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Narra TN


Fueron pasando los días, parece mentira que mañana empezarán los octavos de final. Entre los nervios por los partidos que realizaremos mañana y la presión que se empieza a sentir lentamente ante nosotras pude sentir un poco de tranquilidad al notar que mi madre tiene un poco más de colores en su rostro y con la vitalidad de una adolescente, espero que se mantenga así por más tiempo, así que por lo menos no estoy preocupada por su estado de salud.

TN: me voy- dije sonriéndole a mi madre y a la señora que la va a cuidar hasta que vuelva de los partidos en la tarde.

Madre: espero que te valla bien cariño- sonrió igualmente de pie junto a la cocina saludándome con su mano con cariño.

Señora: no te preocupes, la cuidaré bien- dijo ahora la señora levantando su pulgar y guiñando su ojo para darle confianza a la adolescente.

Además, tengo una presion que nadie más que un jugador a nivel nacional comprende. Si fracaso siendo libero mi imagen bajara y corro la desventaja que podría no ser llamada para próximos partidos o cualquier tipo de amistosos que son realizados cuando está próximo un torneo Nacional. No importa si mi equipo pierde, lo que les importa a los delegados es que nada malo me pase a mi o a mi imagen de "líbero prodigio". Son un fastidio.

No importa el costo, hoy entrenare dando todo y preparándome para lo que me pueda pasar mañana. Pero antes, tengo que pasar estas horas perpetuas de escuela; no es que me esté quejando, es simplemente que cuando se esta acercando los torneos no prestó mayor atención en las clases y pasó a ser un ente que está aquí sentada solo escuchando a un adulto hablando ampliamente de un tema que, seguramente, entrará en los finales dentro de un mes.

TN: de que sirve tener a Hitoka-chan de compañera si no la puedo usar en estos momentos- pensé entre risas mentales para no llamar la atención del docente y mis compañeros. De reojo note que mi compañera estaba escribiendo prestando atención a la clase

En una de mis cavilaciones pude ver, a dos asientos delante mio, a Hitoka-chan; quien sí está anotando lo de la clase y parece sumamente atenta al discurso, que en estos momentos parece Ruso para mi, que nos está dando el profesor de literatura clásica Japonesa. En esto momentos se puede escuchar el sonido de la campana y nunca en mis años de estudio desee tanto que terminara una clase.

Me acerque al asiento de Hitoka viendo que esta con la mirada perdida en el patio, al asomar la mirada pude apreciar a Hinata-kun peleando, como siempre, con Kageyama-kun por alguna de sus tonterías. La sonrisa pícara se me instalo en mis labios al ver que soltaba un suspiro de enamorada cuando Hinata sonrió ampliamente hasia nosotras.

TN: ¿algo que me quieras decir Hitoka-chan?- pregunté haciéndome la inocente mientras ella soltaba un pequeño chillido, parece que no noto mi presencia.

Hitoka: ¿de que hablas TN- chan?- pregunto notablemente nerviosa jugando con sus dedos, su inocencia es sorprendente, creo que ni ella misma se dio cuenta de ese y otros suspiros que ha hecho al ver al colorado.

TN: de que te gusta Hinata- le dije susurrando para que nadie más se entere de nuestra conversación, no soy tan mala amiga.

Hitoka: bueno... puede que si sienta algo por él... pero no estoy muy segura- dijo mientras bajaba la voz y con ella la mirada. Si que es tierna.

TN: ¿te gusta estar cerca de él?- asiente algo dudosa- ¿te molesta que haya alguna chica cerca de él?- pensó un poco y asintió después de un lento minuto- ¿cuando empieza con sus expresiones y palabras raras, lo ves de esa forma?- negó rápidamente- ¿sentís que tu entorno se ilumina cada vez que estás con él?- asiente con un poco más confiada, y a la vez sonrojada- ¿sientes mariposas en todo tu ser cada vez que lo ves o escuchas?- volví a preguntar y ahora el rojo es más claro que la cara de la rubia.

Hitoka: sí- dijo ahora sonriéndome ampliamente, se para para a continuación  abrazarme escondiendo su rostro en la unión de mi cuello con el hombro- gracias A-chan, eres de gran ayuda.

TN: de nada Hitoka, para eso estan las amigas- dije abrazándola aún más fuerte. La quiero mucho, tanto que es como una hermana, no quiero que la pase mal; pese a que, creo, que Hinata siente lo mismo por ella.

El resto del día paso sin complicaciones, pude prestar atención en las últimas clases y darme cuenta que, efectivamente, lo que nos dio el profesor de literatura ya lo sé de antemano. Cuando sonó el timbre dando como finalizado las horas de clases espere a Hitoka para salir juntas para tomar el camino hacia los gimnasios, cuando estábamos cerca pude escuchar algunos grito de los chicos que se acercaban a donde estabamos nosotras.

Tanaka: HITOKA-CHAN- gritó saltando encima de ella, la cual empuje para dejarla atras mio salvandola de un golpe seguro.

Nishinoya: A-CHAN- hizo lo mismo, asi que lo esquive dejandolo a los dos en el suelo, y a nosotras mirándolos desde arriba, por la posición en la que nos encontramos.

TN: hola Nishinoya-sempai, Tanaka-sempai- hice una reverencia como saludo para después mirar a Hitoka- nos vemos mañana- asiente saludándome con la mano.

Nishinoya, Tanaka: nos llamó sempai- alcance a escucharlos siendo rodeados por un aura de florecitas que no se donde sacaron. Yo empecé a irme tratando de pensar en otra cosa que no fuera a mis extraños sempai.

Nishinoya: ha, A-chan- me di vuelta para prestarle atención- te ves bien con el uniforme del Karasuno- dijo mostrando su dedo pulgar en alto, para ser empujado dentro por Sawamura-sempai, quien me pedía disculpas por parte del atolondrado líbero.

TN: ¿gracias?- dije un poco dudosa por las palabras dichas por Noya-san. Sin dale mayor importancia me fui al gimnasio de las chicas para empezar con la rutina.

No importa, cuando llegue al gimnasio me puse a entrenar a fondo todo lo que podía para que mañana no me arrepienta de lo que llegue a pasar en los partidos que realizaremos mañana. Después de todo, le tengo que demostrar a Ushijima que puedo estar en cualquier equipo y, aun así, demostrar que soy la mejor defensora en todo Miyagi y, como dicen los "especialistas" de todo Japón.

Líberos (Nishinoya Yuu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora