do not mess with me

Capitulo 24: Recuerdos

Han pasado unos días desde el "accidente" en el callejón. Susan no me a dicho una palabra desde entonces, su mirada perdida me preocupa, es como si estuviera recordando casa segundo de lo sucedido.

Ya no me mira como antes, presiento en sus ojos un miedo profundo ante mi.

Gracias al paso de los días y al cuidado de Susan, me siento mejor en cuanto a salud, algo positivo tenía que salir de todo eso.

Otro Alex: ¿Te sigues quejando? Ella está viva y ahora se que está de mi lado, ¿No es lo que querías?

Alex: ¿No pudiste tener otro modo menos demente?

Otro Alex: Es el único modo que conozco, jajaja

Me encuentro en el ático mirando por la ventana, el clima se estaba despejando, hay unas nubes muy grandes y blancas acompañadas de la luz del sol.

Alex: Que silencio... No creí que volvería a tener esta sensación.

Otro Alex: Silencio igual a aburrido, ¿Que tal si mañana salimos de fiesta para celebrar mi cumpleaños?

Alex: Querrás decir mi cumpleaños, ¿no?

Otro Alex: Eso dije, mi cumpleaños.

Alex: No duró mucho la paz y tranquilidad.

Puedo ver por el reflejo de un espejo al otro Alex haciendo una mueca y sacarme la lengua.

Escucho un sonido a mi espalda, Susan me trajo comida, la dejo en el suelo y con el mismo silencio con el que entró, se dirijo a la salida.

Alex: Susan...

Ella no respondía, ni si quiera me miraba a los ojos.

Otro Alex: Déjala, debe de estar en su periodo.

Tomo la mano de Susan para detenerla.

Alex: Susan... Necesito hablar contigo.

Susan se detiene, parece dispuesta a hablar. Al decir verdad, no esperaba a que si quisiera hablar.

Alex: ¿Estas bien?

A penas dije eso me dieron ganas de golpearme, claro que no lo estaba, acaba de ver morir a alguien frente a sus ojos. Pero fue lo primero que se me ocurrió decir.

Ella seguía ignorándome, entonces la di vuelta para que quedáramos de frente y me mirara a los ojos.

Fue cuando la vi, su cara mostraba miedo. Un extraño sentimiento ataca mi pecho, no era nada parecido a algo que haya sentido antes. Esto se debe a que no es por mi, es el otro Alex quien tiene la mayor parte del sentimiento.

Otro Alex: Yo...

Siento que algo quiere escapar de mi, más bien, escapar de él.

Otro Alex: ...Quiero su sangre...

Lo miro por el espejo, en este veía mi reflejo, estaba actuando extraño. ¿Tanto le cuesta dejar a una persona con vida?

Mi propia respiración se hace más pesada.

Una mano toca mi hombro, miro sobre este, Susan estaba ahí. Ya no tenía cara de miedo, sino de preocupación.

Alex: Estoy... Bien...

Le dije forzando una sonrisa, las más creíble que podía poner.

Alex: Sólo necesito un poco de aire fresco.

Tomo la mochila con los "materiales" del otro Alex, nunca se sabe si es que las necesito.

Con facilidad salgo de la casa, como siempre usando la ventana de Susan. Su familia estaba de compras y Susan dio la excusa de que tenía examen mañana y por ello se quedaría estudiando.