El mundo es horrible

23 4 0
                                    

Ella, mantenía una palma sobre su boca, mientras un par de lágrimas cálidas y llenas de dolor resbalaban por su mejilla suave y perfecta. En esta persona sí aplicaba ese término, en el chico a su lado también.
Digo, eran Ángeles, obviamente tienen que ser perfectos: la morena color caramelo, con ojos miel y pelo enchinado. El muchacho de piel blanca, ojos azules y cabello oscuro.
En fin, creo que entienden el punto.
—Es momento de irnos —le dijo él a ella. Le tocó el codo suavemente para despertarla de su largo trance.
Su rostro giró lentamente, con una expresión triste.
—¿No podemos quedarnos ni un poco más de tiempo? —cuestionó esperanzada.
—Conoces las reglas.
Y vaya que las conocía. El destierro era aterrador, y era algo por lo que no quería pasar... Sin embargo, lo que tenía frente a sus ojos era horrible: el mundo.
Era el año 2040 y la contaminación no podía estar peor, los niveles de inseguridad estaban por los cielos, la mayoría de los niños llevaban drogas en sus mochilas en vez de libros, las personas ni siquiera se molestaban en mirar cómo estaba su prójimo, nadie conocía de Dios... ¿Dónde había quedado lo bueno?
Su misión había sido estar por un año en la tierra, haciéndose pasar por oradores normales, tratando de hacer recapacitar a la gente, y habían fracasado. La fecha límite ya había expirado.
—El mundo es horrible —murmuró, con la voz entrecortada por el llanto.
El Ángel se puso a su lado y la acercó a él para consolarla.
—Sí, el mundo se hizo horrible.
—Y si no cambian, se quedará así —soltó, para dejarse llevar por las lágrimas.
El chico la estrujó más y dio un vistazo más desde la montaña en la que estaban.
—Y pensar que pudieron haber evitado esto.

- D.

Relatos Espontáneos ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora