24 de septiembre:
Mi verano acaba hoy.
Renacido en un poema a medio escribir,
escrito por mi mano de escarcha,
recitado por mis labios,
en mi boca congelada,
ajena a tu calor,
cómo no,
como yo.
Granizas sobre mi,
un rechazo inminente hiela mi sangre,
la rima más fría de este poema distante.
Nada fluye, sólo el tiempo sin verte,
siento el calor que ni nos dimos.
Perdí la fé en el presente,
deja ya que acabe,
al fin,
de perderme,
sólo si es
en tu invierno perenne.
ESTÁS LEYENDO
La extensión del mar
PuisiLa extensión del mar es inabarcable para una sola persona. Este recopilatorio no es más que un intento inacabado de hacerlo. Cada emoción provocada, cada persona perdida en mis palabras, cada estrofa que se cuela en vidas ajenas, cada dedicatoria em...
