes, pues para mi opinión apestaba a mil cosas.

Zeth me ayudo a cambiarme de ropa a algo que me tapara más, pues había bajado la temperatura notablemente.

Me quitó primero la playera y después la falda, debajo de ellas no llevaba nada, así que me tape con las cobijas de la cama para no morir congelada mientras Zeth buscaba mi ropa.

Cuando se dio la vuelta ya con la ropa en las manos me quitó la cobija de encima, miró mi cuerpo que temblaba por el frío y sin pensarlo me abrazó y me besó. Solo me quedé ahí sentada en la cama para después corresponderle el beso.

Con mucho dolor puse mis piernas alrededor de él para atraerlo hacia mi, podía sentir que entre sus piernas se ponía duro, él tenía las mismas sensaciones que yo, queríamos hacerlo ahora mismo pero no podíamos, no solo porque estuvieran los Cullen y lo podían matar, sino porque no me podía mover mucho y si ya me dolía la cadera, con eso me iba a doler aún más.

Me miró un momento, dejó la ropa a un lado de mí y me volvió a besar, esta vez con delicadeza se acercó más a mi, acarició mi espalda, lo que me hizo estremecer.

No duro mucho pues volví a temblar por el frío, primero me puso un pantalón que era de pijama, ese pantalón era caliente. Después me puso una playera de manga larga, no sin antes acariciar toda la parte de arriba, haciéndome desear que fuera algo más.

Ya era de noche, nos la pasamos jugando videojuegos, por suerte nadie nos fue a visitar en todo el día. No habíamos comido nada tampoco. La verdad es que no tenía hambre. Eso era extraño en mi, pues Bella estaba en la casa y no tenía ganas de matarla como otras veces.

Zeth bajó por comida y me obligó a comerla, cada bocado era una tortura para mi, incluso le puso sangre de humano como lo hacía Carlie, pero ni así me gustaba. Carlie entró para ver que comiera, pero él tampoco sabía porque no me gustaba la comida.

Nos fuimos a dormir después de comer, Zeth se acostó esta ves del lado de la pared, nos tapamos y me dormí en su pecho.

Me desperté en la noche por el frío, por lo mismo desperté a Zeth, él me quitó la playera que llevaba puesta y me pego a su pecho, pues él dormía solo en un short, me tapó y con sus caricias poco a poco me fui durmiendo, pero aún así no conciliaba el sueño, seguía teniendo frío.

Según sus conocimientos si no tenía yo ropa y estaba pegada a él iba a poder calentarme, pero ya me había quitado la playera y ni así me podía calentar. Así que me tapó con más cobijas, me pego más a él. Tanto que no había espacio entre nosotros, me abrazó y metí mi cabeza en su pecho, logré dormir al igual que el después de un tiempo.

Nos levantamos en la mañana por alguien que gritó

-¡Pero que...!
-¡Sabía que ese perro le haría algo!
-¡Que se largue el perro!

Zeth y yo nos despertamos sobre exaltados, giré mi cabeza para ver quien era y frente a mi tenía a Emmett, Rosalie y Jasper enojados, Alice solo me miraba con decepción.

Pero solo mal interpretaban las cosas, pues me habían visto con la espalda desnuda y tapada desde la cintura con la cobija, a Zeth lo veían con toda la parte de arriba sin nada como acostumbraba y ropa en el piso por Zeth que no encontraba que ponerme en la noche.

-Eres perro muerto-dijo Edward llegando
-¿Cómo te atreves a tocarla?-dijo Emmett
-No es lo que parece-dije asustada

Mi niñero, mi vampiro y mi familia #Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora