Disclaimer: MARVEL & Disney no me pertenecen. Esta historia si. Y siempre se me olvida poner esto. Me van a demandar (?).
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Natasha bajó su mirada hacia su tostada que seguía ahí encima de su plato. Ese último comentario tocó fondo. Y a pesar, que ella no lo estaba mirando en esos momentos, podía sentir los ojos de Steve que la observaban, tal vez esperando que ella respondiera a eso. Pero quiso omitir esta vez.
—Bueno, es mejor que nos vayamos preparando para salir —respondió Rogers y Natasha había salido de su pequeño trance, asintiendo—, pero antes comete tu desayuno o me enfadaré contigo.
—Está bien... —finalmente ella subió la mirada encontrándose con la de él y supo en ese momento en su corazón algo que no quería admitir aún.
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Iban entremedio de un pequeño camino que Steve había marcado para ir hacia el pequeño pueblo y no perderse. Desde su llegada al bosque en los Alpes, al ex soldado le había costado memorizar el trayecto de vuelta.
Natasha soltó una pequeña risa con esto, ya que le recordó a un pequeño cuento infantil alemán.
—¿Pasa algo? —volteó Steve a mirarla, ya que no entendía su risa.
—Me acordé de algo, eso es todo. De todas formas, no entenderías —respondió riendo. Steve hizo una mueca de desagrado y no iba a insistir. Natasha se dio cuenta de eso y al final le respondió — ¿Has leído un cuento llamado Hansel y Gretel? —negó con la cabeza—, te lo dije, no ibas a entender.
—Pero podrías explicarme igual. Tenemos al menos cuarenta y cinco minutos de viaje.
—Bueno... —comenzó— se trata de que los padres de aquellos niños los iban a abandonar en el bosque porque no tenían cómo alimentarlos —Steve abrió los ojos como platos al escuchar el relato—, Hansel, el hermano, escuchó esto y bueno, cuando los iban a dejar al bosque y se dormían, seguían el pequeño camino con piedras que había marcado, para poder regresar con su hermana a casa. Es un poco triste para ser un cuento infantil —se encogió de hombros—, ¿no crees?
—Diría más cruel que triste.
Siguieron caminando por un largo rato por aquel frondoso camino, entre pinos y arbustos bien crecidos. Natasha estaba maravillada con aquel paisaje. Le gustaba mucho estar tan cerca de la naturaleza.
Mientras caminaban, Steve pensaba muchas cosas. Entre ellas se preguntaba cómo estarían sus compañeros. Al menos sabía que Scott estaba bien porque era el proveedor principal de dinero para el equipo. Pero de Sam, no había tenido noticias hace una semana, al igual que Wanda.
De alguna u otra forma, se sintió solo sin sus compañeros. Su corazón lo sentía apretado, como si la angustia que nunca vivió, lo estuviera ahora carcomiendo de a poco. Se detuvo un poco, parando frente a un árbol. Natasha caminaba un poco más adelante cuando se percató que el rubio no la seguía. Ella volteó a verlo y se acercó rápidamente a él.
—¿Steve, te encuentras bien?
—Si... eso creo.
—No luces bien, ten —Natasha sacó de su bolso una botella con agua que había traído del refugio y se la pasó a su compañero.
—Gracias —tomó la botella que ella le había pasado para tomar unos cuantos sorbos. Cerró los ojos y soltó un suspiro.
—Pareciera como si te hubiera dado una crisis de pánico Steve... —dijo preocupada— ¿Hay algo que quieras contarme?
Steve hizo una pausa con respecto a la pregunta de Natasha. La verdad es que sí. Había tenido esas crisis hace más de un año. No sabía muy bien la razón, pero le echaba la culpa a todo el conflicto pasado, el estar solo más de dos años, el tener que sobrevivir y estar entre las sombras, no era una vida que él hubiera querido escoger. Pero no tenía otra opción. Steve había sido fuerte todo este tiempo en solitario, y a veces pasa la cuenta cuando tu cuerpo te manda señales.
—No te preocupes, Nat, estaré bien —abrió los ojos y se encontró con los de ella, que lo observaba expectante.
—Sabes que no puedes mentirme Steve —respondió. Lo conocía tan bien y aun Rogers no sabía mentirle a BlackWidow—, no te preocupes, no tienes que contarme ahora. Pero si te sigues sintiendo mal, tendremos que volver.
—Sigamos, se me pasará en el camino.
El rubio era terco cuando se lo proponía. Y Natasha no iba a declararle la guerra por eso. Asintió y continuaron su camino al pequeño pueblo.
Al llegar al pueblo, se encontraron con uno que otro lugareño recorriendo el lugar realizando compras matutinas. Pero se encontraron con un pequeño problema: El idioma.
En suiza existen cuatro lenguas oficiales, donde la alemana abarca la mayoría. Para Steve no era un lío, conocía varias frases en ese idioma o si no, con un poco en inglés bastaba, pero no toda la gente lo hablaba, ya que la gente que vivía allí tenía en promedio desde los cuarenta o cincuenta años de edad.
Llegaron a una pequeña plaza central. Habían unas bancas, un árbol enorme y frondoso y una pileta en medio. Ambos se sentaron ahí para descansar después de una larga caminata.
—Es muy bonito, pensé que sería algún pueblo lúgubre sacado de una historia de terror.
—Creo que estás viendo mucha televisión —esbozó una sonrisa. Aún estaba afectado por lo de hace unos momentos, pero ya se sentía mejor.
—¿Estás seguro que no quieres que te acompañe? —insistía Natasha. Steve negó.
—Compra tus cosas tranquilamente, nos reunimos aquí mismo ¿te parece?
Luego del pequeño descanso de quince minutos aproximadamente, ambos empezaron a caminar por las estrechas calles del pueblito. Decidieron que cada uno iría por separado y se juntarían nuevamente en aquella plaza.
Natasha pasó inmediatamente a un local de vestuario ya que lo necesitaba con suma urgencia, mientras Steve le mencionó que estaría al frente en el mercado para comprar algo de víveres y cosas que podrían faltar para comer.
Estuvieron alejados por al menos una hora. Los dos ex agentes necesitaban distraerse un tiempo a solas. Además, que Natasha estaba fascinada con los pequeños puestos de artesanía del lugar. Toda esa cuadra estaba llena de tiendas con collares, aretes, mantas tejidas y muchas cosas más que a la rubia le parecían hermosas, más si todo era hecho a mano.
Luego de ese tiempo, finalmente se reunieron en el lugar acordado, ambos con bolsas con las compras que habían realizado cada uno.
Steve educadamente, tomó las cosas de Natasha para ingresarlas en su mochila. Ella se había quejado, diciéndole que podía con todas sus cosas, que no era todo tan pesado, pero el rubio argumentó que por algo había traído aquel bolso, ya que vendrían a esto. Su compañera suspiró derrotada por él y le dio la razón.
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[Continuará...]
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¡Muchas gracias a todos y todas por sus lindos comentarios, sus votos, todo!
¡Nos leemos pronto!
Atte,
Kuchi_
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Three Years Later
FanfictionHistoria Post Civil War: ➡️ ¿Cómo fue la vida de Steve Rogers y Natasha Romanoff después de que se terminara la Civil War? Historia corta Romanogers ⚠️ADVERTENCIA⚠️ Capítulo 10 para mayores de 18. Si no lees contenido adulto, no sigas leyendo. - - ...