Fernando
Antes de tocar me preparo para hablar, si el niño no guarda bien secretos, adiós mi hombría de poco hombre con valor.
Fernando: Lucero (menciono con voz grave, no intencionalmente)
Veo como ella sube su mirada lentamente hasta topar con la mía y traga duro.
Se levanta y se acomoda el... ¡Caray! ¡Que curvas madrecita! Me quedo atónito al ver que bien le quedó el vestido, no ha engordado ni un kilo diría yo, si hace siete años aproximadamente el último vestido que compramos en esa tienda le quedó prácticamente igual, aunque sin exagerar ahora tiene un mejor cuerpo y mejores curvas que en aquella época, sin duda el embarazo le sentó a la perfección.
Lucero: Señor Colunga (dijo firme)
Fernando: ocupamos hablar señorita Hogaza (dije neutro)
Ella se sentó y me ofreció con la mirada el asiento que se encontraba delante de su escritorio. Negué por lo que al igual que ella me mantuve de pie.
Fernando: Tuteame (le dije)
Lucero: Dime ¿qué ocupas Don Fernando? (Dijo enfatizando el "Don")
Fernando: Hablar... (comencé a recorrerla con mi mirada desde la punta de sus zapatos hasta sus ojos de manera en que lo notase) ¡Me encanta el vestido que llevas puesto! Sabes...Me recuerda aquellos días de verano en los que habían fiestas de noche en los salones junto a la playa y tú nunca ibas, hasta el día en que te dije que fuéramos juntos... (dije recordando aquella hermosa vez) era un vestido muy similar al que llevas puesto.
Ella se quedó en silencio como si también recordara aquella vez en la que por primera vez salió a bailar y me piso totalmente por falta de experiencia.
Reí recordándolo.
Y al parecer ella también lo había recordado ya que al reír escuché como otra voz seguía mi sonora carcajada al compás y ambos mirábamos nuestros zapatos con unas sonrisas bellas diría yo; en especial la suya.
Ella levantó la mirada topándose con la mía fija en sus ojos.
Lucero: también lo recordaste... (mencionó casi en un susurro)
Asentí sonriente.
Lucero: eran bellos tiempos pero en fin... (suspiró) ¿qué ocupabas?
El se quedó pensativo mientras su mirada estaba fija en los ojos miel de su...secretaria. Tal vez por alguna razón el niño no se lo había contado o ¿sí? Cuando ya estaba decidido a hablar ella le interrumpió segundos antes de que el comenzara a hablar.Lucero: Ya me lo contó, soy su madre, no hay secretos al menos que sea "de vida o muerte" y aún así es mi confidente y yo su madre y también una amiga.
Sonreí al pensar ¿Cómo hará su papel de mamá?
Fernando: lo vi en aquella tienda y pensé en ti, al principio tan solo lo compré en tu talla pero después te vi en el parque con un niño y decidí llamarle la atención al pequeño aún sin saber que era tu hijo y le dí la bolsa con la nota que supongo ta habrás des...
Ella lo interrumpió.
Lucero: me llamó mucho la atención la nota (dijo sacando algo de la parte delantera de su bolso)¿Por qué mandaste una carta después de tantos años? ¿Por qué? (Dijo soltando una lágrima)
Narrador Omnisciente
Él sin pensarlo mucho abrazo a aquella mujer con fuerza pero sin ser brusco al ver como ella intentaba retener las lágrimas pero su mandíbula temblaba.
Ella siguiéndole el paso le agradeció con fuerza aquel abrazo que por tantos años había estado esperando o mejor dicho, aquel abrazo que tanto había estado necesitando.
Como si fuese en cámara lenta aquel abrazo había tocado el corazón de ambos haciéndolos recordar aquellos recuerdos vividos mutuamente en aquellos días.
Ella se separo levemente de él poniendo sus manos en el pecho de él.
Fernando
Al sentir como se alejaba levemente sentí como algo se quebraba en mis adentros pero no supe averiguar que era ese dolor que no duró mucho en llegar.
Pero no, tendría que reprimir esas emociones.
Lucero: ¿Qué harías si sigues queriendo a alguien y no sabes si esa persona te quiere a ti? (Preguntó aún con su cabeza apoyada en mi pecho y prácticamente sollozando)
Me quedé pensado¿Qué haría yo? Esa era la pregunta que día tras día yo me generaba al desayunar y al lavarme los dientes por la noche...¿Qué haría? Será que acaso ella siente aún cariño por mí o tal vez, aunque sea un poco de afecto hacia mí.
Fernando: no lo sé Lucero. En ocasiones yo me pregunto lo mismo pero no logro encontrar respuesta y aún así sigo pensando que tal vez algún día me amo, o que tal vez siente o sentirá cariño por mí algún día... En realidad es difícil responder cuando sabes la realidad de las cosas o de la situación en la que te encuentras y no puedes cambiar el pasado tratando de arreglar el presente o el futuro.
Lucero: Se nota como te enamoraste de Sandra... (susurró)
A já, si de Sandra se tratase no estuvieras aquí y menos te abrazaría... Uf...
Fernando: dime algo... (dije) ¿Hace cuánto que no pasamos tiempo juntos?
Entonces la intensidad con la que ella se separó quebró algo dentro de mí.
Lucero: no, bastante tiempo y ni por un café nos volveremos a ver, este sólo fue un abrazo; un abrazo y nada más.
Sus palabras me golpearon entonces mi lado obscuro me tocó.
Fernando: nos volveremos a ver Lucerito, las cosas pasan por una razón y ahora tu eres mi secretaria...yo...soy tu jefe.
La vi tragar saliva por la seriedad de mis palabras em cierto tono neutro, aún no encuentro la respuesta de momentos como éste en los que algo en mi me positiva a seguir siendo quien no soy.
Lucero: de acuerdo, cada quien tenemos diferente formas de pensar, si tienes que dejar me algún trabajo déjalo, mañana a primera hora te lo entrego, por el momento, jefe (dijo enfatizando las últimas palabras em especial esta última) puede retirarse.
Me quedé callado unos segundo hasta acercarme más a ella hasta el punto en el que sólo su oído pudiera escucharme.
Fernando: ¿Hace cuánto no sientes un beso?
Sentí como ella se tensó notablemente y reí por lo bajo al tocar sus ardientes mejillas ahora tenidas de un color rosa fuerte; tal vez en mucho hayas cambiado pero para mí, eres la misma Lucerito.
Intento caminar a un lado pero la tomé por la caderas y en un intento suyo a escapar la tomé por la cintura, haciendo que me viera y uní nuestros labios para frenar su intento a escape.
Poco a poco la magia de viejos y bellos recuerdos fueron invadiendo mi mente hasta el punto en que sin darem cuenta o sin intención de mis labios salió un sonoro gruñido entre los suyos para susurrar: mi amor...
◆◇◆◇◆◇◆◇◆
Ah! ¿Cómo los he dejado el día de hoy?
Como ya van venido ahora sí, comienza la acción en esta historia y sobre todo no se pierdan el próximo capítulo, habrán nuevas emociones en ciertas personas!!
;)
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Mi jefe #LC
RomanceLucero es una chica desprevenida, linda, sensual, testaruda pero cariñosa, carismática y algo dulce pero si quieres también puedes encontrarle ese lado de enojo, furia, terca y seria. Fernando es un hombre guapo, terco, testarudo, sensual, con diner...