Volví a mi cuerpo después de que el otro Alex término de comer en un local de comida rápida, extrañamente no hizo ningún escándalo, sólo se quejaba de que tenía sueño.
El clima era muy frío y nublado, parecía que estaba por llover, me gusta ese tipo de clima. Camine sin rumbo hacia hasta llegar a una plaza, en esta me senté y escuchaba a los niños jugar mientras yo miraba al cielo.
Tengo que pensar en que hacer de ahora en adelante, no tengo donde ir y nadie me conoce, no volveré al orfanato, eso sólo provocaría que me deprima y sufra por las cosas que cometí.
Al final no llegue a nada, mi vida ya no existe.
Alex: Arruinaste mi vida.
Pensé.
Otro Alex: ¿Vida? ¿Que vida? Yo he vivido más que tu en sólo unos días, tu "vida" no es diferente a estar muerto. La desaprovechas, si tanto la desperdicias te la quitare.
Alex: Pero tu vida esta hecha de la muerte de otros.
No volvió a responderme, sólo me dedico una carcajada y luego un silencio incómodo.
El clima estaba empeorando, el viento estaba soplando cada vez más. Los niños se iban acompañados de sus padres, podía ver como niños y niñas se tomaban de las manos con ellos.
Me hacia pensar, cuando era pequeño... No salía mucho ya que no tenía muchos amigos, me quedaba en casa y miraba por mi ventana como los demás jugaban, mis padres no tenían mucho tiempo para estar conmigo pero aprovechábamos cada momento que teníamos, usualmente salíamos.
Es extraño, me cuesta recordar mi vida antes de que mis padres fallecieran, mi vida cambió mucho desde ese día, es como si mi vida normal sólo hubiese sido sólo un sueño.
No puedo negar que no he vivido mi vida al máximo, pero seguía siendo mía, un vida pacífica y sin problemas mayores. Me pregunto que clase de niñez habrán tenido Francis y sus amigos para terminar como eran, o como habrá sido Bianca de pequeña, que le habrá pasando a los padres si todos para haber terminado en ese orfanato.
El viento soplaba con fuerza, mi pelo y bufanda se movían por este, creo que necesitare un lugar donde esconderme de la lluvia, ya estaban cayendo las primeras gotas.
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Entré a una cafetería, y justo a tiempo, ya comenzaba a llover muy fuerte. Le pedí a la camarera una café, tenía frío.
Una vez que me lo trajo dirijo mi atención a una TV en la cual estaban dando las noticias.
Noticiero: Se han encontrado en estos últimos días un total de 3 cuerpos. 2 mujeres y 1 hombre, al parecer todos fueron asesinadas con un hacha. El hombre era un policía, este se le encontró al lado de una de las mujeres dentro de un oscuro callejón, se estima que el momento de la muerte fue ayer en la noche. La otra chica fue encontrada en su habitación de un hotel, esta se encontraba en toalla y de se encontrado hace sólo unas horas. Las autoridades piensan que podría de tratarse de un asesino serial.
Otro Alex: Y listo, ya soy toda una estrella.
Alex: Muy bien, definitivamente ya no tengo vida.
En eso alguien entra un par de policías y se sientan a sólo un par de mesas más al lado, parecía que estaban en su descanso, estos (al igual que la gran mayoría de los clientes) quedaron interesados en la TV y no quitaron su mirada de esta.
Noticiero: Un momento... Nos están informando que el sospechoso es un menor de edad y que en su último ataque fue grabado por las cámaras de seguridad.
Reproducen en video, era algo borroso pero se entendía, la cámara de encontraba en el pasillo y se veía como entraba a la habitación, al rato de que lo adelantaron se podía ver a la chica que vivía en este, entrando y al cabo de otra reproducción rápida me veía a mi saliendo de este, no se me veía la cara pero mi ropa negra y bufanda roja era fácilmente reconocible.
Quede paralizado, mire por el reflejo de una ventana y podía ver a los policías hablar entre ellos, uno de ellos me apuntó con el dedo. Trague saliva, esto es malo, especialmente porque aún traía conmigo el bolso con el arma asesina.
