Relatos Espontáneos ©

Tinieblas

Dicen por ahí, que en algún lugar del reino, hay un lugar de tinieblas, uno donde no se ve el Sol ni la Luna.
Dicen por ahí, que es donde las personas Sol y Luna se encuentran, donde nadie sufre, sólo hay brumas.
Dicen por ahí, que por la falta de Sol y Luna, era un lugar neutro, donde nadie sufría por el cambio de reino, nadie moría.
Dicen por ahí, que unos antiguos gobernantes solían ir al misterioso lugar para escapar de sus deberes, escapar de su Sol, de su Luna. Un lugar donde se encontraron y descubrieron que ni la noche más obscura ni el día más brillante, podría separarlos.
Dicen por ahí, que acudían cada día a su encuentro, cada vez más frecuentes, cada vez más cercanos.
Dicen por ahí, que se unieron en matrimonio, a pesar de ser tan diferentes y a la vez tan parecidos.
Dicen por ahí, que ellos crearon algo hermoso, un ciclo que sería su legado, un fruto de su amor. Así nació la Tierra, un lugar donde habría día, noche y el fruto de su ciclo, mágica y hermosa vida.
Dicen por ahí, que con la Tierra, las tinieblas fueron removidas a lo más recóndito.
Dicen por ahí, que Tiniebla quedó solo, a pesar de haberlos unido, y sufrió.
Dicen que todos los días nublados o con neblina, Tiniebla pasa a jugar con los terranos, sólo para salir de su soledad, y sentirse querido.

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