ENGAÑO INDIRECTO... O COMO SE DIGA.

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CAPÍTULO 13.

- Yasmina, Uriah, ¿que hacéis metidos bajo la mesa, vestidos de príncipe y princesa?. -Dice una voz muy familiar.

Dios, me duele todo.

Lo que nos pasó ayer a Uriah y a mí debería ser ilegal.

Esa niña, esa niña del..... Aggg.

Ayer estuvimos TODA, pero TODA la maldita noche jugando a las putas y a los putos.

ODIO A LAS MALDITA PRINCESAS, ODIO A DISNEY....

- Chicos, levantaros del suelo e ir a vuestras habitaciones. -Ahora ya sé quién está hablado.

- Papá, necesito una orden de alejamiento. Esa niña es una acosadora. -Dice Uriah.

Ahora que lo pienso, mí tortura no fue ni la mitad de la de Uriah.

Pobre chico, estará traumado para siempre.

- Oh vamos, Sammy es un amor. -Dice mí papi.

- EL AMOR DEL DEMONIO!! .-Grito y levanto la cabeza tan fuerte que me doy con la mesa en la cabeza. -AAAAAAHHHH!!!.

- Yasmina, hija, levántate te llevo a tú cama para que descanses, ya que no quiero que mates a nadie.

- Papi, te amo. -Digo saliendo

de debajo de mesa y lanzandome a mi padre para que me coja.

- ¿Y yo qué? Yo también quiero que me lleves papi. -Dice Uriah abriendo los brazo como sí fuese a dar un abrazo.

- Sé un hombre hermanito, sé un hombre. -Digo mientras yo y mí padre salíamos del salón principal. -Oye, ¿donde está la demonio?

- Está en tú habitación durmiendo.

- ¡¡NO ME LLEVES ALLÍ PAPI POR FAVOR!! .-Grito.

- Sois muy exagerados, Sammy es una niña preciosa.

- No papi,debajo de esa "niña preciosa" se esconde King Kong.

Mí padre empieza a reírse por mí confesión.

- Tú y tu locura llegarán muy lejos.

- Oye, no te metas conmigo. -Digo haciendo pucheros.

- Como te amo pequeña. -Me dice.

- Como te amo pequeño. -Respondo a lo que empezamos a reinos.

La relación entre mí padre y yo es genial.

Yo soy su hijita pequeña sacada de un maliconmio, maniliom, mani... Bah no sé decirlo.

Un loquero de toda la vida.

Siempre me ha consentido. Pensareis, eres rica, porque no te iba a consentir...

Pues mí madre no me consiente, dice que así sé malcriar a los niños.

Pero, por favor, no es malcriar es ayudar a tú hijo a ser feliz...

- Hija, ya sueltame, ya llegamos a la habitación.

Levanto la mirada y me encuentro en la habitación de mis padres.

- Gracias, papi. Te amo.

- Denada, pequeña. Yo también te amo.

- Pero yo más.

- Ni en tus sueños más salvajes. - cuando dice eso estallo a carcajadas. - Que pasa haber, esos chicos me caen bien. Sobre todo el Niall ese.

¿¡OTRA VEZ TÚ!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora