Capítulo 11.5

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Aun recuerdo perfectamente la primera vez que la vi, irradiaba una cegadora luz, tenía un gran carisma, bonita y de una buena familia, ella era como un ángel, la observaba fijamente, me decidí hablarle y con el tiempo nos hicimos amigos, ella podría ser la luz de mi hermano, la que lo sacara de la oscuridad en la que llevaba tiempo, para mi suerte se gustaron, la conocí más a fondo convirtiéndonos en amigos muy cercanos o eso pensaba, me dolía... me dolía verla con mi hermano, me dolía ver como la lastimaba, me dolía mucho el no poder estar a su lado.

Cuando se casó llore en mi habitación, ¿Por qué si desde un principio apoye su relación, me dolía tanto?

Mi hermano es un abogado respetable, también estudio administración de empresas para ayudar a mi padre, cuando gano un caso el acusado le dijo que se arrepentiría, Elle no le hizo caso y el tipo asesino a nuestra madre justo frente a él, desde esa vez él no ha sido el mismo, él se culpa de lo que le ocurrió, cambio... yo creí que ella podría, pero en lugar de eso, la está arrastrando a la misma oscuridad de la que él no puede salir. No lo permitiré, ella es importante si no lo es para él, lo es para mí.

Desde sus hermosos cabellos rubios, unos enigmáticos ojos color carmín, por demás muy extraños y a la vez hermosos, una pequeña estatura que la hace ver adorable, piel blanca y tersa, todo esto combinado a una figura de envidia, varias veces me he perdido en su curvas, sé que está mal desear a la esposa de mi hermano, pero es algo que no puedo evitar, ella tiene algo que me gusta, es muy amable y divertida.

La alejare de él, cueste lo que cueste. Porque ella es luz y no dejare que esa luz que tanto me gusta se extinga. 

Mi AngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora