—Es un restaurante chino que tiene muy buena pinta.—Afuera está un hombre en un carrito con brochetas de cien pies, alacranes, caballitos de mar, camarones, cangrejos, cucarachas, grillos, Chapulines y más asquerosidades más.
—¿Como sabes de este lugar?—Pregunto Dulce. Esa no se despega de Aldo para nada, parecen gomas.
—Por Google.
Entramos todos y valla que huele raro este lugar, pasamos por el área de bufete y hay muchas cosas raras que he comido y que se que saben bien pero se que no venimos por esas cosas raras.
—Puedo perder de una vez, no pienso comer nada de esto.—Dijo Dulce mirando todas las brochetas de animales raros que puso el mesero frente a nosotros.
—No, si no comes no juegas en el partido.—Dulce miro mal a Kendall quien esta tomando un cien pies.—¿Alex esto hacen tu y tus hermanos para salir de la rutina?—Asentí.—¿Que harán cuando anden ebrios?
—No preguntes, al último que pregunto le dolió demasiado.—Tomé lo menos asqueroso que encontré y fue el cangrejo, lo he comido, con salsas y muchos condimentos. Todos hicieron lo mismo y comimos al mismo tiempo.
Kendall fue el primero en correr al ver como se desprendió una cosa viscosa y salía un líquido amarillo. Seguido por mi y luego por Dulce. Vomite toda mi cena, mi comida y hasta desayuno.
Fue una terrible idea haber abierto la boca, de haberles enseñado esto que era tan familiar para mi.Al salir ya no hay muchos en la mesa, dolo quedan tres y hacen de esto más interesante. Tienen una brocheta de cada una sobre sus platos y piensan comerlas todas.
—¡Vamos amor tu puedes!—Grito Dulce como loca. Los otros dos son Harold y Johan quienes quedan.
—Apuesto 10 a Harold.—Grito Kendall.
—50 a Aldo.—Se unió Dulce a la competencia.
—Bien 1000 dólares a Johan.—Me gire a ver a Yerd que está loco.—Amigo depende mi mesada de ti.
—¿Te dan mil dolares de mesada?
—Cuando tu padre es un ex jugador de americano muy famoso si.—Mi boca callo al suelo.
—Mi madre es la mejor arquitecta de todo el puto planeta y no lo ha ando gritando presumido.—Dijo Aldo.
—Mi abuelo es Ted Williams—Y mi boca callo al suelo.—Era el puto amo del béisbol. —El Ted "The Kid" Williams era el mejor bateador moderno. Jugaba con lo Boston Red Sox, ganó la prestigiosa Triple Corona de bateo dos veces y tuvo un promedio de 344 hits por temporada con 521 home runs en toda su carrera. Es mi héroe sin capa.
—Kendall Williams, por eso en tu playera dice TED JUNIOR.—Pregunto Aldo curioso.
—Si, mi padre también se dedico al béisbol así que yo lo llevo en las venas y seré como el.
Me deje caer de puro tracero en el piso, ese hombre es mi inspiración para jugar y estoy jugando con su nieto, con un Williams.
—¿Alex te encuentras bien?
—Tu abuelo es por quien yo me enamore del béisbol. Su suing era perfecto.
—¿Podemos iniciar la competencia?—Dijo Yerd ansioso de ganarnos a todos.
Aldo me ayudo a levantarme y comenzó dicha competencia.
Ganó Aldo.—Cementerio.—Grito antes de entrar al baño a vomitar.
—Que se olvide de besarme.
—Tu también has vomitado.—Le dije.
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Una Steven en Apuros.
HumorAlex Steven, al ganar la beca de exelencia va a una nueva escuela, nuevas reglas, nuevas amistades, nuevas aventutras y ¿Nuevo novio? bueno eso es algo que tendras que descubrir agregando esta novela a tu bibleoteca.