Los 2 policías se levantan de sus asientos y se dirigen a mi ubicación, no quería hacer contacto visual.
Otro Alex: ¿Te quedarás ahí sin hacer nada?
Alex: ¿Qué se supone que haga?
Otro Alex: ¡¡Cualquier cosa, pero que sea ahora!!
Pero ya era muy tarde, sentí como uno de ellos me toma el hombro.
Policía: ¿Puede acompañarnos un momento?
No tenía tiempo de correr, no podía hacer nada, asentí con la cabeza.
Registraron mi bolso y vieron el hacha aún con sangre en ella, me esposaron y me metieron dentro de una patrulla, yo no hacia preguntas, seguía muy impactado, definitivamente ya me tenían. El policía que tenía mi arma en su mano entra al auto y toma la radio.
Policía: Aquí Jonson, lo hemos encontrado.
No podía hacer nada, ni si quiera me resistía. Luego un pensamiento fugaz apareció por mi mente, quizás esto sea lo que necesito, si me llevan el otro Alex no volverá a matar inocentes.
Otro Alex: ¿Qué se supone que estas haciendo? ¿Te estas entregando?
Me sentía extraño, mi corazón se acelera, mis manos no paraban de temblar, creo que... ¿Tengo miedo?
El coche estaba ya en marcha, los policías no mostraban alguna expresión.
Si me sirve de consuelo, al ser menor de edad no me pueden llevar a la cárcel. Mire por el espejo retrovisor para ver a los policías, pero en lugar de ello di mi atención a mi propio reflejo, o más bien, el de otro Alex, el de encontraba mirándome a través de este, su mirada era penetrante, su típica sonrisa maniática me ponía los pelos de punta.
Otro Alex: ¿Y cómo saldremos de esta?
Alex: No lo haremos, nos quedaremos ahí hasta que desaparezcas.
Otro Alex: Jajajaja ¿desaparecer? Tu no puedes vivir sin mi, soy una parte de ti, tanto como tu una de mi. Claro que yo estoy mejor...
Alex: Mi vida sin ti sería mucho mejor.
Otro Alex: Tu vida sin mi, no sería vida jajaja.
Realmente me estaban dando una ganas de darle un golpe, pero era imposible.
Respire, y trate de calmarme, de seguro que quiere que me enoje y terminar siendo influenciado por él. Desvíe mi mirada para ver por la ventana, las calles se veían deprimente por la lluvia.
En mi mente podía escuchar gritos, retumbaban con un fuerte eco, vi el espejo y el otro Alex tenía sangre en mano, a su lado estaba Bianca quien también estaba con sangre, pero no como él, si no que la sangre provenía de ella. El otro Alex tenía un objeto punzante con la que la estaba apuñalando lentamente por debajo de su costilla, escuchaba como gemía de dolor, debía de ser insoportable, el objeto de movía de arriba a abajo, de lado a otro, era insoportable ver como la torturaba lentamente.
Alex: ¡¡¡PARAAAAAAAAA!!!
No lo pensé, literalmente lo grite, la ilusión desapareció, pero los policías detuvieron el coche y me quedaron mirando, creo que les di un buen susto, mis manos temblaban, y mi piel estaba pálida. Ellos se miraron un instante y dijeron algo por la radio, yo no podía escucharlo, sólo oía la risa de el otro Alex en mi cabeza burlándose.
Estos desviaron el camino, al parecer, pero ok les pregunte a donde nos dirigíamos ahora.
Cuando volvimos a detenernos, nos encontrábamos frente a un edificio gigante, estábamos lejos de donde creí que llegaríamos, en la entrada había un letrero enorme que decía: Manicomio M.S.
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do not mess with me
Ficção AdolescenteAlex es un chico de 16 años que caba de perder a sus padres. Sin ningún familiar se ve obligado a vivir en un orfanato, en el cual conoce a Bianca. Una chica que necesita ayuda.