Episodio 4 ✓

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[¿Es el chocolate un amuleto de amor?]

Kotoko se encontraba en el templo pidiendo por ella y sus conocidos, tomó un papel de la fortuna y sonrió al leer "La persona por la que estás esperando te aceptará". Emocionada caminó con sus amigas sin dejar esa esperanza de ser aceptada, y olvidando la cita que tenía con uno de sus amigos.

Por otro lado, una castaña caminaba mirando a sus alrededores y viendo una cafetería entró pidiendo una dona azucarada y chocolate caliente.
Buscando un lugar en donde esperar su pedido observó una cabellera conocida, se acercó a esa persona e hizo una mueca al reconocerlo y darse una idea del porque estaba ahí solo.
Sonrió rápidamente y se acercó a la mesa ocupada sólo por una persona.

-Buenas noches, Kin.

-Hola, Jae.- Habló sin demasiada emoción.

La castaña alzó una ceja y lo miró con una expresión ofendida.

-Yo también estoy emocionada de verte, pero tu emoción me conmueve.- Dijo con sarcasmo haciendo reír al otro.

-Perdón, no estoy en mi mejor momento. Así que dime, ¿Qué haces aquí?

-Me dí cuenta de ello. Vine a tomar algo, oh, espera, voy por mi pedido.- Se levantó cuando fue llamada y regresó.- ¿Y tú qué haces aquí tomando sólo agua?

-Estaba esperando a Kotoko, pero no creo que ella venga.

-Parece ser así. Kin, puedo notar que Kotoko te gusta, pero así como yo lo noto, tú también has de notar que ella está enamorada de Naoki. No podemos hacer nada contra ello, quizá no son la persona indicada para el otro. No te hagas más daño, la persona indicada llegará, sólo ten paciencia.

-Tengo la esperanza de que ella me corresponda.

-Lo sé, pero ella también tiene la esperanza de ser correspondida por Naoki. Sólo piénsalo, ¿Sí? No digo esto para hacerte sentir mal, sólo quiero lo mejor para ustedes. Pero si decides continuar te apoyaré y estaré ahí para tí.

-Entiendo, gracias.

-Lo siento, tengo que retirarme, nos vemos en el instituto, hasta luego Kin.

-Hasta luego...

Salió de cafetería comió su dona y tomó su chocolate. Al pasar por un parque tomó asiento y comenzó a pensar en como ayudar esos conflictos amorosos, tomó su cabeza entre sus manos cuando está comenzó a doler, entonces se levantó y camino lo más pronto posible a casa para descansar.

Al entrar cerró los ojos fuertemente al escuchar el ruido de los residentes festejando el ingreso de Kotoko a la universidad.

-¿Estás bien?- Murmuró el azabache en su oído.

Dió un pequeño brinco del susto y asintió.

-Lo estoy, sólo quiero descansar. Si me permites subiré.

-Adelante, desc- se vió interrumpido por la voz de su madre.

-Jae, querida, ven a comer pastel.

-Lo siento, pero-

-No seas tímida.- Tomó de su mano y sirvió un poco de pastel.

La chica miró con suplica al azabache para que la ayudara, este asintió y habló.

-Madre, Jae-

-Prueba el pastel, Jae. Es de zarzamora, tu favorito.

-Pero madr-

-Deja que lo pruebe, Naoki.

Jae sólo suspiró y tomó un bocado, era cierto que estaba rico, pero la crema pastelera del mismo le provocó náuseas. Se levantó rápido y corrió al baño seguida de Naoki.
Expulsó todo una vez estuvo en el baño, mientras una mano recogía su cabello para que este no molestara su rostro.

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