Galanting: "Una boutique mágica".

8. Puesta en bandeja

Thalia y fany se fueron a hacer un poco de turismo pues estaban nada más y nada menos que en Londres. Ellas fueron al museo nacional y natural durante los primeros días de estar allí pero no les dio tiempo a ver más museos o sitios de interés hasta ahora.

Gracias a estas vacaciones tuvieron tiempo de visitar otros lugares que no podrían perderse como el Museo Tussauds, el ojo de Londres, Palacio de Buckingham, Puente de la torre, Trafalgar Square, Catedral de San Pablo, Abadía de Westminster y un paseo en barco por el río Támesis. Era lo mejor que les había pasado en la vida. Eran libres. Bueno eso creían...

—¡Aja ja ja! ¡Olééé España tururuturu!(Se escucha alguien gritando alto)

Muchos ingleses se quedaron mirando extrañados por Trafalgar Square. Fany estaba abochornada.

—Creo que te pasaste con la bebida. No hagas el ridículo aquí en medio y volvamos a la fiesta que dentro nos están esperando.

—Puss sabies quiee que no pienso voulver aallii, quiierro can-can-cantar. Ola ola la tirituri.—Dijo Thalia cantando mientras hacía movimientos extraños bailando charleston.

Tenían que volver al "Club Marquee" que estaba en Oxford Streat porque habían salido a tomar algunas copas y tónicas. Ahora Fany se encontraba en medio de Trafalgar Square en una de las persecuciones de su hermana, la cual, estaba algo beoda y colgada en ese momento.

Fany tiraba de Thalia con fuerza—¡Vamonooosss! No seas tonta.

—¡No! Quiero disfruttar deo mui vuida.—Dijo llorando.

—Venga, ya queda poco. Mira allí está el club.

Les estaba esperando Miguel, el camarero, y sus amigos. Aquel camarero Valenciano tan amable había venido con ellas para despejarse del trabajo pues ,posteriormente, les contó de que ser camarero es un trabajo duro y que como eran tan amables decidió invitarlas a unas copas en el club.

—Ya estáis aquí. Por fin—Dijo Miguel riendo—Estaba aquí con mis compañeros de trabajo. Este es Mike, ella Daniele, él Charles, George y Amaya. Compañeros, ella es Fany y Thalia también son españolas.

—¡Hola Fany!—Saludó Mike.

—¡Encantada! Espero que disfrutéis.—Dijo Daniele dando la mano a las hermanas.

—¡Encantado de conoceros!—Charles dio dos besos sólo a Fany.

—¡Tomemos más para celebrarlo!—Comentó su amigo George.

—¡Calla George!—Amaya le dio un manotazo bueno—¿Dónde os habíais metido? Miguel nos ha contado como os conocisteis en nuestro bar de tapas.

—No os imagináis lo que he tenido que pasar con ella corriendo. Madre mía ,que no beba nunca más porque no querría que se me fuera nadando por el Támesis —Dijo Fany Riendo.

—¡Qué exagerada eres! ¡¿Thalia estás mejor?!—Le preguntó preocupado Miguel.

—Sí, creouu—Dijo mirándose los dedos aturdida.

—¿Cuántos dedos tienes?

—Umm... —Empezó a contar mirándose los dedos—1,2,3,4,5,6,7,8,9,10,11,12,13... ¡ESPERA! he contado este 3 veces. Voy a empezar de nuevo: 1,2,3,4 ,5,6,7,8,9,10,11,12,13,14...

Mientras Thalia seguía en trance, Fany vio a uno de los jóvenes que entraron el otro día en su tienda y se alteró.

—¿Pasa algo? Te veo nerviosa.—Preguntó Miguel.

—Tenemos que irnos. Lo siento. Mi hermana está en mal estado y no voy a permitir que sufra más.

Realmente Fany pensaba en irse porque si su hermana, en ese estado, viera a ese chico podría darle una mala impresión desde el primer momento. Eso sería un punto en contra de su hermana porque estaba colada por él.

—Vámonos Thalia. Adiós chicos. Me pasaré por el bar y ya hablaremos.

Mientras salían por la puerta escuchó que alguien las llamaba.

"Qué no sea él, que no sea él"—Se repetía en su cabeza una y otra vez.

*Hola chicas, qué casualidad —Dijo riendo.

—"Demasiada diría yo"— Pensó—Sí, las casualidades... Tenemos que irnos porque mañana trabajamos.

Thalia salió primero obligada y empujada por su hermana pero cuando le tocaba salir a Fany, notó que alguien la agarraba de la mano.

—¿Qué pasa Migu... Tú?

*No quiero que os vayáis por favor. — Dijo el joven de nuevo con cara triste y cogiéndole de la mano—Conozco a pocas personas porque también acabamos de venir a Londres desde Liverpool y...y... ¿Podemos hablar fuera?

—Tiene que ser rápido. Recuerda que tengo que irme.

*¿Qué le pasa a tu hermana?

—Amm... Está un poco bebida pero ¿Qué querías decirme?

*Nosotros venimos de Liverpool y hemos ido a lugares como Hamburgo, pero nunca habíamos estado en una ciudad tan grande como esta. No conocemos a nadie porque esta es una nueva ciudad para nosotros y siempre estamos ocupados por eso tenemos pocas relaciones aquí en nuestro entorno. Tenemos que ir a teatros y programas de televisión porque nos quieren aquí y porque hacemos buena música. Por ello, ¿Te gustaría que fuéramos amigos?. También estamos solos en esto y necesitamos a alguien de apoyo, por eso queremos contar contigo y con Thalia.

—A mi me parece bien. Nosotras también estamos solas en Londres.

*¿Amigos? —Dijo dándole la mano.

—Amigos.—Dijo Fany dándole la mano—Siento aquella vez que os juzgué por ser ladrones y unos mamarrachos. Al principio pensé que erais diferentes a como sois ahora y quizás me equivoqué.

*¿Pensabas eso de nosotros?

—¿¿Eh?? "Mierda se me escapó" —Pensó— Bueno... "Agua pasada no mueve molinos". Tengo que irme con Thalia. Ya nos veremos...—Salió corriendo con su hermana de la mano llena de vergüenza pero ,cuando estaba dispuesta a irse, le volvió a tomar de la mano, la arrastró y le dio un abrazo.

*Gracias.

Después de aquella mala pasada, Fany tuvo que arrastrar a su hermana y vigilarla por las calles para que no se metiera en líos o se cayera en alguna alcantarilla abierta en el camino de vuelta al hotel. Pues al final quizás Thalia tuviera razón. Quizás las causalidades existen.