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Narra TN


Han pasado diez años desde que recupere la conciencia. Y ningún día ha sido igual al anterior, todo gracias a Yuu que desde ese día no deja que me aburra ni un solo segundo. Sin contar con la colaboración de sus padres y de su hermano, además de Hitoka que no deja de enviarme mensajes todos los días o llamarme.

Makoto no deja de acechar a las mujeres en Europa y yendo de cárcel en cárcel, sus habilidades en el deporte no son suficientes como para que lo contraten por más tiempo, no me sorprendería que rompieran su contrato con un equipo en Alemania. Me llamo su hermana para que le de dinero y sacarlo de la cárcel que se encuentra actualmente, al no conseguir nada de mi parte y mucho menos de parte de Yuu, Makoto se quedara allí por otros tres años. Igualmente la conciencia me esta jugando en contra en estos momentos y lo quiero dejar libre.

No lo are; tengo suficiente amor propio como para no hacerlo. En estos años me decidí, termine estudiando para ser doctora. No es que no quiera seguir siendo deportista, es simplemente que no termine muy bien después de recuperarme, mis reflejos disminuyen considerablemente y no soy tan ágil como antes, y por más que entrenara como antes mi cuerpo no consigue la motricidad de antes, así que me decidí a seguir medicina deportista, ahora ayudo a clubes académicos en Miyagi y también ayudo en la selección masculina y femenina.

Hablando de eso, dentro de poco empezaran las previas para seleccionar a los representantes de los juegos olímpicos, ya los hombres están entrenando hace más de una semana y las mujeres empiezan enserio ahora. Eso significa que estaré rodeada de hombres y mujeres apabullando con la noticia que ahora es más notoria que nunca.

Yuu: TN, baja que se nos hace tarde- grito desde la entrada. Salí de la habitación con paso lento tratando de no tropezar, últimamente estoy demasiado torpe.

TN: ya te escuche, además, no tarde tanto- dije con una pequeño puchero asiéndolo sonreír mientras le tiraban la remera hacia abajo.

Sakura: papá vos fuiste el que tardo en la ducha en la mañana- dijo defendiéndome una pequeña niña de pelo castaño con ojos igual de tirantes que Yuu pero con mi color de ojos.

Yuu: lo se princesa, es solo una broma-dijo mientras la levantaba en sus brazos abrazándola con algo de fuerza. Para tener cinco año es muy baja y liviana.

TN: vamos, que ahora si se nos hace tarde- dije saliendo lentamente por la puerta empezando a bajar la escalera despacio, siendo seguida muy de cerca de Yuu.

Después de estar siete años casados me sorprende que no sepa que no me gusta que me sobre protejan, se que tengo seis meses de embarazo, pero tampoco es para tanto ya pase por otro y no parecía ser la gran cosa en ese entonces. No entiendo porque tanto lío ahora.

Durante el camino, que hicimos en el auto que compramos hace ya varios años atrás, me dedique a entretener a Sakura mientras Yuu manejaba con maestría sobre las calles de Tokyo en este medio día soleado lleno de personas yendo y viniendo de allí para allá y con un tránsito de los mil demonios.

Cuando llegamos a la entrada del club de la selección japonesa nos identificamos y nos dieron el paso sonriéndonos amplia mente, estacionamos y nos dirigimos dentro del edificio a donde están las canchas tomados de la mano, con Sakura en brazos de Yuu semi dormida. Una vez dentro de las canchas me entrego a Sakura quien empezó a moverse levemente terminando por despertarse, una vez que fuimos vistos por los chicos nos saludaron sonriéndonos.

Hitoka: hola TN- hizo una reverencia para después ver a Sakura- Sakura-chan, ¿quieres ir a jugar con Masato?- pregunto sonriendo, mi hija asintió emocionada- está junto a los bolsos- ni lenta ni perezosa corrió a esa dirección- se parece tanto a Yuu.

TN: ni que lo digas- dije riendo mientras Hitoka me imitaba- ¿y, para cuando lo tendrás?- pregunté mirando su vientre avanzado.

Hitoka: está programado para dentro de diez días, pero dicen que puede que se adelante- dijo radiante, las dos parecemos "linternas" según todo el equipo.

Sora: si que trabajan rápido ustedes dos- dijo burlona mientras acariciaba su vientre de cinco meses, su primer hijo. Nos reímos las tres por el comentario de Sora.

El entrenamiento fue muy entretenido; Oikawa a mejorado considerablemente y Kageyama no se queda atrás, Wakatoshi sigue siendo tan serio como cuando estaba en preparatoria, Bokuto a dejado de ser TAN bipolar, ¡si hasta consiguió novia! no sabemos cuál es su nombre, pero tenemos que sacarle el sombrero por soportarlo tanto; Hinata a crecido definitivamente, ahora mide 1,78 mts y está muy feliz de su esposa e hijo. El resto de la selección son los normales así que no vale la pena decir mucho, al ser normales.

Oikawa: TN-chan, Hitoka-chan, Sora-chan, se han vuelto tan maduras- dijo de repente en el receso, mientras sus lágrimas empezaban a salir en forma de cataratas.

Bokuto: es cierto... nuestra líbero se a convertido en toda una madre y nuestra mánager igual- dijo mientras me abrazaba, junto a Sora, con bastante fuerza sofocándonos a las dos.

TN: Bokuto-san, no podemos respirar- dije ya tratando de separarme de él con gentileza. Bokuto al darse cuenta de nuestro estado nos soltó enseguida dejando que el aire entrara en nuestros pulmones.

Bokuto: lo lamento chicas- dijo apartándose con la cabeza baja, cuando dije que no era tan bipolar es que en realidad no le ataca tan seguido, siendo que ya hicieron cinco horas de entrenamiento y recien es su tercer recaída.

Sora: y no es para tanto Oikawa-san- dijo sacando toda la importancia de sus palabras y no prestando atención a Bokuto-san, debe estar muy acostumbrada a él.

El resto del entrenamiento paso a gran velocidad, Sakura y Masato no dejaron de jugar en ni un momento hasta llegar a caer dormidos. Una vez que llegamos a casa acosté a Sakura en su cama mientras Yuu se iba a bañar, cuando los dos terminamos de hacer eso nos encontramos en la sala sentados uno a lado del otro en el sillón de la sala, él pasando su mano en mi vientre y yo sonriendo. Esto es lo que siempre quise y que, antes, pensaba que no merecía.

Líberos (Nishinoya Yuu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora